Leer debería ser conversar con el autor del texto, siempre que se trate de libros de ensayo, porque si de novela nos ocupamos, leer es introducirte en el mundo confeccionado por el autor. Es claro que puedes en algún momento mantener una suerte de diálogo imaginario con alguno de los personajes de ficción, pero en todo caso el diálogo verdadero de producirse nace con el autor del libro que no ha utilizado interlocutores intermedios para expresar su pensamiento. Pero, y esto quiero resaltarlo, es una conversación en silencio, no obstaculizada por el ruido físico de las voces que se cruzan, cuyos tonos, en sí mismos, generan, provocan y transmiten emociones.
Cuando escribo algún artículo mantengo igualmente una suerte de monólogo, esta vez conmigo mismo, sea lo que sea ese mi-mismo. De nuevo en silencio, aunque aquí se ve ligeramente turbado por el sonido de las teclas al ser accionadas por mis dedos sobre el teclado.
Pero el silencio mas importante no es el propiamente físico, sino el emocional. El primero es ruido monótono que acaba por perderse en la lejanía de la concentración interior. El asunto es el segundo. El modelo educativo en el que hemos sido formados (mejor, deformados) implica, nos guste o no, una valoración del ego como premisa mayor. Es el enaltecimiento o el desaire al ego lo que primariamente nos importa en un diálogo, sobre todo cuando se ha producido con eco de público, con notoriedad, porque en ese instante el ego se siente afectado, en una u otra dirección, por el que pensará aquel con quien conversamos y todos los demás que sean recipiendarios de los sentimientos que provoca la conversación sostenida. En la mayoría de las ocasiones en las que me ha sido dado contemplar un supuesto y teórico diálogo, he percibido como si cada uno de los contertulios no escuchara al otro sino que estuviera atento a qué decir a continuación, y no con el propósito de argumentar de modo coherente, sino de quedar bien, de ganar, y si existe auditorio, si algún público presente en lo físico o presenciando en las ondas atiende a lo conversado, en casi todas las ocasiones se habla para quienes contemplan la escena, a quienes aplauden o reprueban, dejando de lado al interlocutor mas directo. En ningún caso se trata de aprender o de ilustrar. Se produce una perversión de la esencia de conversar.
El otro día, en un lugar que no concreto para no identificar sujetos, un tono de cierta agresividad surgió de uno de los presentes a continuación de mis palabras en las que pedía sugerencias y preguntas. Me extrañó, porque ni el lugar ni lo conversado impulsaban a esa agresividad tan notoria como sorprendente. Pero inmediatamente me percaté del fondo de aquel gesto al escuchar una queja, un lamento de quien hablaba por un comentario que yo había efectuado, seguramente con intención de que alguien meditara sobre sus palabras, pero en lugar de provocar ese efecto todo indicaba que dañé el ego de quien a nosotros se dirigía. Y cuando alguien habla impulsado por semejante sentimiento no suele ser capaz de coordinar un discurso coherente. El efecto es demoledor, porque no solo se percibe el ego dañado sino, además, la incoherencia del relato. Y, por si fuera poco, el daño impide el aprendizaje porque la emoción tapona el conducto del intelecto. Es superior ese tipo de extraño dolor por sentirse menospreciado, al deseo de obtener algún tipo de enseñanza, siquiera una reflexión. Incluso a la capacidad de construir con coherencia.
Precisamente por ello mantengo serias reservas acerca de la conversación como instrumento del aprendizaje. Si es privada, si carece de testigos, podría ser mas beneficiosa, pero cuando se expone a la luz pública el ego cortocircuita demasiados senderos interiores. Pero cuando la exposición externa se traduce en alimento o veneno del ego, en esos casos los daños colaterales son cualquier cosa menos despreciables, con independencia de que el aprendizaje brillará por su ausencia.
De ahí mi manía personal por el silencio. De ahí que me cueste la asistencia a actos teóricamente destinados a la conversación, al intercambio de pareceres, al aprendizaje mutuo. Espero que se me entienda.
Me gusta el silencio. No solo es que experimento que en mi caso resulta mas productivo, es que, además, me gusta, me siento bien. Por ello mi manía de escribir sobre el silencio, de definirlo como un estado productivo. Por ello mi noción de rezo, que, en mi idea, no consiste en hablar con Dios, sino en permanecer en silencio profundo de modo que, si quiere, y siempre quiere, sea Dios quien hable con nosotros. Es equivalente a aquello que decía el sacerdote gallego en la celebración de la Pascua de Enero: hacer sitio a Dios en nuestro corazón. Y si cualquiera de los sentimientos generados por la estimulación del ego, sea el orgullo o el dolor del menosprecio, se instala en esas dependencias, desgraciadamente no queda sitio para que alguien venga a ocuparlas. En ese caso el silencio se transforma en ruido. En un ruido que no solo es molesto sino espiritualmente demoledor.
El silencio, en mi idea, genera energía. Quizás sea mas preciso decir que permite que el interior se alimente de energía limpia. En todo caso da igual, porque lo que cuenta es la noción de carga energética. El ruido, por el contrario, la consume. Y la vanidad o el odio, por citar los mas característicos, son altamente consumidores. Por ello pueden, incluso, provocar lesiones orgánicas.
Una de las características mas demoledoras de esta etapa de la civilización occidental es el consumo de ruido, en sus múltiples variedades espirituales, por llamarlas de algún modo que permita entender lo que quiero decir. El cultivo del silencio es profundamente necesario. Recuerdo en mis tiempos de lecturas acerca de los procesos de iniciación. En la Escuela de Samos, regentada por el inolvidable Pitágoras, a los aprendices se les imponía tres años de silencio absoluto. ¿Debería imponerse el silencio como asignatura obligatoria en la Enseñanza Primaria?
Silencio, ruido, conversación y ego,
Mario, me encanta cuando hablas sobre el silencio. Tus palabras vibran de otra forma. Será por aquello de que se nos nota lo que nos llena.
El corazón es mas corazón.
Sin duda, como creo que ya he comentado otras veces, en mi opinión, la asignatura pendiente es
el silencio. Nos hemos pasado de rosca en eso de la velocidad…
Gracias
Buenas noches. Soy nuevo en el foro. Sólo decir que he leído el artículo y gran parte de los comentarios. Estoy todo el día con el ordenador y a estas horas mi vista no está para leerlos todos, cosa que por otra parte realmente me gustaría hacer y terminaré haciendo. Sólo deciros que trataré de abusar de mi silencio y con ello enriquecerme con todas las buenas ideas que se escriben por aquí, así como cuidar el respeto y educación que se respira y que aprecio mucho en las conversaciones. Un saludo a todos y encantado.
Estimado Enrique N:
Sed tus reflexiones y Tú, bienvenidos a esta nave, nuestro Foro.
Confiamos que cumplamos tus expectativas. Deseo que el respeto y la armonía, sean quienes te reciban con los brazos abiertos. Gracias, por elegirnos.- F.S.
Bienvenido Enrique; por lo que te leo en otros foros te aseguro que te encontraras como en tu casa.
Un saludo.
Muchas gracias, Fernando y Evergetes por vuestro recibimiento. Bien hallado y un saludo.
Otro saludo para ti. Bienvenido.
Muchas gracias, DOÑAJIMENA. Un saludo.
Que bueno el artículo.
Es un asunto que en términos artísticos es una herramienta recurrente, por la gran fuerza que tiene el silencio. Tanta que hay veces que causa temor.
En cuanto al ruido puede ser hasta ensordecedor. Será por esto que se emplea políticamente.
Y el último párrafo, tiene un gran valor por lo que calla.
Que grandeza tiene lo sutil o mejor lo elemental.
Una imagen del silencio. Ernest Jünger describe el grabado de Durero «San Jerónimo en su celda»
…nos muestra a San jerónimo escribiendo en su celda. El mobiliario lo componen libros, candelabros, vasijas, folios cubiertos de anotaciones, una calavera, un crucifijo. Debajo del banco hay un par de zuecos; la luz del sol penetra a través de los cristales emplomados.
Hay un gran reloj de arena a mitad de su recorrido, lo que quizá significa que la mirada del grabador ve plenamente entregado a su actividad al Santo. Nos encontramos en las profundidades del tiempo.
San Jerónimo se halla abismado en su actividad. La actividad del Santo no puede ser una actividad de copiar o transcribir, pues delante de él no aparece ningún libro en el pequeño atril que hay delante de la mesa, sino que ha de ser una creadora tarea de escribir.
Durante muchas generaciones este grabado, San Gerónimo en su celda, ha venido fascinando a espíritus contemplativos. Pues ¿a quién no le gustaría compartir esa calma……….?
….a todos nosotros se nos vendrá enseguida a la cabeza, al mirar ese grabado de Durero, el aposento más o menos modesto de un amigo nuestro (o de nosotros mismos) consagrado a los estudios eruditos o al culto de las Musas; el grabado nos hace recordarlo. Y es que hacernos recordar forma parte de la esencia de la obra de arte, la cual revela una relación que se halla oculta, pero que retorna siempre.
En todo cuarto de estudio y en toda habitación dedicada a albergar libros hay así un poco del ambiente, un poco del espíritu que reina en el grabado de Durero. Siempre hay en esos sitios aflicción, pero también hay siempre una grata placidez, pues en ellos está siempre presente la meditación. Cada uno de nosotros conocerá sin duda horas que ha pasado alli en silencio, horas durante las cuales el tiempo parecía, si no pararse, si fluir más holgadamente. Quizás estaba lloviendo fuera o en la chimenea ardía el fuego.
En la vida de los jóvenes, durante los años de formación y estudio, hemos pasado muchas horas en lugares como el de este grabado, en esas cabañas destinadas a pensar, en esos «pensaderos», donde crepuscularmente se funden en silencio el trabajo y el ocio.
Resulta difícil llevar consigo esa atmósfera a estados posteriores de la vida, sobre todo si apunta el éxito. Más no es imposible hacerlo, pues es una atmósfera que no va ligada ni a una edad determinada ni tampoco a la pobreza o a la riqueza. No es, en consecuencia,una diferencia de cultura o una diferencia de edad la creadora de ese peculiar bienestar; lo que en él actúa es, más bien, una diferencia de tiempo.
Gracias Pedro Escolano.
El cuadro en cuestión:
http://4.bp.blogspot.com/_K0XmFsJUPF4/THM6DXKBt7I/AAAAAAAAAoU/Ll6Pgt-XX1A/s1600/San+Sebasti%C3%A1n-Durero.+BNE.jpg
Junto con ese silencio «activo», existe, bajo el ojo del mismo artista, otro imagen de silencio; éste más «contemplativo».
http://www.herreros.com.ar/melanco/melencolia1.jpg
Excelente idea la suya de facilitarnos el disfrute de las imágenes del silencio grabadas por Durero.
Tambien Jünger contempla el grabado Melancolía, y escribe; «…vemos a un caviloso ángel que tiene en una mano un compás y se encuentra rodeado de un conjunto de instrumentos fáusticos, como cristales, balanzas, series de números. Contra un fondo cósmico arde un fuego de alquimista…..
….el angel, que se encuentra rodeado de los medios auxiliares del espíritu, parece absorto en pensamientos ociosos e incluso es posible que esté meditando en la vanidad de sus saberes y de sus obras».
En ambos grabados,nos encontramos en las profundidades del tiempo.
Es una descripción evocadora. Puede haber otras más evocadoras. Pero coincido en que esa imagen puede ser llevada a otros estados de la vida. Y cuanto mayor la práctica, más fácil.
Conozco un silencio tan solamente quebrado por el grito desesperado de un alma. Después de inquietarme y salir de mi ensimismamiento, me he sentido ridículo ante mi solidaridad: el grito era para saciar la sed de tabaco y dormir caliente.
Lugar: Segunda galería del Celular de Ocaña, mas conocida como El Tubo, año 1982.
…y esas voces que intentan con su murmullo constante, burlar como el toro el tedioso rencor…
PD.- No hay nadie del foro que sea funcionario de prisiones y nos haga una reseña de cómo era MECO en los 80?
Estimado joanlop :
No puede haber algo más desgarrador para el Ser humano que un grito lanzado a la esperanza del tiempo. Al oscuro dolor de la sentencia, a la fría soledad del camastro,… sin que haya una respuesta.
Gritos que se ahogan en el sendero de la condena, que quiebran la madrugada del encierro, que hieren con un ¿porqué? en cada esquina del chabolo.
Gritos empapados de silencio, sin poderse escapar del Alma rota y ahora,… presa.
Impresionante, joanlop.
GRACIAS por compartirlo.- F.S.
Asi es Elena.
¿Me mandaras un mail cuando sea ancianita?
Ayer en El Gato salio cuatro veces » Mario presidente» o algo así.
Empieza a sonar el nombre!!!
Buen finde.MA
Y si lo necesitas, te ofreceré mi antebrazo para ayudarte a caminar mejor….
Es una persona con la capacidad de mover masas, aunque creo que ese apelativo no va con él.
Un abrazo.
¡Lo siento! Quería enviar una imagen sobre le silencio como gesto de complicidaad porque me han gustado mucho las palabras del autor de este escrito, don MC.
Un saludo.
En el silencio radica nuestro ser más verdadero. La sociedad en la que vivimos, nuestra educación, costumbres nos han hecho treméndamente ruidosos de cuerpo y de mente. Invito a la reflexión en silencio.
Buen fin de semana.
Hoy Mario ha tocado mi tema favorito, el silencio; me refugio en el silencio horas, días enteros para reecontrar el equilibrio entre el mundo exterior y el estrés del trabajo y mi yo.
Practico la meditación sin método en el silencio dejando hablar a mi mente.
Esta sociedad está sorda por tanto ruido.
Y a veces no es tan difícil; cuando tus hijos se vayan al colegio, cuando tengas un día libre, cierra ventanas, apaga interruptores, haz de tu espacio un santuario de silencio en medio de esta selva mediática y escucha tu otro yo.
Sí, realmente hemos creado un mundo de ·mucho ruido y pocas nueces». Me encanta el silencio…sobre todo cuando oigo el ruido del agua, de las ramas en su vaivén por el viento…de la punta del bolígrafo sobre el papel…de las campanadas de aquella iglesia…..de los maravillosos escenarios que en mi mente se forjan cuando leo la Biblia. Bravo Mario, en el silencio sí que se crece..y se aprende. Buen finde.
Buenas a tod@s
Magnífico artículo y magníficos comentarios.
El silencio nos da esa limpieza de nuestro interior, con esa limpieza, nos reestructuramos, vemos nuestros propios valores, alcanzamos la senda de lo que realmente somos, lo que debemos hacer.
Creo que a través del silencio para conocer esos valores intrínsecos y ponerlos en contacto con los valores sociales, es el inicio para cambiar esta sociedad que realmente no está en la onda con esos valores intrínsecos.
Don Pepe, sabia reflexión la tuya, sin embargo, ¿no te da la sensación que la mayoría del auditorio de «ahí afuera» tienen sintonizados los 40 principales de las diez mil cosas del mundo? Creo que somos poquísimos los que estamos en la banda AM y podemos incluso, ser considerados como marginales por esa mayoría instalada en la algarabía mediática de la FM.
Moraleja: Las ondas hertzianas generan más
ruidoque silencio. 🙁P. S.: Aunque, la guitarra, un vinito y unas palmas por rumbitas, también ayudan para pasar la travesía en buena compañía. 😀
Querido Socrates:
Pocos sintonizamos Radio María pero seguramente estamos en la misma onda.
Aunque el silencio ocupe distancias físicas también llena conciencias.
Un fortísimo abrazo con gran presencia Vaticana.- F.S.
Apreciado Fernando: Hoy sí estoy pegado al transistor con la emisora de la Virgen, para no perder ripio de la amena narración de la visita del Santo Padre, Benedicto XVI, a vuestra entrañable tierra que eligió Santiago Apóstol, y mañana a la ciudad del gran católico Gaudí. Allá en Sobrado no lograba sintonizar Radio María (no habrá repetidor de señal próximo), pero tampoco hacía falta por estar en una posada de Cristo en compañía de monjes cistercienses y de buenos cristianos como tú. Otro fuerte abrazo a ti Santos de tu amigo y compañero de «suite». 🙂
No sé si se podría establecer diferencias entre conversar leyendo al autor de un ensayo, conversar participando en los comentarios de un foro o mediante correo electrónico. En todos ellos aparece la escritura como herramienta de comunicación pero no estoy tan segura de que en todos estos casos exista silencio emocional. Conversación escrita o hablada, entre dos personas o en grupo, silencio o emociones.
Pienso que las emociones impregnan todas y cada una de las acciones humanas, la emoción es consustancial a nuestra condición. El silencio es divino. Beber de la fuente de lo divino a través del silencio nos permite estar conectados con nuestra esencia profunda. La belleza de una pieza musical compuesta por una combinación de notas y silencios no puede prescindir de ninguno de sus componentes. Si pretendiésemos transformar las notas en silencios no habría música. Algún día volveremos a ese estado y saldremos de la dimensión espacio-tiempo para disfrutar de él sin límites, se acabará nuestra música, pero mientras tanto, somos humanos y debemos a aprender a convivir con las emociones, con sus notas y sus silencios. No podemos eliminarlas completamente aunque experimentemos a menudo el estado de silencio, podemos ralentizarlas, transformarlas, pero jamás eliminarlas. En cualquier caso, podemos distinguir entre experimentar emociones positivas o negativas, unas cargan energéticamente, las otras nos drenan y agotan. Esta simple diferenciación nos ayuda a discernir cual debería ser el estado emocional más adecuado de ser vivido e intentar transformar las emociones negativas en positivas, trabajo que a su vez se beneficia de la práctica del silencio.
Volviendo a la comunicación escrita o verbal, ambas transmisoras de emociones, mediante palabras y silencios, es cierto, o al menos, yo así lo creo, que poseen cualidades diferentes. En la escrita predomina la reflexión e interiorización y en la verbal la espontaneidad y la reacción. Ambas pueden enriquecerse mutuamente. El tono de voz puede aportar intensidad emocional que luego puede interiorizarse por escrito y la reflexión escrita puede aportar claridad a la comunicación verbal. Quizás por ello el foro se enriquece en sus debates cada vez que se han producido encuentros personales y conversaciones verbales entre sus participantes.
¿Qué fue más importante en el encuentro de Sobrado, el silencio o las palabras?
Hola Esther,
está muy bien todo lo que has escrito.
Además, para mi, tú misma has respondido con tu escrito a todo, o casi todo en relación con este tema. Y yo creo que es todo esto que tu has reflexionado, lo que el autor de este artículo, el Sr. Conde, quería transmitir con su escrito.
Que cada cosa; hablar, escuchar, dejar hablar, saber hacerse escuchar, todo tiene su verdadero momento.
Lo importante de todo esto, es saber cuando toca -qué- para vivir en armonía con nosotros mismos y con los demás.
Esto, mal usado o en momentos desafortunados, es una de las causas por lo que la gente en general, viven en muchas ocasiones situaciones «disparatadas», desequilibrios, en su relación comunicativa para con los demás y para consigo mismo.
En el encuentro de Sobrado, como en cualquier otro encuentro, el hecho de reunirse para muchos por primera vez, es evidente que las palabras como enlace, suponen un medio importante y necesario. La situación lo requería.
Pero el silencio como acción positiva, según en que momentos,
también tuvo su Roll.
Saludos.
Gracias por responder a mi pregunta Sananda.
Por lo que explicas todo fue importante en ese encuentro, el silencio y las palabras. Deduzco que encontrasteis la música, vuestra música.
Un cordial saludo
Me gusta el silencio pq es un diálogo conmigo misma desde el respeto y la observación.
Quién visita los espacios de silencio, lo puede hacer porque huye, porque quiere recuperarse de una derrota, o porque su energía y su poder lo abandonaron. Y este ausente templo puede ser su refugio. Sea como sea, uno no vuelve a estos frios parajes para buscarse a uno mismo, para hablar consigo mismo, eso lo hace siempre, constantemente,es más quien habla consigo mismo no se respeta, solo escucha la voz del tirano-ego y tampoco se observa quien así obra, pues para observarse hay que ser el mejor cazador, ese que es capaz de cazarse a si mismo y verse tal como es y a partir de ese momento de autoconcimiento deja de cumplir años (sociales de reloj suizo)y ya solo quiere cumplir ..HOY SOY MEJOR.. Hoy celebro que he completado una parte mas de mí mismo, por eso soy mas, soy mejor
Hola Domingo, también se puede aprender a cazar con meditación Vipassana,la conoces??
Buen día.
Sobre cuando leo, no converso con el autor, pq no dialogo con él…sólo le «escucho» atentamente y sí, me empapo de él a través de sus palabras y, a veces, creo acabar conociéndolo.Sabiéndo de él mucho más de lo que cree que se puede saber,pues en su ejercicio de interiorización saca a la luz tantos «yos» como personajes, situaciones…Ficción, realidad?? Todo lo que está adentro está afuera…abajo, como arriba…todo Es.
Solo soy un pobre inculto del campo.
Si te refieres a echarse una siesta, eso sí que lo sé.
Pero sí, tengo amigos que hacen meditación en centros con maestros e incluso que escriben libros, mira por si te interesa mi colega Rafael tiene una página web y promociona su libro y su conocimiento por el mundo, echale un vistazo: http://www.transformacionconciencia.com/
otras son gurúsas, ahí, en centros de meditación. No digo que sea malo, pero engañoso SI, los conozco a todos, sobre todo a sus egos, los que mas se manifiestan.
Yo no tengo respuestas, quizás preguntas, pero para mí .andar los caminos que tengan corazón. Mi corazón es mi motor y mi guia, solo él sabe donde debo ir.
Fui una vez a un curso y estuve yendo a clases y la verdad que…¡¡salí por patas!!Era un jovencito de 18 años con un millon de inquietudes(por suerte ahora solo tengo cienmil) que veia un «aqui pasa algo raro»…pues vamos a ello, vamos a una verdad a ver…
Los del curso zen se hallaban transportados pero a su vez tirandose puntas a cada instante y poniendose verdes los unos a otros por detrás¡¡hasta el supuesto guia!!Que si un bodhisatva noseque mahasatva nosecuanto, de pronto se abrazaban, de pronto se faltaban el respeto,no vi mas que lo mismo una y otra vez, vi fanatismo y encerramiento…»en teoria lo bueno»es lo contrario y como bien dices, mientras hagas lo que te dice el corazón, no hace falta ni que se llame budismo taoismo islamismo..todo es lo mismo en su raiz, los canticos sinagogas y alabanzas son ya «complementos»(a mi vera)
Un saludo 🙂
Hola Domingo, mira esto, por si te dice algo.
http://vimeo.com/8695330
Tampoco vayas a despreciar el momento de la siesta o del sueño en general, por que es un espacio en el que ocurren cosas que luego no recordamos con la mente consciente…
Bueno,yo hago meditación, pero no conozco gurús, ni maestros…nosotros somos nuestos propios maestros o deberíamos serlo.
Feliz tarde.
He visitado tu referencia. No es para mi, a vosotros os gustaría “PROCESO BIOENERGÉTICO DE TRANSFORMACIÓN DE LA CONCIENCIA …GUIA EXPLICATIVA de los diferentes niveles de conciencia-energía-materia en los seres humanos.
http://www.transformacionconciencia.com/ es de mi amigo Rafael, él si va de ese rollo. Yo te puedo pedir un favor que visites un blog que empecé hace tiempo y que había olvidado http://pieldetoro-domingo.blogspot.com/ y que dejes un mensaje o colaboración para aquéllos caminantes interesados. En cuanto al sueño, te diré lo que a mi amiga gurú de meditación, a su aseveración de que todo está dentro contesté :solo si conectas unicamente con tu percepción interna, pero la auténtica la que nutre tu vida, tu conciencia es la percepción exterior la que te conecta con el universo, a su pregunta de si sabía si era el soñado o el soñador, le dije que yo SI, que siempre supe cuendo era y lo que era. De todas formas te agradezo que me hayas informado de buen corazón, y que visites y colabores en el blog para goce de todos.
Para una mejor comprensión de nosotros -campurrios- te diré que los de la ciudad estudiais hoy los descubrinientos campurrios del pasado, que cultura viene de agricultura, que proviene del aprovechamiento de los conocimientos, procedentes de la pura observación, así observando el cielo y la formación de estrellas, aprendimos a intuir y predecir las variables de lluvia, viento, posibilidades de exitos de nuestras cosechas, la que ponéis en vuestras mesas, del estudio de las fases de la Luna, a saber cuando plantar, regar y abonar, y cuál es el momento óptimo para recoger las plantas medicinales, dónde y como, de ahí proceden los estudios de Medicina, Astronomïa, Matemáticas, Geometría (para plantar aprovechando el espacio, Dinámica (estudiar el movimiento e integración) Las artes adivinatorias (sabiendo lo que se veía, adivinar lo que se esconde) En fin, ya nos conocemos mejor.
Me abruma y retrae la fineza y elocuente sutileza de tu estilo, la esencia a flores y tardes de ocaso que destilan. Ten cuidado con el silencio y el aumento de energía, yo empecé así y voy diciendo cosas como estas «El guerrero-viajero, en su lucha por el conocimiento y andando por el osuro mar de la conciencia, se apeó en -La Estación Tierra-,…
La mayoría de los guerreros-viajeros se quedan ¿definitivamente? en la Tierra.
¿Porqué una simple estación -la hermosa tierra- ha interrumpido el viaje de los guerreros viajeros.
¿Se acabó la línea? ¿Quizás hay un salto, un cambio…?
¿Fué quizás una fuerza-remolino-contrasentido-contracorriente- la que se opuso confundiéndoles, dándoles la im-presión de moverse, pero estando quietos? ¿Acaso somos pólipos agarrados a la firme roca, pero nuestra naturaleza que es puro ensueño, nos lleva a creer que nos movemos, incluso corremos, viajamos a otros paises y ahora a otros lugares del sistema solar?
Sólo aquellos que siguen un camino con corazón, con total disciplina, que trabajan el silencio y aumentan su energía, son capaces de liberarse de las garras de esta fuerza que nos aprisiona a todos.
Entiendo perfectamente ese lenguaje que es el que prOcede de los silencios q llevan a ver más allá de esa “realidad” impuesta, imperante, mortecina, excluyente, que nos aleja de nosotros mismos y de manifestarnos como lo que realmente somos…Sí, es en el silencio y desde él desde donde trascendemos los límites temporales, espaciales, mentales y nos reconocemos en la esencia del ser…y no suelo hablar de lo que no conozco; es mi experiencia, no una opinión labrada de múltiples lecturas; esto es lo que intento aportar aquí, autenticidad en primera persona. Y sí, el silencio, silencio interior, es un gran compañero de viaje.
Sobre esta «gran estación intermodal» que es la Madre Tierra, que amorosamente nos acoge para continuar en un proceso de evolución aceptado por nosotros «en otro momento»…¿Qué decir? Sólo agradecer su infinita generosidad…
Para mi en la alegría se engloba todo, es la clave de todo entendimiento.
Gracias por tus comentarios y feliz día, feliz viaje.
Disfruto de la soledad, la voz me habló cuando lo perdí todo…me agarré a una luz, a un algo o todo y aquí estoy…me dice cosas extrañamente conocidas, ello que no entiendo…Ahora estoy cansado y deslumbrado que soy nuevo en la pagina 😮 , he sacado mucho ultimamente, solo se que me viene bien hablar de cosas banales para proseguir con ella, espero que no le importe…
Me ha gustado mucho su articulo. Por diversas experiencias tuve que andar solo sin elegirlo, lloraba y lloraba, me lamentaba¿que he hecho?¿será porque soy feo, soy tonto, soy flojo?Una vez fui mi amigo….¡no quiero otra cosa mas que estar solo!! :S que bello es… ¡¡ser amigo de la persona que mas tiempo estará en tu vida!
No confundamos puedes estar transportado o como quieras, pero nunca bajes la guardia, ser un guerrero-viajero es estar atento. Puede que entraras en aquel cobijo, buscando la perfección, la esencia pura y parece que no estaba, hablamos de pureza y de libertad, como si de verdad existieran, como si supiéramos lo que son. En las complicaciones reside la esencia de la economía moderna, en la sencillez la esencia del espíritu. Hace tiempo abrí un blog http://pieldetoro-domingo.blogspot.com/ que había olvidado y lo hize para precisamente estos casos, te pido por favor que entres y con nuestros comentarios comenzemos a andar por un camino con corazón
Muchas gracias Domingo, le echo un vistazo…No si otra cosa no…pero transportado estoy todo el día XDDD
Dejemos de buscar hacia afuera lo que está por dentro :)que no es mas que…¡el cosmos infinito de todas las cosas!
La gente seguirá siendo gente allá donde andes, en todos lugares que he estado tendemos a ellos porque dejamos de mirarnos a nosotros mismos y observamos a los demás…Está por dentro, no busques no busques que todo cuanto necesitas está ahí 😛
Te lo sabes ya de memoria………
Pués así es….
Paciencia, no te desesperes. Y sobre todo no dejes nunca de ser tu mejor amigo.
No es que quiera se maestra tuya, solo que te comprendo muy bien en todo lo que has dicho, en todos estos comentarios.
Esto le acurre a tanta gente…..
que al final todos descubrimos la misma verdad, que es una sola……. Pero Grandíisimmaaa y profunda….. que todo lo abarca, y por ello, da para tanto……
Como ha dicho el compañero Domingo, lo principal es la sencillez y pureza de corazón.
No te desesperes ……..
Saludos cordiales a los dos, así como a Anita.
Gracias por tus palabras 🙂
No hay que desesperar¿pa que? Solo hay que sacar hacia afuera, solo hay que compartir… Intensidad es lo que toca ahora, pues bueno…que bien recito lo que he leido, soy un completo embustero… 😮