Algunos creen en la magia de los análisis bursátiles basados en la evolución de las gráficas, como si de un modo u otro en las gráficas del pasado se encontrara una explicación científica de lo que sucederá en el futuro, por eso de la repetición de los patrones de comportamiento.

Confieso que en una época determinada de mi vida sentí una gran afición por la llamada Onda de Elliot, un modelo de predicción bursátil basado en los números de Fibonacci.

Me han enviado este gráfico de la situación actual que refleja lo que técnicamente se llama un “dobe techo”. Podría conducir a un descenso muy, pero que muy agudo de los mercados de valores.

Es solo una posibilidad,pero suficientemente dramática para que a modo casi de mera curiosidad, quizás algo más, la traiga al blog.

Pero nadie debe alarmarse demasiado. Al menos por este chart.