Desde muy chicos hemos aprendido a agarrar, a aferrarnos, y lo hemos hecho tanto y tan bien que requerimos después de un largo aprendizaje hasta empezar a soltar. Nos enseñan y enseñamos a buscar lo propio, lo que nos diferencia, lo mío, lo que me pertenece. Y con ello, como derivada casi inevitable, a poseer, a tener, a cerrar el puño para que nada se escape. Y el puño aprende a cerrarse y además a bien cerrarse, marcando a su alrededor las venas del brazo y del antebrazo.
En el último aliento, cuando expiramos (y todos hemos de expirar: esta idea me pide estar en paz con todos los seres) se produce el mayor ejercicio de soltar. Nos soltamos de nuestra vida, de nuestra personalidad, que hasta entonces venimos identificado con nuestra realidad. Nos soltamos sin capacidad de agarrarnos porque todos los asideros ya han desaparecido. Nos soltamos, y en ese momento los que asisten a nuestro óbito se abrazan y lloran, y en un breve momento, como si fuese una punzada más allá del corazón, entienden lo sagrado de todo y la hermandad de todo. Es un fugaz instante en el que recuperamos la humanidad.
Este ejercicio del último soltar tiene su belleza y su poesía, pues significa también ponerse en manos de algo grande y superior, además de retornar a la esencia. Volvemos a ser espíritu, ya sin el disfraz terrenal, y ese espíritu vuelve a ocupar su lugar en el Logos, más allá de ninguna peripecia, querella, sufrimiento, no digamos de ninguna tristeza. Soltamos así para ganar, para fundirnos en esa otra realidad, que es la realidad verdadera más allá de esta ilusión tan breve. Porque este espacio terrenal es bien breve.
Vengo pensando sobre situaciones tensas que he vivido o que han vivido recientemente personas de mi entorno. Pueden ser puntuales o más de fondo, afecciones pasajeras o enfermedades del ánimo y de las relaciones muy profundas. En muchas de estas situaciones siento que lo que falta es soltar, y que mientras ese soltar no se produzca será imposible generar paz y armonía. Es más, ese soltar es esencial para la sanación. Y ese soltar puede revestir muchas formas: perdón, humildad, silencio, oración consciente, amor, llanto, reencuentro verdadero. Tiene diversos vestidos, sí.
Percibo que nuestro progreso en la evolución se ralentiza una y otra vez por el agarrar y por nuestra dificultad en soltar. Nos agarramos a esto o aquello, unas veces con razón (o con percibida razón) y otras sin razón. Y damos vueltas y vueltas así agarrados, entrelazados, desgastándonos en una espiral sin límite que comienza para acabar de nuevo, una y otra vez, durante mucho tiempo, durante muchos eones como refiere el budismo. A veces pienso en el perro de presa que no suelta su presa, en este caso otro perro de presa. Un baile triste y largo, en el que los dos dan círculos, desangrándose, agarrados en esa danza mortal. Alrededor todo queda enrojecido por la sangre. ¿Cuál de esos perros pensó en este final cuando jugaba con sus hermanos cachorros en los primeros días de vida, en qué no cabía ese agarrarse final, y en los que todo era descubrimiento y alegría?
He estado recientemente con una pareja que se ha separado, primero me he visto con ella, luego con él. Siento que él no lo ha hecho muy bien, pero ha entendido que tenía que irse y se ha ido, estas cosas nunca son fáciles. La convivencia se ha roto. Hay una ruptura tras más de tres décadas de vida en común. Tras la ruptura hay un aferrarse, un lío colosal, una guerra de situaciones, de percepciones. Pronto puede surgir una gangrena que se lleve a los dos por delante. Hay que soltar. Es la única forma de que la vida no se enquiste, de renovar la vida. Y la vida requiere renovarse.
Recientemente he tenido algunas discusiones. Vuelvo mentalmente sobre ellas. Pienso esto y aquello. Ahora soy yo el perro de presa… Hay de nuevo esa vivencia, ese entrelazar, me muerden, muerdo, muerdo, me muerden. Puedo continuar pensando en ello. Puedo también soltar. Hay que soltar.
Los hombres nos decimos: me hiciste esto y aquello, hay que reparar, no te irás de rositas… Nos cuesta soltar, nos entrelazamos más, añadimos a un karma ya largo y complejo un nuevo karma. Volvemos a incidir sobre la ley de la causa y el efecto, retrasando el inevitable pago de todas las deudas pues generamos nuevas deudas, nuevas relaciones que hay que reparar y sanar. Más kilos a la mochila, ya casi no podemos andar. Los padres se lo recuerdan a los hijos. Nos decía El Roto en una viñeta hace unos meses: “algún día, hijo mío, todos mis odios serán tuyos”.
Agarrar puede significar aferrarse a la muerte. Urge soltar, en todos los frentes, en todos los ámbitos. Si no soltamos enfermaremos más de lo que ya estamos. Lo entendemos cuando vemos las estrellas, por la noche, como el hombre que nos dibuja Roerich, que parece uno con el universo. Lo entendemos en ese momento final, cuando la mano que sostenemos ya se suelta porque no le queda vida, cuando escuchamos lo que ha sido la última respiración del ser amado. Lo entendemos en algunos momentos puntuales, pero no le hacemos mucho caso.
Dicen que la voz del alma habla muy queda, con mucho sigilo, y que cuando nos habla andamos con frecuencia muy distraídos. Ahora es el momento de escucharla, de buscar ese susurro, de entablar un diálogo demasiado tiempo callado. Creo que podemos elegir vivir mucho más ligeros, de cuerpo y de mente. Tenemos que olvidar el orgullo terrenal para abrirnos a lo nuevo. Lo nuevo nos espera, pero nos pide soltar, para vivir como aquellos lirios de los que se nos habló con tanto amor hace tanto tiempo.
Soltar,
Esta noche he soñado con mi padre, que murió hace años. Lo sentí muy cerca, hablaba con él, fue un sueño muy intenso y todo me pareció muy real. Sentí despertarme , la verdad.
Pero al despertarme he leído tu artículo, que me ha gustado.Es verdad que tenemos que soltar amarras, dejarnos vaciar de tanta insensatez y tontería que a veces nos ocupa. Y dejarnos llenar por lo bello, lo bueno. Por Dios, en definitiva,autor de todo lo mejor que vemos y sentimos a nuestro alrededor.
Si lo pensamos…todo lo que existe: tú, yo, nosotros todos, nuestros pensamientos, las sensaciones, la luz y lo que no conocemos. Todo no es dado. Lo recibimos. Y desconocemos el por qué. Ni siquiera tenemos certeza de que haya un por qué.
Joaquín tiene mucha razón cuando habla de dejar-se. Dar-se. Todo no es llegado y nosotros asumimos una posición inquisitorial, buscando el por qué, como fruto del desconocimiento y el miedo. Nuestro miedo inicial, en las primeras etapas de nuestra evolución como seres humanos, ha mutado en soberbia en esta infancia del Ser que estamos viviendo. El siguiente paso será el abandono. El entregarnos en las manos de aquello que nos haya creado y en las manos de nuestros hermanos, como partes que son junto a nosotros de un único todo. Siento insistir una vez más por repetitivo, pero éso es el cuidado.
Saludos!
Hermoso texto, Joaquín, hermoso, profundo, íntimo, sincero… Se me ocurre decirte tantas cosas a mi manera…
Hablas de ir ligero, de soltarse, soltar lastre, esa pesada mochila, desanudarse que es un poco como desnudarse e ir al aire, Joaquín… Hay que ser ligero, tener los pies ligeros y estar serenos ante este paisaje de desolación… También la pesadez de los grandes ideales, los sentidos trascendentales, las grandes creencias, nos impiden movernos con libertad y gracia… Hay que vaciarse, Joaquín, de tantas cosas…
Cuando uno vacía la mente se encuentra en medio de ese “Gran Vacío”, tú lo sabes… Cuando un hombre se encuentra“ sentado en el olvido”, con la mente completamente vacía, las cosas van a “su vacío” carentes de ego, tal como son, van y vienen sin obstáculo ni miedo en el proceso cósmico de la Trasmutación… —y el hombre experimenta subjetiva y personalmente la trasmutación de las cosas. Su mente es como un espejo que refleja todo sin la menor distorsión o desfiguración. Su actitud de observador tranquilo de las cosas le lleva a aceptar que nada merece ser rechazado ni nada es digno de ser perseguido, es un hombre imperturbable… Un paso más allá y alcanzará la fase más elevada de la “indiferenciación”, en donde las cosas se disuelven unas con otras, pierden sus límites, se “caotizan”… ––concepto éste que tiene mucho que ver con la “Unidad de la Existencia”, la experiencia del Ser de la mística sufí, de Ibn Arabi, por ejemplo, o del hombre nuevo “más allá del bien y del mal” que anuncia y reclama Nietzsche…
Te recuerdo unas palabras de Zhuangzi: “Morir y vivir, subsistir y perecer, verse en apuros y cubrirse de gloria, ser pobre y ser rico, ser hábil y ser incompetente, caer en desgracia y recibir honores, tener hambre y sed, sufrir de frío y de calor, no son sino cambios constantes de las cosas y resultado del incesante funcionamiento del Destino. Todas esas cosas se substituyen unas a otras ante nuestros ojos, pero nadie puede seguirlas, mediante su intelecto, hasta su origen real. Sin embargo, estos cambios no poseen poder bastante para perturbar —al hombre “sentado en el olvido”—, ni pueden entrar en su “tesoro más secreto”… Un hombre así, para Zhuangzi, es un “hombre perfecto”… aunque no haya alcanzado todavía la última etapa del proceso: la de la ausencia de Muerte y la ausencia de Vida, el “límite extremo del conocimiento”. Estar por encima de la vida y la muerte supone identificarse y unificarse con lo Absoluto, con la Vía ––el “Dao”––, porque la Vía está más allá de todo ello. Se trata de un estado de completa quietud en el que nada queda ni resuena del mundo sensible… Yo sé, Joaquín, que sabes de qué te hablo…
Hay que ir ligero por la vida y hasta en la muerte… Joaquín, seguramente has leído algo de mis cosas y sabes o intuyes que soy “un viajero”, un viajero místico para más señas… El viaje en el que estoy (y soy), del que escribo, es una experiencia íntima y profunda del devenir y las transformaciones del mundo y la vida, un sentimiento inefable que renace a cada instante, se renueva en cada sensación desconocida o se estremece por las sutiles diferencias con aquellas que creía atesorar en mi corazón, esa memoria no exactamente biológica. Hay quienes van lejos y no ven nada, no sienten apenas… No soy de esa especie. Aborrezco la inmovilidad —y no sólo de quien se enraíza y hace vegetal por capricho o cobardía, sino sobre todo de quien aun raudo e impaciente fluye inconsciente, ciego e invisible…
Partir es un modo esencial de ser viajero, esencial; llegar es sólo una manera de estar por un tiempo, contingente… Bueno, morir es otra cosa… Para el viajero místico llegar a cualquier lugar es casi una fiesta de despedida, vísperas de la ceremonia de partir nuevamente, suspenderse en el columpio o la hamaca bajo el umbral por un tiempo indeterminado. Los viajeros moramos huéspedes en umbrales y soportales transitorios, bajo el puente, en el atrio de los templos y en los porches de los palacios. No hay que permanecer más de lo necesario; apenas un descanso para reponer fuerzas, restaurar ilusiones, contemplar maravillas, fabricar artesanalmente recuerdos para el camino. Ningún viajero místico quiere morir en su cama, sino sobre el caballo —como diría Montaigne. El Viajero parte y llega sin dramatizar estos acontecimientos; es su deber. Sabe que ya falta menos, que hay que reducir el tiempo de espera… El verdadero viajero rechaza cualquier búsqueda del tiempo perdido —esas cosas son de traidores y arrepentidos—, por el contrario, reivindica el tiempo por devenir, ir a su encuentro. El viajero místico va hacia a la muerte seguro y confiado; la muerte siempre llega, es decir siempre llegaremos a nuestra muerte… a su tiempo…
“Ningún viaje es tan hermoso como el que se sueña…” ––Paul Morand. Y qué sueño más hermoso que un sueño permanente “sentado en el olvido”, ¿no?, Joaquín… luego de saber que has hecho lo que tenías que hacer en la vida… ¿verdad?
Más que un saludo, te abrazo y suelto al tiempo, desde aquí al otro lado…
Pau Llanes
Hola Pau,
¿Dónde y cuándo y no porqué, dejaste el lastre para viajar de ese modo?
¿Es, por otro viaje que no te satisfizo?
¿
No llevas nada material de tu vida anterior, si la tuviste?
¿Es consecuencia de dar y soltar tanto a otros ?
¿Es eso, un tiempo perdido?
Decía alguien que seguro bien conoces, que para saber lo que es el tiempo, hay que entender que es la eternidad.
un abrazo
Hubo muchos dóndes y muchos cuándos, jmm… Y no es una salida por la tangente, de verdad… Acaso la penúltima etapa hasta donde fui acarreando demasiado equipaje fue un lugar perdido de la Sierra Madre Occidental en México, una noche de abril de 2007, bajo todas las estrellas del firmamento a la vez ante mis ojos. No era la Vía Láctea, era un océano de leche por decir algo. Imagina… ¿Recuerdas la Noche de Saint Rèmy de Van Gogh? , pues así como la pintó es lo más que se parecía. Galaxias-nebulosas de luciérnagas gigantes arremolinadas alrededor de su propia estela… Luego bajé de la montaña al desierto. Fueron días de caminar sin equipaje; pesa demasiado en el desierto, jmm… No necesitas más que tus pies y tus sentidos despiertos… Encuentras el agua que necesitas para beber; la gente que comparte su comida contigo… el fuego que te da calor por la noche apenas pesa lo que pesa una cerilla… el resto lo encuentras en el camino… ¿Para qué más en nuestros paisajes desolados? Incluso lo que retienes en tu vejiga hay que ir soltándolo de vez en cuando para calmar la sed del desierto… es un acto de agradecimiento y compasión ni más ni menos… ¿Entiendes lo que quiero decir?
No fue por nada insatisfactorio anterior, hubiera sido una huida cobarde hacia delante sin sentido… No, jmm, vas caminando por la vida y aprendiendo a reconocer, nada más… Una noche todo son luciérnagas, es suficiente para alumbrar el camino… lo sigues y ya…
No hay vida anterior ni posterior, ni muerte previa o postrera… sólo camino que se transforma y trasfigura… La memoria pesa, los recuerdos son un equipaje excesivo si quieres mirar hacia adelante, lejos, al encuentro del tiempo por devenir, además distraen y confunden… Cuanto más atento estés a las cosas que suceden en el camino, sus paisajes, menos tentaciones a recordar, es decir más ligero, algo así como un olvido funcional…
¿Algo material? ¿Te parece poco yo y mis vísceras y mis sentidos? Llevo adornos que me identifican, nada más… A lo peor son restos residuales de mi antigua melancolía…
No es consecuencia de nada en concreto. No creo en la mecánica de las causas y los efectos por ejemplo… Creo en el «amor fati», en la voluntad del hacer, en la prudencia y en la paciencia… Me gusta regalar, más aún que me regalen, que nunca sé cómo agradecerlo y ser convincente… Dar y soltar tienen sentido cuando lo haces como un regalo, ni más ni menos. Yo siento placer regalando…
No es un tiempo perdido en mi caso… es un tiempo pasado y ya fue. hay que hacer lo que uno tiene que hacer en su momento…
Por cierto, la eternidad es sólo un para-instante suspendido sobre el abismo… No es siquiera tiempo, no tiene masa ni volumen, por lo tanto no participa de la gravedad de la vida y sus atracciones… Algo así como un silencio sordo que ciega… El tiempo no es; va siendo… la eternidad es lo que no es el tiempo, inmóvil… es decir el vacío… Ni siquiera eso, vacío informe, contramolde de la nada…
gracias por preguntar, jmm… me gusta regalar respuestas…
Un saludo… Pau
Wie man wird, was man ist, 1888, Nietzsche.
Espero que llegues a ser lo que se es.
Un saludo
«No le oculto el hecho de que yo hubiera preferido morir antes que causar o sufrir tanta infelicidad»
Son las palabras de Vincent a Theo en Mayo del 89 seis meses después del ataque a Gauguin, cuando entra en Saint Rèmy. Era el final de un viaje y el principio del nuevo y se desprendía de lo anterior dibujando en las estrellas sus recuerdos, colgando del cielo las pequeñas luces de la tierra y aceptando su mortalidad, con la presencia del ciprés.
«No llores, mi querida.
Dios nos vigila.
Pronto el caballo nos llevará a Durango.
Agárrame, mi vida.
Pronto el desierto acabará.
Pronto estarás bailando el fandango
Tal vez por eso te acordaste»
Así reza Bob Dylan en su Romance a Durango, en su Romance a la peña del tiempo, que ahi parece detenerse.
Supongo que irías al sur.
Gracias a ambos (Joaquín y Pau) por dejar caer estas gotas de rocío en el amanecer de nuestro día.
Somos viajeros sin conciencia de serlo desde que nacemos hasta que aspiramos la última bocanada de aire, tal vez éso explique que olvidemos que el objetivo del camino no es otro que caminar sin meta «a la vista» ya que el fin del trayecto nos acompaña desde nuestro interior allá donde vayamos y se puede decir que, aún teniendo tan cerca el destino, es dificil de alcanzar.
Aprender a soltar e ir ligeros de equipaje es la primera regla del caminante.
Feliz camino a todos.
Gracias por tu sensible y entusiasta lectura…
Un saludo de caminante a caminante… Pau
Así vió Calderón de la Barca toda la existencia como una mera apariencia y Miguel de Cervantes colocó la «vacía» en la cabeza (mente) de Don Quijote. 🙂
Jajaja… simpática alegoría… Imagino a Cervantes barbero cabreado…
Un saludo… Pau
Muchas gracias por tus generosas y bonitas reflexiones, Pau.
Si me dieras tu permiso para publicarlas en la web de Fundación Ananta, editadas sin las referencias a mi, te lo agradecería mucho, pues creo que añaden.
Yo también te mando un fuerte abrazo
Nada de acuerdo con su artículo ni los ejemplos que hace mención.
Las palabras y frases utilizadas por el autor demuestran una armonía en la mismas, pero en el transfondo simplemente pone de relieves ejemplos que seguramente ha vivido o observado en primera persona.
Hace una clara referencia a ese soltar que provoca el expirar último que realiza una persona, cuando llega su muerte y lo que a continuación sigue en el texto expuesto es un tema personal que no entro en ello.
En definitiva, hay situaciones que obligan a la expresión utilizada por el autor «soltar», pero existen otro tipo de situaciones que nos obligan «amarrar» y posponer para un periodo largo de tiempo ese «soltar».
Un saludo.
SOLTAR, significa DAR. Nos damos, nos entregamos, para con los demás, en su necesidad de tenernos cerca. Nos damos para que nos descubran y nos sientan . Nos damos, de un modo total, cuando realmente queremos AMAR.
Es renunciar, ya sean a las posesiones como a los afectos de las personas. Porque no las necesitamos, queremos ser libres. Porque ya no nos son útiles y queremos apartarlos de Nosotros, seguir nuestro camino.
Cuando te despegas o separas, de algo o de alguien, también lo que haces es SOLTAR, porque en ese preciso momento, se te hace necesario para ir en busca de otros objetivos o tomar otras decisiones.
SOLTAR, también es reprochar y extraer la ira, el odio, el ímpetu de manifestar tu total desacuerdo con lo que nos implica o nos afecta. Dando paso a expresiones, calificativos o gestos que denoten como nos sentimos.
Gracias, Joaquín, por » soltarnos » tu sapiencia, demostrando lo sujetos estamos a las cosas materiales pero no tanto a los sentidos y a las personas.
Es tiempo de entrega, la LIBERTAD comienza hoy cuando renuncio a mi mismo.- F.S.
Querido Fer:
Todos,a lo largo de la vida,Soltamos momentos,regalamos excusas de un porqué,dejamos atrás esa coraza,y acudimos en busca de ese yo..
Vaciamos,llenamos y soltamos.
Vivimos deprisa ,pues es tiempo de ovidar,de marcar una linea sin rencores ni odios.Seamos pues, «actores» del alma,guionistas de pasajes,protagonistas de sueños.
«Habéis oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo os digo: No repliquéis al malvado; por el contrario, si alguien te golpea en la mejilla derecha, preséntale también la otra. Al que quiera entrar en pleito contigo para quitarte la túnica, déjale también la capa.» (Mt 5, 38-40)
Prójimo Joaquín: Entre los antiguos semitas, de los que procede el pueblo hebreo, imperaba la
ley de la venganza, idéntica a la que guía nuestros pasos en el camino ése del agarre al que haces referencia en tu escrito, entiendo que, conciliador. Pues bien, esto daba lugar a unas interminables luchas y crímenes. Laley del taliónconstituyó en aquellos primeros siglos del «pueblo elegido» un avance ético, social y jurídico notorio. Este avance consistía en que el castigo no podía ser mayor que el delito (¡vaya avance!, ¿eh?), y que cortaba de raíz toda reiteración punitiva (algo parecido a la espiral homicida y a la suicida danza macabra que señalas en tu texto). Con ello, por una lado, quedaba satisfecho el sentido del honor de los clanes y familias (parecido al modus operandi de La Camorra) y, por otro, se cortaba la interminable cadena de venganzas ad infinitum. En este sentido, y aquí viene el avance a mi juicio, en la moral del Nuevo Testamento Jesús el Salvador da el definitivo avance, en el que juega un papel fundamental el sentido del perdón y la superación del orgullo (ahí está el quid de la cuestión, prójimo Joaquín).Moraleja: Sobre estas dos últimas bases morales en negrita, y en pro de la defensa razonable y razonada de los inalienables derechos personales de cada cual, debe establecerse todo ordenamiento jurídico y ético para combatir el mal en el mundo entre hermanos.
P. S.: Pero, el problema prójimo Joaquín es que, el Príncipe del Mundo para muchos (como esos peripatéticos sofistas que iban y venían alcahueteando con invectivas y acusaciones contra Sócrates el Heleno; o como aquellos hipócritas fariseos y saduceos que iban capciosamente de correveidiles del Demonio acusando e instigando al Señor por precisamente, evidenciar sus pecados y contradicciones conductuales y estilos de vida antitéticos con lo que predicaban hipócritamente) es su inicuo juez, su abogado picapleitos, su fiscal abyecto, y el notario que da «buena» fe de sus actos con el prójimo. Y yo me pregunto, ¿pudieron Sócrates o Jesús no entrar al trapo con las provocaciones de Anito, Melito y Licón, o de Anás y Caifás? Creo que no, y por éso, acabaron expirando para expiar nuestras Barrabásadas, culpas y pecados instigadas y urdidas por el Gran Provocador.
Estimado Ramon :
Ves cuando te esmeras y centras en un tema lo bordas. Si señor la Ley del talion fue un avancen en la historia del derecho y constituye la base del actual principio de la proporcionalidad que ilunina los codigos penales modernos.
La lastima es que en la zona geografica en que se origino no se aplique y sigan lapidando a las mujeres casadas por yacer con hombres y a los hombres despacharlos con unos cuantos latigazdo.
Son cosas de los tiempos. El otro dia en mi blog ( http://elasesorlaboral.blogspot.com/2010/06/callejeando.html ) referia la historia de que en el paseo del borne de Palma de Mallorca , le cortaron la cabeza a un teniente por «yuntarse con una monja» , cosas de la inquisicion .
Sigue asi y te leeran mas y mejor las gestes paganas que vienen por estos lares.
Un abrazo
Agradecido don Eugenio, yo aprendo de Cicerónes como tú o como el Magister. Sendos cúmulos de sapiencia cual el Libro del sabio Salomón.
Moraleja: La retranca gallega Vs. la vehemencia levantina.
P. S.: Sinergia en estado puro.
Esa misma sinergia, Querido Socrates, es la que también tenemos ambos cuando intercambiamos impresiones y conocimientos.
Un fortísimo abrazo.- F.S.
No dudes nunca del ánimo conciliador de nuestro querido Joaquin!
Si hay alguien con el alma limpia entre nosotros, es él.
«Limpiando el interior permites que se aloje el espíritu. Si lo llenas con una sola de las diez mil cosas, no cabrá.» (Cosas del Camino, Mario Conde, Séneca, 2009, Córdoba; pág. 25, 3er aforismo).
Buenos días, Joaquín.
Para mí, soltar significa ser libre, y SER MÁS. Es renunciar a poseer, ya sean cosas materiales, personas (su afecto, respeto, cercanía), la razón en una discusión, etc. Cualquier cosa. Cuando voluntariamante renunciamos, lejos de perder, ganamos. Ganamos en dignidad, en libertad y en esencia. Y también en grandeza, pues cuanto más grande es un hombre, menos necesita para SER plenamente.
No pocos de los tropiezos cotidianos que topamos en nuestro vivir diario proceden del afán, casi compulsivo de «tener». Y esa carrera, la del tener, nunca termina, no tiene fin.
Cuando sueltas, das libertad, y eres más libre. Eres más tú, recuperas tu esencia, que habías delegado en objetos incapaces de contenerla. Es como reecontrarse con uno mismo.Es volver a ocupar tu espacio.
Para mí, soltar significa encontrar mi camino.
Buenos días a todos.
Ando soltando lentamente las amarras
de un lastre nocivo al que llaman Ego;
que no quiero ser un simple traje con bolsillos
ni parte de un camino que no entiendo.
La voz de mi Alma anda dibujando un pentagrama
donde plasmo sentimientos que aún anido;
siendo Verso entre músicas del Alma
esperando ser un Siendo, hasta llegar a un Sido.
Nota:Sencillo a bote pronto musical tras sorber un café, como obsequio para el amigo Joaquín Tamames:
http://www.youtube.com/watch?v=R_g6A9aivq0
.
Buenos días,
Si hay que soltar, sí. De lo superfluo hay que prescindir. Entendiendo por superfluo aquello que fagocita la personalidad que nos identifica como únicos en los escenarios del Ser.
No hay que soltar sin embargo, aquellas características individuales que conforman la identidad personal con la que habremos de realizar la transición de lo efímero a lo eterno.
Soltar para Consolidar
Buenos días querido Joaquín, una vez más gracias por tu texto ¡¡mira que hoy lo encuentro en mi vida súper oportuno!!
En una sociedad como la nuestra en la que se nos ha enseñado de pequeños a aferrarnos a prácticamente todo, donde mayoritariamente impera eso de ¿y de lo mío qué? es tarea difícil esto de soltar. En el fondo es verdad que somos nuestras cosas y por eso el fuerte apego a ellas nos hace sentir tan mal cuando las perdemos. Esto también nos pasa con las personas, las tenemos con nosotros, pensamos que van a estar siempre ahí a nuestro lado y cuando se van…pues eso, nos quedamos perdidos. Si aceptáramos desde un primer momento que en esta vida no hay nada fijo y que todo es transitorio, seguramente nos costaría mucho menos soltar amarras.
He presenciado los últimos suspiros de aliento de dos familiares en mi vida y es curioso las reacciones que sufrimos cada individuo a nivel particular. He comprobado que no siempre el que más llora y se desmorona de forma desmedida y estrepitosa es señal de más sufrimiento, sino que marca el grado de apego y disposición a soltar. Son duros momentos sin duda, pero que marcan lección de por vida. Nada es eterno, nada nos pertenece y nada es nuestro excepto nuestra vida, que es efímera y fugaz en un tiempo que no existe.
Yo estoy dispuesta a soltarlo todo…eso sí, menos lo mío ehh 😉
Buenos días a tod@s
Queremos tener cosas y personas con nosotros y no perderlas nunca. Pero la vida nos va demostrando que nada es para siempre. Pero no me puedo aferrar a una mano que nunca he tenido. Nunca me ha gustado agarrarme a los afectos sea al precio que sea, siempre he pensado que tiene que ser algo voluntario de las dos partes, cuando una parte no quiere, inmediatamente suelto todo los lazos para que pueda seguir su camino sin ningún problema.
Otra cosa es cuando pierdes un familiar para siempre, dicen los expertos que aproximadamente, puede ocurrir cada década. En mi caso esta regla se ha cumplido. En los años ochenta mi padre, en los noventa mi hermano y en el dos mil nuevo mi madre.
Por eso es conveniente aprender a vivir sabiendo de lo efímero de las cosas de la vida.
Sr.Tamames para cuando otro artículo sobre viajes. Como el que hizo con su hijo sobre Bután. Muchas gracias.
Buenos días a todos.
Estimado Joaquin:
El camino para avanzar consiste en «Soltar»,vaciar esa caja de pandora llena de recuerdos vagos,silencios rotos,lamentos dormidos,…palabras mudas.
Todas ellas envueltas en una sábana de emociones,bajo la mirada atenta de la soledad.
Uno/a almacena momentos,se aferra en su alma,viene ,va,vuelve,sale,»Suelta»…,prepararse para alcanzar esa meta,marca un antes y un después.
Escenas de miedo,inundan al ser,frágil en su interior,vivo en su mañana,»soltando».
Enfrentarse al dolor,¿Quién está preparado?,vencer esos miedos,caminar entre tinieblas,levantarse,tropezar,…caminar.
El hombre es perro viejo,juega a ser niño,necesita ,sentir,querer,entrelazar su vida,unirse,sólo así alcanzará un Climax de Gloria en su interior.
El beso del ayer,la caricia de un adios,testigos mudos de un presente,sueltan su frenesí,liberan átomos de amor,de pasión,conjugan escenas bellas,vivas,sueltan la adrenalina de un «Siendo»,porque existen,son,están.
…».El secreto de la salud mental y corporal,está en no lamentarse por el pasado,preocuparse por el futuro ,ni adelantarse a los problemas,sino vivir sana y seriamente el ahora.
….Programa para hoy :Expirar,inspirar,expirar…»
(Buda).
A veces, querida Lydia, se rompe lo incierto porque nos asusta lo verdadero.
No sentimos porque no entendemos lo que no valoramos.
A veces, las noches son frías, oscuras y amargas pero no tanto como las lágrimas, en soledad.
Sólo sabemos decir -Lo siento- por no saber como, por no querer decir – Te perdono – .
Simplemente, ya no SOMOS porque nos duele.
A veces Tú ,…casi siempre, …muchas más veces, Yo.
¿ Será porque tenemos miedo a soltarnos y a ser LIBRES ?. – F.S
¡Buenos días¡
Me gusta leerte Joaquín, me aporta esa reflexión agradable que me acompañará durante el día…. soltar, liberarse, vació, trabajar los apegos que tanto mal causan, en su nombre cargas ,muy pesadas llevamos.
Caminar ligeros de equipaje mentales.
Gracias por recordarnos continuamente el camino del medio.
Buen día a todos.
Según cuentan, a un maestro de la meditación le preguntaron una vez cuál era la palabra que más acertadamente podía resumir en última esencia lo que era el zen. Respondió con ese verbo: soltar .
Darnos cuenta de nuestras luces y nuestras sombras, y no reñirnos ni recrearnos. El mero hecho de observar sin enjuiciar, suelta. Y como errar es de humanos y humanos somos… perdonarnos cada vez que se contradiga palabra y obra.
Gracias Joaquín
Soltar, sí, pero desde la OBSERVACION.
Solo así, habremos aprendido, porque de eso se trata, de aprender.
eva
Tienes razón. La observación exige un distanciamiento, una desidentificación con lo observado.
Meditar permite desde ese deliberado apaciguamiento externo, tener mayor consciencia de lo que bulle a través de nuestra mente y nuestros sentidos corporales; no reaccionar inconscientemente a un pensamiento, una emoción, una sensación física, etc.Establece una distancia entre el ser que observa y lo observado, y un tiempo entre lo que se experimenta y su reacción consciente.
Aunque sólo sean diferencias de conceptos, quizás sería más bien aprender a desaprender los supuestos dogmas científicos, humanísticos, religiosos y morales que nos inculcaron e impusieron cuando niños: la llamada «educación», que en cierto sentido tiene también, junto con sus innegables virtudes, algo de domesticación.
Cordiales saludos y gracias por tu comentario.
No es una ninguna novedad que me parezca admirable un comentario tuyo. Evidentemente no siempre te lo digo.
Estoy de acuerdo en que es otra herencia educacional que deberíamos aprender a desaprender.
Un abrazo.
http://www.youtube.com/watch?v=AEh1157mok8
La herencia educacional frente al valor del a experiencia directa.
Gracias Esencia. Sabes mi parecer sobre tu manera de escribir y sobre lo más importante, que simboliza tu avatar. Un abrazo.
Ahí hay muchos matices… las emociones hay que experimentarlas, sentirlas, hacerse uno con ellas, volverse la emoción. Si sólo observas te desidentificas, pero la estás reprimiendo. En apariencia será una liberación porque al actuar como observador parece que no vaya contigo, pero en ese caso estarás reprimiendo.
Las emociones no son malas si las afrontamos, las aceptamos y las dejamos escapar. Igual que bienen se van. El problema es aferrarnos a ellas y retroalimentarlas.
Una vez que estés limpio… puedes ser un observador, pero el camino es largo. Hay personas que llevan toda su vida meditando y jamás han sido capaces de desprenderse de la sombra, de sus represiones.
Este es un error muy generalizado.
Un abrazo Juan.
Lo comparto Nacho. Si tengo una emoción que no me agrada, puedo teorizar o buscar un hilo que justifique su porqué; para liberarse de esas emociones reprimidas, como comentas, hay que «experimentarlas, sentirlas, hacerse uno con ellas, volverse la emoción»
Comparto también tu reflexión sobre la distancia que a veces hay que recorrer para sentirse «limpio»; muchas veces supone más de una vida. Sin saber psicología, cada vez creo más que nos salvará la limpieza emocional en lo individual y lo colectivo, y de que el camino racional -tal y como enseña la historia- está condenado a repetirse y a encubrir en las épocas más sombrías nuestro lado más inhumano.
Un abrazo
SOLTAR, lleva implícito ser valiente y no TODO el mundo está dispuesto a ello.
SOLTAR, quiere decir COHERENCIA y demuestra VOLUNTAD, ¿ realmente lo somos ?.
SOLTAR, es ser LIBRE, pero no TODOS quieren serlo.
Un fortísimo abrazo, Juan .-F.S.
Estimado Fernando.
Quizás soltar, en su otro polo al que bien señalas, exija un pavor absoluto. El salto del arcano «El Loco» en el Tarot habla de fe ciega pero también de desubicación plena con la realidad por todos asumida como «realidad».
No, no todos quieren ser libres porque exigiría plena responsabilidad; soledad plena. Da miedo ser realmente libre: libre del todo. Normalmente transigimos y nos adaptamos a un sucedaneo de libertad condicionada.
Un fortísimo abrazo para ti también.
Juan, Fernando
creo que todos coincidimos con lo que hoy nos plantea Joaquín. Pero hay algo que coarta el soltarse y la libertad: el sufrimiento. O nos entregamos a un ascetismo radical o bien tendremos que vivir en el mundo. Esa vida acarrea contingencia y sufrimiento, producido tanto por lo material como por lo emocional.
En el tránsito que llamamos Vida, ganamos y perdemos. Ganamos consciencia, o mejor dicho, la recuperamos, a medida que nos vamos acercando al Origen, a lo que llamamos Muerte. Pero perdemos todo lo demás: los seres que nos rodean, los sueños que no se cumplen, la ingenuidad juvenil de sabernos capaces de todo… No sé muy bien cómo preguntaros ésto, no se hacerlo de mejor forma, así que lo diré tal cual: ¿Cómo se puede ser libre en mitad del sufrimiento?
¡Un abrazo fuerte a los dos!
Difícil es la respuesta, admirado Ermitaño, el sufrimiento es algo tan innato en el ser humano como lo es su propia conciencia.
Si cabe, primero uno debe ser libre para no sufrir más y no a la inversa.
Nos componemos de emociones, y todas ellas con efecto psicosomático. El dolor es algo consustancial a la vida y no es posible ignorarlo aunque se busquen remedios para mitigarlo, de tipo farmacológico, emocional o espiritual.
La libertad nunca es plena porque vivimos sometidos a los dictámenes de una sociedad impostora y adocenada.
Me ha gustado mucho, Ermitaño, tu enriquecedora reflexión. El debate podría ser largo y fructífero.
Te leo asiduamente.
Un fuerte abrazo.- F.S.
Perdóname Fernando, pero hay algo que me mosquea bastante y es las puntuaciones que reciben tus comentarios. Me he fijado en que son siempre las mismas, una opinión con una calificación que roza el cero. Y me llama la atención por lo siguiente:
a) eres una persona buena. O mucho me equivoco contigo o lo ERES. Sin más historias.
b) tus opiniones son FUNDADAS, CORRECTAS e inteligentes. Transmiten paz. Para nada merecen notas bajas, y menos una vez tras otra, sea cual sea el tema que tratas.
c) Me da la sensación de que a ti, como a mi, o a otros muchos que te pongan notas buenas o malas te da un poco igual. Valoras las buenas porque implican el afecto de gente que te quiere, pero no por el lucimiento personal.
Todo ello me lleva a una conclusión: HAY ALGUN IMBECIL que se dedica a dar por saco al personal por revanchas personales. Si no es así, no lo ENTIENDO. A ese señor/a, le invito a DAR LA CARA, o en su defecto, A PONERME A MI LA MISMA NOTA, porque llevo varias respuestas tuyas acordandome de toda su ascendencia. Y me fastidia que en vez de dedicarme a responder a tu comentario, me tenga que desahogar el cabreo contestandole a él.
Gracias y perdona Fernando.
Indiferencia, Ermitaño!
No sólo Fernando tiene un/a fan. Fíjate bien y verás como a Lydia y a Charo les pasa otro tanto. Particularmente yo también tengo el mío. Es poner «buenos días» nada más, y zás… puntito al canto!
Lo dicho… indiferencia!
Perdóname tú, querido Ermitaño. Creo que los votos, son irrelevantes frente al conocimiento que TODOS estamos adquiriendo.
Te rogaría que no fueses tan riguroso con quien ejerce el «voto de castigo», muy probablemente sea lo único que pueda aportar al dialogo-reflexión y ello, también debe ser igualmente respetable.
Prefiero seguir debatiendo el tema de hoy , tan dinamico y abierto que permite que podamos aportar grandes ideas.
Nuestro mutuo amigo, Juanarmas, también hace unas interesantes aportaciones, a las que muchas veces, tengo el enorme placer de leerlas, varias veces y apuntarmelas.
El Foro, es una gran oportunidad para el desarrollo del pensamiento, no la desperdiciemos en absurdas polémicas que lo único que llevan es a un consumo estéril de esfuerzos.
Seamos creativos, NO vengativos.
Un fortísimo abrazo, mi buen amigo Ermitaño, por tu sentida preocupación.- F.S.
Hola Ermitaño.
Me parece que los marcadores van mal. No sé ingles, pero la palabras » Cast» es = molde, creo. Es posible que corresponda a el nº de personas que han votado. Pudiera ser?
Bueno eso es lo que me explicaron. tampoco estoy muy segura. Acabo de votar a Fernando para probar y he pinchado en el diez y ha marcado cuatro,; quiere decir que no es fiable, podría haber marcado sólo uno, o diez… pero no.
Bueno lo dejo, que me estoy liando.
Creo que Fernando lleva razón.
Saludos.
Hola,
Me alegra que haya comentado este «detalle» sobre las puntuaciones.
Precisamente ayer después de varias semanas y sobre todos en los últimos das de notar esto que usted refiere, ayer y antesdeayer, lo noté de nuevo con tanta claridad, que yo misma estuve por la tarde y hoy de nuevo antes de entrar en el foro, reflexionando sobre esto, con la intención de escribir sobre ello.
Solo por el hecho de que algunos piense que mi «protesta-queja» la interpretasen «equivocadamente» como origen de mi posible «vanidad», y no por lo que yo realmente siento sobre este «chapú»…..
Porque me parece exactamente lo que usted dice, no solamente infantil, sino de mal gusto,
«tachar» sin más, las opiniones-comentarios de muchos de los comentaristas, cuando yo no le encuentro un verdadero motivo para ello, veo que se trata sobre todo de querer «fastidiar», como decir «cállate la boca» …..
pero a mí, esto me demuestra la poca intención que tienen algunos, de hacer esto un espacio de opinión.
Hay días que he visto como, desde el principio de una entrada hasta el final, se ha recorrido «otorgando» un «puntito» a cada uno, o a la mayoría de los comentarios, y ello ocurre en un espacio corto de tiempo, por lo que deduzco igualmente, que se trata de la votación de solo un usuario. A veces hasta me ha hecho reir…. pero…..
Bueno, sea quién sea…. gracias por el»puntito» quizás ni eso me merezca…..
«Algo es algo»…..
Saludos cordiales.
Y ahora que he leído a Calixto, tengo que decirlo, éstosobre Lidya y Charo,también lo he notado yo, últimamente y con claridad…. y me he encargadode «nivelarlo» con mi «aportación», sobre todo porue noté claramente la mala «disposición» de quien sea….
a pesar de que sus comentarios, a parte de ser positivos, por otra parte, no llevaban en sus contenidos algo que pudiese molestar a nadie en absoluto. Porque yo los leía varias veces, cuando notaba este «bajón» en la puntuación, por querer comprender el motivo, y no había nada especial negativo como para ello, excepto la actitud del «donante» a las comentaristas….
«No te digo yo….»
La vida se alimenta de vida en un círculo de muerte del que somos testigos y en algún momento, protagonistas.
A raíz de tu pregunta, me surge otra: ¿Cómo se puede trascender el sufrimiento? Me ha venido a la mente esta escena de un excelente documental sobre Ram Dass.
http://www.youtube.com/watch?v=EN3SoNjoUzY
http://www.circulochamanico.com.ar/carta_a_steve_y_anita.html
Un abrazo
Vale…Fernando insinúa la pregunta y tú la explicitas: ¿Cómo trascendemos el sufrimiento?
Si me lo permites, amigo Ermitaño, creo que el sufrimiento se trasciende mediante el olvido de uno mismo y la dedicación a los demás. Saludos estimado amigo.
Atati,
es un tema grave, muy hondo. En parte estoy de acuerdo contigo, sí es verdad que uno trasciende el sufrimiento cuando prescinde si mismo. Es cierto. ¿Pero cómo trasciende uno el sufrimiento que viene derivado del daño/perdida a gente a la que amamos? Me da la sensación de que no es posible. Aquí no tenemos sitio, pero ¿sería posible que entre todos le dieramos unas cuantas vueltas más? A mi me gustaria la verdad, y me ayudaria mucho incluso.
Gracias Atati.
Bueno, amigo Ermitaño, si se produce un gran y persistente sufrimiento por la pérdida de un ser querido, habrá que convenir la existencia de una dependencia emotiva-afectiva, lo cual sin entrar a valorar su causa, sí dice algo de la capacidad de cada cual para pensar en sus propias conveniencias, aunque sean algo tan limpio como el natural amor a ese ser, pero conveniencia personal al fin y al cabo.
Una manera que se me ocurre de diluir ese pesar, sería imaginar que si el ser querido desaparecido nos pudiera ver, seguro que él también sufriría si nos ve sufrir por su ausencia; y por el contrario, sería feliz si nos ve felices o al menos sin tanto sufrimiento. Así que si no se es capaz de dejar de sufrir, al menos hacerlo no por uno mismo, sino por los demás, incluyendo el ser desaparecido. O sea, pensar menos en uno mismo, y pensar más en los demás.
No sé si me he explicado, o si te convence, pero por intentarlo que no quede, estimado Ermitaño. Un saludo y un abrazo lo más optimista posible.
Ermitaño, la perdida de alguien que quiero, me rasga el alma y solo el bálsamo del tiempo me hace soportable su ausencia. Yo en éste asunto no deseo trascender, deseo tener presente a mis seres queridos y que ya no están, recordarles aporta armonía en mi existencia forman parte de ella. Creo que mientras se les recuerde estarán.
La verdad, en unos es distinta, que en otros y ambas pueden ser certezas.
Ermitaño: estoy completamente de acuerdo con atati. La persona querida nos puede ver cuando parte y sufre con nuestro sufrimiento y le impedimos seguir su camino.Asi que si pensamos en ella y en su bien nos es mucho mas facil tirar adelante porque sabemos que la ayudamos y el desapego no es tan duro.
Un abrazo
Llevas muchas razón, sólo cuando conseguimos soltar esa cadena que vamos cuidadosamente fabricando a lo largo de nuestra vida, enlazando en ella parte de esos deseos que nos van haciendo presos, nos sentimos verdaderamente libres.
Es cómo cuando observamos a ese bebé que se agarra con fuerza al dedo de su madre para obtener seguridad al dar sus primeros pasos por la vida. Un día, comienza a caminar sólo.
Pero como vemos, ya desde el principio tenemos esa tendencia a agarrar lo que creemos que nos da seguridad, lo que deseamos.
Por eso, cuando estamos aferrados a algo o a alguien, la mayoría de las veces no somos conscientes, nos sentimos libres siendo siervos de nuestras propias emociones. Pero si consigues soltar aunque sólo sea un eslabón, seguramente te sorprenderás a ti mismo por la cantidad de negatividad que has sido capaz de generar, creyendo en muchos casos, que era un acto de amor.
Tomar conciencia de esto, es la asignatura pendiente Joaquín.
Gracias. Buenos días a todos.
Estimada Esencia:
Me gusta tu frase…. «nos sentimos libres siendo siervos de nuestras propias emociones…»Claro que sí,enfrentarse a uno mismo,darse cuenta que ese no es el camino,que esas vivencias no son actos de amor ,sino más bien castigos dormidos,sólo si uno mira al frente,da el paso de cambiar,sólo así, alcanzara su libertad,sino será un rehén de lamentos,en una celda de soledad.
Un cordial saludo.
Sabemos que no es fácil diferenciar, identificar y separar esa línea que nos hace vulnerables y provoca que reaccionemos en función de unas emociones, que terminan irremediablemente por dañar en la mayoría de los casos, aquello que tanto amamos, que creemos saber amar. Porque es tan difícil saber soltar cuando amas, que la mayoría, nos pasamos la vida intentando encontrar el significado y el equilibrio del amor y de la libertad, para poder enfrentarnos a nosotros mismos y reconocer nuestros errores y también nuestras equivocadas actuaciones, para poder comprender que a veces ese amor es un reflejo de nuestro propio egoísmo, en el que se han acomodado esas expectativas de las que se hablaba el otro día, para comenzar a mirarnos más nuestros defectos y no tanto a los ajenos. Por eso, son tan necesarias estas reflexiones.
Gracias LYDIA, me gusta como escribes y lo que transmites.
Querida Esencia:
Te recomiendo un libro que es muy bueno se titula, DEL AMOR,de ALAIN DE BOTTON(filosofía amorosa),ya me contarás.Saludos,y gracias por tus palabras..
Lo leeré y lo comentaremos. Muchas gracias. Un abrazo.
http://www.juanmarin.net/?aid=489
Tiene buena pinta. Apuntado. Gracias 🙂
E,stimado Juan:
Gracias por tu información,cuando lo leas si te apetece comentamos,yo lo leí en el 96,mi último año universitario,y he de confesarte que fue toda una experiencia,pues descubrí en él argumentos que marcaron un antes y un después.Me encanta como escribe,hay muy pocos en su linea…..seré que soy romanticona,hmmmmm,si ,señor.
Un saludo y, que te emocione como a mí.
Esencia,
tengo que decirte que llevo toda mi vida tratando de entender cómo uno puede no aferrarse a sus emociones. No tiene mucho mérito, mi vida ha sido corta :), pero sigo sin ser capaz. Cuando ves sufrir a alguien y tratas de ayudarle con todo lo que está a tu alcance..¿cómo puede ser que estés generando negatividad? Sé que en ocasiones es así, pero me niego a entender que un acto de amor limpio pueda convertirse en algo negativo porque suponga un aferrarse. Simplemente, aún no puedo aceptarlo. No sé si llegaré a hacerlo alguna vez.
Un abrazo fuerte!
Hola Ermitaño, en esa tarea estamos la mayoría. Aprender a amar sin apego. Ya que es ese el verdadero amor y por tanto el más difícil de entender.
Teniendo en cuenta como comenta Juanarmas, que nuestra educación se ha edificado generalmente sobre pilares bien distintos, es además, el más difícil de practicar.
Un amor que da sin esperar nada a cambio porque es un amor de entrega, sin egoísmo, que no se siente defraudado porque no espera nada y por tanto todo lo que recibe es siempre un regalo, que no se aferra a la otra persona, ni basa en ese apego la felicidad, creando sin darnos cuenta de este modo, una dependencia que limita y condiciona la libertad del ser amado, haciéndolo de esta manera infeliz porque condicionas sus actos, demandando de alguna manera lo que la otra persona sencillamente no te pueda dar y restándole al mismo tiempo libertad, espacio, vida. Porque ahí es donde comienza la esclavitud y donde se genera el sufrimiento y la negatividad.
Un acto de amor limpio, nunca puede ser negativo. Por eso, las personas que tienen experiencia en este amor, consideran el apego como lo negativo, como algo que hay que excluir para que ese amor sea limpio.
Confundimos el apego con amar más, el desapego con falta de interés o incluso con egoísmo o pasotismo por parte de quien lo practica, porque entendemos que lo hace para no sufrir en el amor y que es una vía para pensar más en uno mismo, siendo superficial y no es así. Se trata de saber amar y respetar los espacios y la vida de la otra persona, que no nos pertenece, que no es nuestra ni la podemos condicionar.
Como le decía a Joaquín esta mañana, Amar sin apego es la asignatura pendiente. No estas sólo, estoy a tu lado en esta tarea, porque aunque haya comenzado a entender, aun queda mucho camino por delante, ya que el soltar amarras en lo material nunca me ha preocupado, pero he amado y amo, de la misma manera que creo que tu lo haces.
Seguimos aprendiendo.
Idéntico abrazo.
Bueno, estimada Esencia, pues parece que has sabido tomar conciencia del gran reto de todo ser humano para superar sus dependencias; ya tienes logrado gran parte del recorrido, a continuación gracias a la voluntad y a una continua observación de una misma en cuanto a la intencionalidad o deseos que hay, poco a poco se va cultivando el desapego liberador de dependencias para sustituirlo por una entrega eficaz a tu entorno. Un abrazo, amiga.
Tomar conciencia y saber o poder practicarlo, son cosas bien distintas y como sabes, precisamente en trabajar esa conducta esta el verdadero aprendizaje.
Con buenos, comprensivos y pacientes maestros, que con su experiencia y ejemplo te demuestran resultados, es sin duda más fácil. Pero supongo que sabes que aun llevo suspendida la lección, por esas cosas de la teoría (aunque creas en ella) y la practica.
Un abrazo, amigo.
Así es amiga mía, pero por eso te decía que con voluntad y un objetivo conocimiento de las auténticas intenciones que nos motivan, es una manera de facilitar la ligazón de la teoría con la práctica. Otro abrazo.
«La pluma, la montaña y el río»
Ligeros (de equipaje) como una pluma, a la velocidad que fluye el río (de nuestra existencia), y sin nunca perder de vista la Montaña (la Gran Labor), así deberíamos transitar en esta nuestra peregrinación vital hacia aquel Mar sin tiempo que fluye y refluye…
Soltar es una accion y actitud clave, para progresar.
Realmente estamos recubiertos de capas de cosas personales y mentales.
Todo lo que nos atrapa, y no nos deja ser libres lo deberiamos de soltar.
Sin soltar, sin desvanecer toda esa enorme cantidad de añadidos, que la suma de todos ellos, forma un ser humano, es imposible el pasar a otros estadios de evolución.
La conquista de la verdadera libertad, realmente es soltar todas las cosas.
Estimado Alcyon:
Estoy de acuerdo contigo,debemos desprendernos de pasajes internos que anidan en nuestra alma ,para avanzar,pues sólo así alcanzaremos esa libertad interna,ese equilibrio,entre el ser,y el «SOY».
Un cordial saludo.
Este video habla de soltar, y de como crear las condiciones para desarrollar y subir en los niveles de evolución interior.
En este momento, lo que nos queda por conquistar es nuestro interior
http://www.youtube.com/watch?v=hfNYzKyICkw
Alcyon, otro video:
http://www.youtube.com/watch?v=fesrrHxNo4k&feature=related
saludos!
Perdonarnos a nosotros mismos y a los demás es la llave para no quedar agarrados en el dolor, en el rencor, en el odio….
Humildad y honestidad con nosotros mismos para poder tenerla con los demás. Reconocernos y conocernos para entender que no somos diferentes a los otros, que todos formamos parte del mismo Plan Divino donde cada uno de nosotros es una pieza de un puzzle que encaja a la perfección con el Universo.
Joaquin, gracias por ayudarnos a SOLTAR…
Así es, si realmente deseamos vivir hemos de estar dispuestos a soltar, a morir, a cada instante. Es la única de posibilidad de vivir en plenitud. El ego es simplemente una piel sin vida a nuestro alrededor. Incluso el pasado, las experiencias, el conocimiento se acumulan. Al acumularse, se convierte en polvo que debemos soltar, a cada instante, de forma que esa piel nunca se convierta en nuestra prisión. La vida es un proceso y la muerte forma parte de él. La muerte es un revivir continuo, indispensable para que la vida resucite, se libre de las viejas formas, una y otra vez. Soltar a cada instante…
Sonrisas de Joon.
Extraordinario artículo que nos invita a reflexionar sobre nuestra vida, sobre la vida de cada uno.
Creo que hay un tiempo para coger y un tiempo para soltar, un tiempo para sembrar y un tiempo para recoger, un tiempo para amar y un tiempo para ser amado, un tiempo para abrazarse y un tiempo para separarse, como nos dice el Eclesiastés. Y en ese ir y venir, en ese yin y en ese yang, dentro y fuera, inspiración y expiración, se nos va la vida, aprendiendo, siendo, amando, soltando, perdiendo y ganando.
Las personas que enseñan coaching (atrapar, conseguir), a menudo lo enseñan a ejecutivos que deben de aprender a soltar: soltar a la mujer que se quiere separar (si no tiene más remedio la pareja) , soltar la empresa que se está hundiendo, soltar opiniones erroneas sobre sí mismo y sobre los demás… pero sin embargo les están enseñando a seguir peleando, luchando contra los elementos para conseguir, atrapar (coach) esos objetivos que ya están lejanos, pues los nuevos tiempos los alejan.
En la vida se nos enseña mucho más a conseguir, toda nuestra educación es para tener un título, una profesión, un trabajo, para conseguir dinero, propiedades, pareja, hijos. Solo se nos enseña a conseguir, a atrapar… y como dijo Sócrates cuando le ofrecieron la cicuta : «Me he preparado para aprender a morir durante toda la vida, ¿como tendría que tener miedo a este momento?». Efectivamente, es necesario saber soltar, saber separarnos de quien no nos quiere, de quien nos hace daño su relación, de quien dificulta nuestro crecimiento personal y espiritual, de quien nos obliga a ser como no queremos ser, de quien nos corta nuestra libertad para mejorarnos, y de todas esas ideas y prejuicios que nos envenenan el alma, nos quitan la tranquilidad y la paz, nos crean desazón y ansiedad, dejar ir , soltar esas anclas que nos impiden recorrer nuestra propia travesía, no la de los demás.
Si no sabemos soltar, no podremos SER nosotros mismos. Por ello hay que tener discernimiento para saber qué nos conviene soltar y qué debemos seguir agradeciendo su presencia en nuestras vidas, esas vidas limitadas, donde como dice Joaquín, nos iremos con las manos vacías, pero con el corazón repleto de paz, bondad, felicidad, si hemos hecho lo que nuestro ser interior nos ha impulsado a hacer, para ser mejores, para estar mejor con nosotros mismos, y contagiar con nuestro estado , con nuestra esencia a todos los que tengamos cerca, a nuestro prójimo, a nuestro próximo.
Mi padre, que hace 8 años murió, mi gran filósofo particular, acuñó una gran frase: «el hombre que no hace lo que debe, debe lo que no hace»… Hagamos lo que debamos en cada momento, y muchas veces hay que aprender a soltar, a separarse de todo lo que no nos conviene. No hay que tener miedo a la libertad, pues temer la libertad es temernos a nosotros, por lo que tendremos que limpiar algo dentro nuestro para que nos podamos seguir amando a nosotros mismos, tanto como debemos amar a nuestro prójimo o próximo (pareja, hijos, amigos, etc.)»Ama al prójimo como a tí mismo», pero no más ni menos que te amas a tí. Amar al prójimo más que a nosotros es antinatural, y amarlo menos que a nosotros, es dejar de amarnos a nosotros, pues estamos en el mismo barco.
Podemos seguir amando, aunque soltemos, pero nos hemos de respetar a nosotros mismos y para ellos necesitamos aprender a soltar lo que nos hace daño, lo que no tiene sentido, lo que se ha terminado, lo que no nos conviene para nuestro crecimiento personal y espiritual.
Es tan importante saber soltar, como conseguir, atrapar. Quien no sabe soltar, tampoco sabe conseguir, pues a veces para conseguir algo, precisamos vaciar nuestra mochila de dolor, de ansiedad, de sufrimiento. Ojalá aprendamos a vaciarnos, pues los nuevos tiempos ya se encargan de ello, y hemos de saber acoplarnos a los nuevos aires de los nuevos tiempos, donde tantas cosas se están cayendo del pedestal en el que estuvieron.
La inocencia del niño es tal porque su mente está vacía para aprender cada día algo nuevo. ¡Ojalá seamos capaces de vaciarnos para ser nosotros mismos y podernos llenar de agua fresca y clara cada día!. Al estar vacíos, tambien podremos escuchar, aprender, conectar. Pero no debemos vaciarnos de nosotros mismos, nuestro observador silencioso, nuestra conciencia, nuestro eje que mueve la conducta es lo que permanece firme y en lo que debemos apoyarnos para no ser arrastrados por la corriente. Esa chispa de espíritu, esa mónada es lo que nos une a todos los seres humanos y lo que nos da la fuerza y la gracia para no hundirnos cuando todo se está hundiendo.
Angeles,
muchas gracias por compartir tus certezas con todos nosotros. Tu texto es impresionante. Muchisimas gracias, de corazón.
http://www.youtube.com/watch?v=3zQiHQrFMlM&feature=PlayList&p=040E5BD61E0952A0&playnext_from=PL&index=13
(tus palabras me han transmitido esta música)
Muchas gracias a tí por tu música, es muy bonita, pero no entiendo lo del boxeador, es que no he visto ninguna película de Silvester Stallone…
jeje…no, no, ignora las imágenes. Como es un tema instrumental de Bill Conti de una de las peliculas de la saga «Rocky» la música va irremediablemente acompañada de las imagenes. Pero lo importante es la música. ¡Me gusta que te haya gustado!
Un abrazo
Bello Joaquín.
El problema es que vivimos a medias, dormidos, semi inconscientes, por lo cual guardamos en la mochila todas esas experiencias pendientes, por finalizar. Todo son metas por cumplir… De ahí que no soltemos nada.
Sólo se puede soltar si se vive el momento presente en su totalidad.
Gracias por el escrito.
Un abrazo a tod@s.
Somos seres temerosos y ese apego a lo material viene sometido por nuestras propias inseguridades, querido Nacho, somos egoístas y ello, sin remedio, nos puede.
Dice, muy sabiamente, M.C., » – la defensa de un hombre no es ser sus cosas, ello me ha permitido subsistir, encontrarme a mí mismo con independencia del entorno .-» .
Esa es la clave, para SOLTAR y no ser prisionero ni estar sujeto a nada.
Un fuerte abrazo.- F.S.
Es el temor, la inseguridad, lo que nos hace débiles, lo que nos aparta de nuestra realidad y nos hace depender no sólo ya de una cosa o persona, sino de ese sentimiento que a veces está relacionado con una carencia propia. Tenemos miedo a enfrentarnos a ese día en el que se aleje aquello que amamos, que consideramos imprescindible para nuestra felicidad, para esa felicidad que hemos experimentado al conseguirlo, quisiéramos alargar el tiempo para disfrutarlo y no entendemos que es la intensidad de aquello que vivimos aunque no dure, lo que tiene verdadero valor.
Un saludo.
Excelente tema Joaquín, aunque no estoy de acuerdo con el primer párrafo, porque lo que a mi me enseñaron de pequeña, al menos lo que recuerdo, es que tenía que compartirlo todo, y ser buena persona, aunque mi padre me exigía más, decía que no sólo bastaba con ser buena persona, necesitaba más cualidades. No voy a entrar en el tema de aferrarnos a las cosas materiales, porque creo que esto lo tengo superado hace tiempo, eso creo, lo dice la misma palabra «material» no me interesa, quizás es cierto, porque nunca me ha faltado nada.
Generosidad, soltar, en ese aspecto nunca he tenido problema, pero si en otro, que es el que me produce una lucha constante conmigo misma y que mencionaba Sócrates; el perdón y el orgullo, si, hay me cuesta soltar. El orgullo es más fácil, pero el perdón……….Quiero decir, no tengo nada que perdonar, pero no olvido, lo tengo retenido en mi memoria y eso es lo que me produce mal estar y rechazo. ¿Por qué soy incapaz de poner la otra mejilla?.
Qué bonita frase: » Al que quiera entrar en pleito contigo para quitarte la túnica déjale también la capa «.
Pero Joaquín, también estoy de acuerdo con Calixto Arosa cuando dice que a veces no hay que soltar demasiado, para mantener tu identidad personal, porque te comen, y te quieren hacer los de tu entorno a su imagen y semejanza y eso no, no, no, no.
Soltar, si, esta palabra te hace sentir bien y te da una serenidad alucinante que sólo algunos ven, y esos pocos son tu motor para seguir…..
Yo creo que el ser humano posee tanto amor en su interior y quiere tanto a los suyos -por los que entregaría hasta su propia vida- que se vuelve egoísta y tirano con el resto de su especie.
En su empeño por proteger a los suyos va almacenando un materialismo absurdo e inútil cual síndrome de Diógenes, la única diferencia es que en vez de recoger cartones y basuras, colecciona oro y escrituras, pero mientras se dedica a asegurar lo asegurado, va dilapidando el tiempo de sus días.
Siempre he pensado que un ser humano se purifica en vida y aflora su alma cuando se ha dado cuenta y está preparado para “saltar” al otro lado en cualquier momento, independientemente de su edad y aunque le pudiera quedar toda una vida por delante.
Una octogenaria poetisa muy amiga mía, Carmen Serna Montalvo, me dice siempre “si la muerte acredita con sus labios que nadie va a liberarse de su encuentro… ¿Para qué tanta duda, tanta tensión inútil, tanto anhelo?
Recientemente en Zaragoza le han puesto su nombre a una calle, lo agradece, pero sabe que esa calle por muy suya que sea ni siquiera consta en el mapa de su próximo viaje.
“La vida es un aire turbulento,
Un enigma profundo sin resolución,
Encuentro de voces no siempre sincopadas.
Lucha perpetua, sin tregua,
Puente que desemboca en la muerte
Inexorablemente.
¿Por qué la amamos tanto?
¿Nos asusta el enigma de lo desconocido?
No quiero encontrarte en la agonía
de no querer perderte”
Carmen Serna –inédito-
Hermosas verdades las que relatas en tu artículo Joaquín.
«Dicen que la voz del alma habla muy queda, con mucho sigilo, y que cuando nos habla andamos con frecuencia muy distraídos. Ahora es el momento de escucharla (…)»
Esa voz del alma que usted menciona, es la voz de la conciencia; lo que pasa es que nos enseñaron que la voz de a conciencia sólo acusa y señala con el dedo y sirve para darnos cuenta de lo que hacemos mal. ¡QUÉ HORROR DE FALSEDAD!!
La voz de la conciencia nos dice todo el rato y sin parar lo que hay que hacer para que todo vaya bien. Todo el rato y sin parar hasta en los más mínimos detalles.
La voz de la conciencia no está para acusar, si no para guiarnos en este mundo y en el interior de nuestro Templo.
En efecto, hay que hablar mucho con Ella; cuanto más, mejor. Y no es que hable muy quedo, es que nuestros subterfugios, simulacros y mentiras hacen mucho ruido.
La voz de la conciencia, además, es la primera que habla.
Recordemos todos juntos otra vez: EN EL PRINCIPIO ERA EL VERBO
Está bien, usemos el verbo soltar, hagamos que se vayan las cosas caducas, inservibles, pasadas y ya contaminadas, pero no soltemos por soltar.
Habría que establecer un criterio selectivo a la hora de soltar. El tremendo error de apreciación sería el nada conservar, el no querer construir ningún lazo temporal, el no saber distinguir lo permanente, lo que constituye lo esencial, la consistencia del ser.
Hay quien suelta antes de aferrarse a algo, quien rechaza la respuesta sin apenas ver formulada la pregunta, quien simula impertérrito escuchar pero que ni concede un segundo de su feliz estado de ensimismamiento, quien parece estar pero….ni él mismo es…
quien repetidamente confunde, quien de tan valioso que se cree no se mezcla ni comparte.
Yo soltaría lo inútil pero quiero también conservar, y sobre todo construir, edificar redes que me unan con lo universal.
Un abrazo que no te quiere soltar, para tí Joaquín!
¿ Será también porque GUARDAR es un verbo posesivo, estimada Diferente ?.
Nos guardamos las opiniones, nos guardamos los sentimientos, nos guardamos las ausencias, nos guardamos los secretos, nos guardamos las respuestas …. .
Yo, prefiero SOLTAR, es más pleno, más humano, más solidario con los demás .- F.S.
Fernando, vigilemos el significado de las palabras.
Guardar es sinónimo de conservar, no es posesivo en sí, prima más en su significado el concepto de mantener vivo algo que constituye un valor, para mí, claro que sí, pero que también es universal, que nos une a lo esencial.
Yo no guardo las opiniones, las comparto contigo y con otros más.
No guardo los sentimientos, al contrario, me muero por compartirlos con los cercanos, pero también con los que no puedo, por ahora, tocar.
No guardo los secretos porque nada hay que ocultar.
No guardo las respuestas, las doy mucho antes que me quieran formular las preguntas..
Yo suelto lo inservible, lo que me aplasta, lo que no deja que fluya, pero también agarro, fuerte o con disimulo, es igual, lo que no quiero que se me escape porque intuyo especial.
Un abrazo que no suelta para ti!
Gracias, estimada Diferente, me he quedado completamente satisfecho con tu respuesta, tan certera como elocuente.
Quizás sea, porque poseo una Alma tímida, que se GUARDA de tantos miedos que no se sabe SOLTAR. Me falta el valor para poder sentirme LIBRE.
Un fuerte abrazo NADA posesivo.- F.S.
Que grande eres Joaquín. Que difícil es no tener apegos, desprenderse. A mi sobre todo me cuesta mucho desprenderme de los apegos del alma, hasta tal punto, que cuando pierdo a un amigo, cuando se va al lugar desde el que nunca va a volver, ni siquiera borro de mi agenda su dirección, ni de mi móvil su teléfono, es absurdo lo que hago, inútil, lo sé bien, pero me cuesta borrarles y prefiero no hacerlo, prefiero que sigan en la agenda vivos, como siguen en mi recuerdo.
Y todo así, esta Charo no tiene remedio.
¡Que mala alumna soy Joaquín! voy a tener que repetir curso. 🙁
Un abrazo.
Estimada amiga Charo: Te dejo una canción que es un clásico en Brasil. En este caso, en la voz de Nana Caymmí,a la que yo me permito denominar…»la Emperatriz de Brasil».
Al compás de un bolero con un toque»brasileiro», desgrana entre mágicas notas, unas bellas palabras con un fondo filosófico muy profundo.Dejo la letra plasmada también, esperando disculpes y disculpen los compañeros/as de Blog, la sábana que va a ocasionar:
http://www.youtube.com/watch?v=BLs16sjWdCc
RESPOSTA AO TEMPO
Batidas na porta da frente
É o tempo
Eu bebo um pouquinho
Prá ter argumento.
Mas fico sem jeito
Calado, ele ri
Ele zomba
Do quanto eu chorei
Porque sabe passar
E eu não sei.
Num dia azul de verão
Sinto o vento
Há fôlhas no meu coração
É o tempo.
Recordo um amor que perdi
Ele ri
Diz que somos iguais
Se eu notei
Pois não sabe ficar
E eu também não sei.
E gira em volta de mim
Sussurra que apaga os caminhos
Que amores terminam no escuro
Sozinhos.
Respondo que ele aprisiona
Eu liberto
Que ele adormece as paixões
Eu desperto.
E o tempo se rói
Com inveja de mim
Me vigia querendo aprender
Como eu morro de amor
Prá tentar reviver.
No fundo é uma eterna criança
Que não soube amadurecer
Eu posso, ele não vai poder
Me esquecer.
Respondo que ele aprisiona
Eu liberto
Que ele adormece as paixões
Eu desperto.
E o tempo se rói
Com inveja de mim
Me vigia querendo aprender
Como eu morro de amor
Prá tentar reviver.
No fundo é uma eterna criança
Que não soube amadurecer
Eu posso, e ele não vai poder
Me esquecer.
No fundo é uma eterna criança
Que não soube amadurecer
Eu posso, ele não vai poder
Me esquecer
P.D.:Me sigue encantando esa sabia ironía, con la que envuelves tus comentarios.
Rafael
ironía.
(Del lat. ironīa, y este del gr. εἰρωνεία).
1. f. Burla fina y disimulada.
2. f. Tono burlón con que se dice.
3. f. Figura retórica que consiste en dar a entender lo contrario de lo que se dice.
Querido Piti,
1º.- Mi post no es una ironía, ni fina ni disimulada.
2º.- Burlón no es exactamente mi estilo habitual, sí en cambio en clave de humor, de mucho sentido del humor, cuando procede, no siempre.
3º.- Mi retórica, no consiste en dar a entender lo contrario de lo que digo, si no lo que digo, a excepción de que destaque una frase o de alguna manera dé claramente a entender que es lo contrario de lo que pienso.
Pero sobre todo Piti, el buen humor que no me falte, ni a mi ni a nadie. 🙂
Dicho esto, muchas gracias por ese bolero.
Un abrazo.
Estimada amiga Charo: Dejo que el genial y admirado Jorge Francisco Isidoro Luis Borges, te responda por mi:
«Lo que más admiro de los demás es la ironía, la capacidad de verse desde lejos y no tomarse demasiado en serio. Después admiro el valor y la humildad, siempre que no sea ostentosa»:
http://www.youtube.com/watch?v=JB28oT6KyIY
Gracias Piti.
También la samba es bonita. 😉
Igual, amiga Charo, no eres tan buena alumna porque supones que el alma tiene apegos, cuando los apegos no vienen de ella sino de nuestra personalidad efímera. Pide ayuda a tu alma, y así será más fácil la superación de los apegos. Un abrazo, estimada amiga.
Yo soy una ignorante de estas cosas atati, ¿pero mi alma no soy yo? ¿como me voy a pedir ayuda a mi, para mi?
Gracias. Un abrazo.
Más bien, estimada Charo, tu yo inferior, tu personalidad, nuestra personalidad, es una proyección más o menos burda de nuestro Yo superior o Alma, que en la medida que haya una buena relación entre personalidad y Alma, se puede pedir ayuda a ese Yo superior o Alma. Otro abrazo.
Uy atati, que cosa más complicada. Una cosa tan buena tenía que ser más sencilla, como «ser siendo», o sea «se es» y punto, por ejemplo. A ver si ahora me va a complicar la vida el alma!, si es la que voy a tener hasta que me muera!, si nunca me ha dado problemas, y a mi de momento ni me duele ni le hace daño a nadie. Uy uyuy, pero como me voy a complicar yo solita? ¿No puede ser todo más simple? no me líes! ¿Eh? ¿Pero yo tengo un yo superior y otro inferior? ¿y me entero a la edad que tengo?
Anda! te daré un besazo. 😉
El apego. Los apegos.
Pregunta al maestro Deshimaru
¿La libertad es real o ilusoria?
Repuesta
La verdadera libertad se encuentra en el interior del espíritu. Algunas personas parecen objetivamente libres, pero subjetivamente no lo son. Yo me siento libre a pesar de los preceptos. No tengo tantos deseos, simplemente vivo. Aunque me suceda alguna desgracia, aunque mi misión fracase, me volvería a encontrar simplemente con mi kolomo, mi cabeza afeitada y mi kesa y dormiría al borde de la carretera, como un verdadero monje Zen. Las personas ambiciosas y llenas de deseos andan siempre detrás de la libertad pero no pueden alcanzarla. Siempre están ansiosas, tristes. Sus deseos crecen, crecen y terminan por caer enfermas, neuróticas. La libertad no es hacer lo que se quíera. Satisfacer todos los deseos no conduce a la libertad, ya que los deseos del hombre son ilimitados. Es mejor procurar que los deseos disminuyan. La libertad es diferente según la edad, según el karma. Los jóvenes no deben ser estrechos bajo el pretexto de limitar sus deseos. Lo importante es la vía de enmedio, el equilibrio. En la medida de lo posible hay que sublimar los deseos. La libertad nace gracias a un ideal espiritual.
Estimado Joaquín
Hace poco, en este foro, reflexioné sobre un escrito tuyo que hablaba de PASAR PAGINA. Tengo claro que quiero pasar página, renacer, despertar, ser consciente.
Hoy nos dices que hay que SOLTAR, que para mí, viene a ser algo muy parecido.
Realmente, desde que inicié el camino, se que necesito pasar página, soltar, pero no lo consigo. He dejado mucho en el camino, he aligerado mi mochila de muchas cosas ya, pero conforme voy avanzando, descubro que mi mochila contiene aún cosas que desconocía, por lo que en algunas ocasiones me da la sensación que la mochila me sigue pesando una barbaridad y que no conseguiré jamás vaciarla.
Estoy atento a lo que dices y a lo que dicen otros, pero una cosa es lo que percibes y otra aprehenderlo.
De cualquier manera, no pienso abandonar el camino que hace años inicié y que en solitario recorro. Estos mensajes tuyos y de otros, son como señales que me indican que voy en la dirección correcta o que necesito corregir algo el rumbo, aunque la brújula, creo que la llevo dentro, muy dentro.
Gracias
SOLTAR… Soltar para ser libre, soltar para no aferrarte a lo efímero, para flotar en esa inmersidad que es la eternidad. Soltar para con ojos de espectador observar y una vez echo ésto no juzgas puesto que todo es como un espejo en el cual nos reflejamos, cual agua cristalina. Soltar para dejar marchar, cual corriente de río como explicaría Heráclito y así sentíriamos la felicidad de que quienes marchan ya son. Liberación de toda carga pues el alma no entiende de pesos. En ojos humanos es difícil entender la ruptura de lazos, hacia nuestros padres, nuestra familia, nuestros enseres materiales, nuestros amigos… Nuestros, nuestros, nuestros,… ¿Qué es realmente nuestro? Sólo nosotros mismos. Una vez leí: «No mireis a vuestros hijos como vuestros pues no lo son…» Cada vez doy más importancia a ésto puesto que lo considero así. Cuánto más libre de equipaje te encuentres, más libre en el «reino de los cielos».
Gracias Joaquín por este esscrito.
Es curioso como vamos aprendiendo formas de «soltar» o «perdonar», que en el fondo creo que son formas de aliviar nuestro propio peso.
Me han enseñado a no ver los ataques como algo personal, si no como una critica a mis actos y no a mi persona, pero eso la verdad es que no me convence mucho, siguen molestándome las críticas injustificadas, las otras las acepto y procuro remediarlas y pedir perdón cuando he causado algún daño.
Me han enseñado a verlas como fruto de los sentires de la otra persona y creo que eso se ajusta más a la realidad. Si actúo de una determinada forma y solo soy merecedora de críticas por parte de unos pocos o de halagos por parte de otros pocos, es porque esas personas perciben lo que hago de una determinada forma, para unos buena, para otros mala, habría que saber su por qué.
Hace mucho aprendí que si resolvía los «asuntos pendientes desagradables» me sentía mucho mejor. Cerraba una pag. incomoda y continuaba el Camino con más ligereza, así que egoístamente lo mejor es soltar amarras…
Buen jueves para tod@s
Esto último que dices, estimada Jimena, es bien cierto. Si se entiende como egoísmo la aspiración a la felicidad que produce el «continuar el Camino con más ligereza» tras la resolución o «soltar» los asuntos pendientes, sean desagradables o agradables, es cierto que es un egoísmo, aunque sea un egoísmo inteligente y muy útil para los demás. «Así que egoístamente lo mejor es soltar amarras». Saludos, estimada amiga.
Cualquier «cosa» que hacemos persiguiendo nuestra felicidad, suele ser egoísta, aunque ese egoísmo beneficie a los demás…
Incluso el amor.
Hola amigo, Joaquín, gracias por tu aporte.
El trabajo del humano Ser, a la hora de transformar el apego y el deseo en vacuidad.
Es un trabajo de muchas vidas, el que se pueda lograr esta transformación, por parte de la personalidad, siempre envuelta en el calidoscopio de los deseos y los pensamientos, que implacablemente bombardean la conciencia del Ego.
Solo a través del desapego paulatino y constante de la conciencia por medio de la mente, es posible dominar los deseos y apegos, que engolfan a las personalidades, para ir poco a poco penetrando en ese silencio vacuo, donde la conciencia al principio no sabe donde adherirse, pues se siente perdida y solo le queda aspirar a ese llamado yo interno, pues los deseos, pasiones y pensamientos de diversos conocimientos ya no le motivan volver su rostro hacia a tras y solo aspira allanar esa vacuidad con el aliento de su Alma por medio de la intuición.
Les dejo uno de mis pensamientos para fomentar el desapego y la aspiración, que transforman a la personalidad en fuente de inspiración:
Sólo el hombre es prisionero de sus deseos y pensamientos. Ambas combinaciones forman las nubes de ilusiones que ciegan nuestros ojos, creando una actitud inestable en nuestra conciencia. Son estas nubes, como cristales de hielo que no logrando prosperar, hieren nuestro corazón.
De una vida en sufrimiento brotan las semillas del conocimiento, el dolor y la tristeza las hacen germinar, dando una rara flor, su perfume sabiduría y amor, su color la compasión. Aquel que la mira se inunda de amor.
Que la ternura y la compasión sea el principio de tu calma y de tu paz
Un saludo para todos
Milanés
Sí, amigo Milanés, «sólo a través del desapego paulatino y constante de la conciencia por medio de la mente» y por medio de un espíritu o aspiración de servicio desinteresado, «es posible dominar los deseos y apegos», incluso el desapego a aspirar a «ese llamado Yo interno».
Sólo así se logra el auténtico vaciado del ego superficial, incluyendo el vaciado de aspiraciones espirituales. Sólo dejar fluir la vida, y servir, servir y servir de manera desinteresada y desapegada. Un abrazo, estimado amigo.
Estimado Joaquin:
En las veces que hemos coincidido -hago referencia a lo físico- contigo, Santa Eufemia, cena aniversario del blog y en alguna mas que ahora no recuerdo, siempre deduje que estaba ante un hombre humano, muy humano.
Guardo con especial aprecio el momento de la ultima vez en la que anunciaste en la mesa que acababas de dejar tu trabajo para dedicarte a los demás, me di cuenta no sin asombro de que estaba ante un ser capaz ademas de ejercer con el ejemplo lo que predica, dando muestra de que no es solo filosofía sino también humanidad, hay que ser valiente para hacer lo que se dice, siendo consecuente con uno mismo y tu lo has demostrado antes de que llegue el obligado momento de soltar amarras, Dios nos libre de los fariseos que dicen sin hacer y solo en el momento de pasar cuentas ante el Ser Supremo se dan cuenta del lema Virgiliano “Carpe diem”
Un afectuoso saludo ejemplo de humanidad de la buena.
Querido amigo, suscribo totalmente tu escrito, en ese tiempo de convivencia en Santa Eufemia, unas cuantas personas decidimos libremente vivir una experiencia y entre todos conseguir llevar a buen puerto sobre como debería de ser la «futura educación de nuestros hijos» llegando todos o casi todos a un consenso absoluto…enmedio de toda esa maravillosa convivencia, aparecio JOAQUIN TAMAMES para desde su sencillez, su sonrisa, su paz interior, su buen hacer, compartir y transportarnos con su estancia entre nosotros, su meditación en grupo, mayores y niños juntos, enseñarnos a que TODO se puede dejar para hacer el bien o ayudar a los demás a conseguir llegar al «puerto» que cada uno necesitamos…
Un cariñoso abrazo amigo…
Muy buen artículo. Los sufi entienden el alma como el «cuerpo de respiración» cada inspiración es un recuerdo de nosotros mismos cada expiración nos une a la totalidad y así continuamente.
Buenos días.
Difícil verbo este de «Soltar». Gracias por plasmar tan reconfortantes pensamientos, lo más costoso es la conjugación,tal vez la más complicada sea hacerlo en 1º persona. Habrá que intentarlo…
Haiku:
En mi equipaje
vivencias que no pesan
huellas profundas
aloe.
Saludos, buen día.
Disculpa Aloe, quería por tu comentario de más arriba sobre las votaciones, aclararte sobre lo que yo entiendo: que cuando se vota un comentario, dependiendo de los números de votantes que ya hubiesen actuado sobre el mismo, antes que tú, – esto lo marca el paréntesis donde dice «votes cast»- si tu puntualizas con un diez un comentario en el que ya otro votaron, marcando en el paréntesis (1vote cast)la puntuación queda repartida entre lo que tu aportes y lo que aportó el anterior votante.
Ej: el anterior votó con una estrella, y tú con diez, el resultado de la votación quedará en la mitad. Porque tu piensas que el comentario es «magnifico» pero el anterior votante pensó que es lo contrario, así que el resultado final, entre las dos opiniones, es ni un extremo ni el otro, sino el medio. Es lo que yo he observo.
Saludos.
Hola Sananda, buenos días.
Seguramente es como dices. Lo cierto es que no termino de entender el sistema , a pesar de tu perfecta aclaración, no por que no entienda lo que dices , más bien porque no acierto a entender el sentido de las votaciones,
Gracias por tu explicación.
Saludos.
Yo supongo que el sentido de las votaciones, es para intentar «aproximarse» a una idea de como se piensa a nivel público, en una media, sobre cada uno de los temas de debate.
Saludos.
Hola Aloe, te responderé aquí porque en el otro post no me deja.
Ciertamente, «cast» es molde entre sus múltiples acepciones como sustantivo, pero en este caso no es un sustantivo, si no un verbo, «to cast» = «emitir», que a su vez tiene otras múltiples acepciones, «x votes cast» quiere decir «x votos emitidos», es decir, si es (0 votes cast) es que nadie ha votado, (7 votes cast) es que han votado siete personas, o sea, siete votos emitidos, luego, la suma de estrellas de cada voto se divide entre el número de votos emitidos y esto da el «rating», es decir, la proporción. Si alguien te pone una estrella y otro te pone diez, la suma es once estrellas, que dividido entre dos votos emitidos da 5.5.
Los ingleses que sabes que son muy suyos, una palabra vale para miles de cosas, en cambio en español una cosa tiene miles de palabras, cuestión de riqueza lingüística. Espero haber podido aclararte un poco tu lío. 😉
Un abrazo.
Apreciado Tamames
le agradezco su extensa y completa reflexión, y sin duda ha de ser una meta de todos y cada uno de nosotros, andar ligeros de equipaje, y especialmente en este espacio/tiempo que nos ha tocado vivir.
Un servidor de usted ya lo empezó a hacer hace tiempo, de tal manera que puedo afirmar que nada tengo, y es desde esa realidad, que vivo y soy más feliz
Un abrazo
Amigo Joaquín,
Vivir en formatos, es el constante intento para una mejor convivencia y nos pide muchas veces ,la cesión de grados de libertad ,pagando con resignación y apagando luces a la ilusión.
Seguramente algún día seremos mas valientes para que un sólo formato nos albergue en la plenitud de la maravillosa ingeniería humana.
La reflexión que nos regalas tiene el propio diseño del habitat interior ,con puertas que solo se pueden abrir con la llave del corazón .Gracias por abrirlas!
Un abrazo
Gracias por el artículo Joaquín, si bien quisiera puntualizar que en mi caso soy como la Virgen del Puño y me cuesta,me cuesta bastante,esto de soltar.
Supongo que tendré que ir rellenando casillas poco a poco pero,si cuesta sí.
Saludos cordiales
Interesantes reflexiones, Joaquín. Esto de soltar es muy importante. Lo difícil es saber cuál es el mejor momento y la mejor manera de hacerlo. Además, hay quién confunde soltar, con no comprometerse, liberarse de cualquier responsabilidad o no luchar por los ideales.
En fin, soltemos todo lo que no necesitamos, sin dejarnos de comprometernos con quienes queremos y con los valores que merecen la pena.
Buen día a todos.
Hola a todos.
Joaquín, gracias por tu artículo.
Esto es una de las cosas más importantes para vivir en la vibración de paz,tanto interiormente, como desde el entorno exterior. La paz.
Una vez situados en este escenario, hay mejor acceso al avance en la perfección espiritual. Con ésto último, es lo que para mi propia experiencia, se accede a la verdadera y única felicidad que el ser humano experimente.
Todo es una cadena de pasos, unos llevan a otros, tanto camino al sufrimiento, como a la felicidad. Desde mi propia experiencia.
He entendido muy bién tu comparación de:
«Entrar en éste baile largo y triste…»
En mi vida, han habido etapas en las que me he visto en ese baile, y yo misma he llegado a la mismas conclusión.
Un baile largo y triste, del que ya me he sentido cansada de tener que bailarlo.
Y lo peor de todo, me sentia atrapada en él, y me veía a mí misma baialando sin quererlo más, pero sin poder salir de él.
Atrapada en sus pasos y música destructiva…..
Yo misma me he sentido no obstante, tan impotente para conseguir echarme «a la cuneta» que ya pedía frecuentemente a mi Ser Superior -a Dios, he busco la mediación de Jesús para ello, cada vez que lo deseo, como para todo, y en otras ocasiones, también a las fuerzas universales benignas, sin tener que saber de nombres-
Todo porque yo misma no he estado a la altura, o tenido la capacidad, de poder dejar de bailar esta mortal danza….
Pero, ¿qué es lo que me lo impedía?
Parecerá «pobre» y lo será. Pero notaba, que el principar obstáculo para librarme de tal mal,no era otra cosa que mi propia oposición a salir de la espiral de males…..
A pesar de que yo misma sufría las consecuencias,
me parecía que para librarme, no sería posible mientras que por «lógica» no se dieran algunos otros pasos, también por parte de los demás….u ocurriesen cosas, que me falicilatesen sentir de otra manera…..
si esto no era así, me parecia que, «lamentablemente» mi espíritu se veia obligado con ello a tener que continuar en la danza…..
He notado éte fallo por mi parte, en ocasiones en las que me veia participando, o atrapada en esta clase de bailes, y a pesar de mi malestar y en ocasiones incluso «autodestrucción» me sabia mal llegar al entendimiento de que concluir este baile, estaba en mis manos…. y si me sabía mal, era porque notaba, que a pesar de entenderlo,
«mi ego» me lo impedia.
¡Pobrecita yo…! cuando me veia en ésta situación.
Así que tenía que echar mano a la ayuda «exterior» desde mi interior, para conseguir diluir mis propios obstáculos…..
Cuando se entiende todo esto, entonces me pregunto:
¿Cómo una cosa tan simple, se transforma, o la transformo, en algo tan dificil?
Pero así pasa…..
Hay personas que pueden desprenderse de prendas de vestir cuando entiende que no les sientan bién. A otras les cuesta más trabajo, e incluso muchos se resisten a desprenderse de ellas, y las conservan durante años, a pesar de que son conscientes de que no les convecen o agradan tanto.
Y en ésto se trata igualmentemás, de desprenderse de lo que no interese realmente.
¡Tan simple! y tan dificil como a veces lo hago..
Saludos.
Corrección:
«….me FACILITASEN sentir de otra manera…..»
Sinceramente me resulta muy curioso todo esto. Respeto enormemente a Joaquín como persona y así mismo la labor que desarrolla, es un auténtico maestro en el mejor sentido de la palabra.
Personalmente, partiendo de la premisa de que yo no elegí nacer, y por lo tanto me he encontrado en esta situación vital, intento hacer que el camino sea lo más cómodo posible, es decir, el que me aporte menor nivel de sufrimiento.
Y esto lo consigo manteniendo cierto conformismo, teniendo claro que la ambición genera frustración, y que no es bueno darle muchas vueltas a las cosas, ni tener la mente en contínuo trabajo, y por supuesto dando el caracter de «problema» a lo que realmente lo merece.
Me dedico a vivir, sin seguir ningun tipo de adoctrinamiento espiritual ni mental, creo que todo es mucho más sencillo…o al menos a mi me lo parece.
Para qué complicarnos el viaje?
Recibe un cordial saludo.
El adoctrinamiento espiritual no existe… sólo se adoctrina a través de la mente y los pensamientos. El dogma no es espiritual.
Aciertas al decir que sólo te dedicas a vivir, ese «sólo» es de una valentía enorme. Esos son los verdaderos místicos. Vivir, simplemente vivir. Sólo se puede vivir ahora. Eso es soltar.
Un abrazo.
Nacho, si no te he leido mal:
Los verdaderos misticos son los que se dedican a vivir?
Vivir es soltar?
Si Rafa dice que se dedica «solo» a vivir , es, según tu deducción y sólo por eso,un místico? Rafa es un místico?
No entiendo nada Nacho. Quizás la idea que yo tengo de un místico esté distorsionada, quizás….
Serias tan amable de explicarmelo?
eva
Es muy simple Eva, vivir en su totalidad. No pensar la vida, sino vivirla.
Si conoces los 10 toros del Zen, verás que la última carta representa a una persona sencilla que se confunde entre el gentío del mercado. Eso es un místico. Una persona normal que vive la vida de forma normal.
Si vives en tus pensamientos estás soñando, dormitando o inconsciente, pero eso no es Vivir.
Vivir es soltar.
Estimado amigo Nacho,
Una persona normal, como tú la defines, es una persona digamos distraída en los afanes de la vida sin más, simple y llanamente, vive sus deseos, apegos, frustraciones y egoísmos sin más complicaciones de la vida.
Un místico es una persona dedicada a la vida espiritual enfocada en su corazón por amor a Dios y a sus semejantes, por darte un simple ejemplo te diré que Sta. Teresa de Jesús fu una Mística igual que su contemporáneo San Juan de la Cruz.
Nada que ver con una persona que vive la vida sin más.
Esto sin entrar en detalles y sin decir lo que un Ocultista es y cómo vive la vida.
Un saludo
Milanés
Si interpretas eso de mis palabras entoces es que no me has entendido nada. Por lo demás la aspiración de un místico no es salir en los libros de historia. Uno fluye por la vida… igual te esperan grandes azañas igual pequeñas… eso no lo decide el místico. Él es simplemente una persona normal.
Un abrazo querido amigo.
Querido amigo Nacho,
No se trata de salir en libros de historia, se trata de lo que es un Místico y no una persona normal que vive la vida plácidamente sin más, solo por soltar amarras de responsabilidades.
Han existido miles e incluso millones de místicos, en la historia de nuestra Raza, y no han salido en los libros de historia.
Es posible que para mí el significado de místico no es el mismo que para Ti
Un saludo afectuoso
Milanés
Totalmente de acuerdo, yo no he hablado de ser irresponsable. Una persona que decide vivir el ahora acepta la libertad y la responsabilidad que ello conlleva. Precisamente al soltar amarras dejas de depender de los demás y ya no puedes culparlos de tus errores.
Eso es una persona normal que acepta su autenticidad con normalidad. Un valiente, un sabio… Por lo tanto un místico.
Un abrazo.
El camino de los valientes no busca una fórmula preestablecida, hay tantas formas de ser místico como formas de vivir en autenticidad. Morir y renacer constantemente, siendo un espejo, soltando y fluyendo eternamente. El que busque fórmulas encontrará dogmas.
🙂
En estas cosas tan importantes, no creo que «valiente/es» sea una palabra ha tener muy en cuenta.
Lo importante es conseguir lo necesario, en pos a la evolución positiva, y es bueno que cada uno pudiese «captar» cual es el camino que más posibilidades le concede (según la naturaleza, o estado evolutivo en el que se encuentre).
El que la lleva la entiende.
Saludos.
Bueno querido amigo, si así lo comprendes de ese modo pues muy bien.
Pero sigo diciéndote que para mí un Místico, no es lo que Tu denominas por persona sabia y mística.
Un abrazo
milanés
Tu estás aquí.
Dices que eres conformista?. Rafa, lo dudo mucho.
Quien escribe en un foro de estas caracteristicas, es un caminante, como mínimo, de la senda del espiritu.
Haz una reflexión sobre estas palabras tuyas. No creo que ellas definan la imágen, que a mi entender, percibimos de ti.
Un saludo amigo.
Pues si que es verdad, Joaquin. Aunque a mi las más de las veces se me hace casi imposible conseguirlo, soy consciente de que es la liberación.
De pequeño no solo lo sabía sino que conseguía poner en práctica, lo vivía al día y era consciented de que los mayores de mi entorno no lo hacían. Me resultaba muy chocante, me acuerdo de esto perfectamente, hasta que un día ya madurando un poco, o lo que yo creía que era madurar, me dije a mi mismo que ese desapego por todo y por todos era una barbaridad, una irresponsabilidad por mi parte, y así, dejé de hacerlo, considerandolo un lujo infantil que no me podía permitir. Aun me reprocho haber actuado así porque pienso que actuando así desantendi a mis padres. La adolescencia te hace confundir unas cosas con otras y lo que parece desapego al final solo es cómodo egoismo irresponsable. Pero, a pesar de todo, no me olvido, siempre quedó algo de eso, porque está en mi, siempre lo estuvo.
De lo del último aliento, la verdad, …me da mucho yuyu hablar de eso, incluso solo el pensar en ello. Por ahí me temo que ando muy poco evolucionado, será por ser de despeñaperros pa bajo, pero no asumo,…nada el tema, por ahí lo llevo francamente mal, con todo, con el sistema, con el plan, con lo de la fecha de caducidad, con lo de la brevedad, …pufff, faltal. A mi me parece que esto esta mal planteado,…me refiero a esa «necesidad» que tenemos todos de que nos pase, eso…lo inonmbrable.
El desapego de las cosas lo llevo mucho mejor pero el de ciertas personas que ya no están lo llevo faltal, seré un poc burro, pero …igual me paso un día por la Fundacion de Lourdes a ver cómo se hace eso, cuando crea que puedo intentarlo.
Yo antes no era así, pero claro, es muy fácil vivir en la insconciencia hasta que te das de frente con el asunto, ahí empieza la cuestión, la experiencia del abismo que se abre de repente ante tí cuando percibes que la vida sigue y tu te has quedado paralizado viendo pasar la vida en blanco y negro por delante de ti como si nada hubiera sucedido, como si esa pérdida no hubiera supuesto cambio alguno para el resto del mundo, pero para ti el Mundo ya no es el que era, ni siquiera tiene el mismo color, a veces ni tiene ya.
Así que sí, que es verdad, que es la verdad, que yo la supe, que está por ahí dentro, pero ese empeño en mirarse la herida, es un bucle del que a veces crees que has salido y otras veces no lo ves terminar.
Eso de tener que morirse y ver como tus seres queridos se van marchando cuando por fin has aprendido a quererlos y a vivirlos, para mi, no está nada bien pensado, hay la creación bien habría merecido tardar un día más para dejar la cosa mas afinada en este asunto de la fecha de caducidad,…es como lo que pasaba a Nexus 6 en Blade Runner, su creador lo concibió con fecha de caduicidad,…esto tendriamos que cambiarlo también, o sino, la unica alternativa que nos queda,… considerar que no existe…que al final es lo que hacemos de una u otra forma.
Muchas gracias querido Joaquin por remover nuestras consciencias.
Salu2
Gracias por su escrito hoy Sr. Tamames, lo cierto es que los pensamientos que hoy comparte con nosotros, me han invitado a la reflexión.
La consecuencia a la que nos lleva esa ansia “a poseer, a tener, a cerrar el puño para que nada se escape” es a la existencia de una barrera de amargura y resentimiento que implica que no podamos experimentar el amor, la paz fluyendo a través de nosotros. Cuando una persona está amargada, inconscientemente levanta una muralla alrededor de su corazón que le impide recibir el amor, el gozo y la paz, y por lo tanto es incapaz de transmitirlos y ser benigno con los otros; más bien todo lo contrario, afecta negativamente a los que están a su alrededor.
Esta raíz de amargura puede venir de un espíritu no perdonador. Su influencia hace que la actitud, la comunión y aún la adoración estén encarceladas en una celda de rencor y encadenadas por diabólicas ataduras de odio.
A medida que vamos “soltando” la amargura y el resentimiento crecemos espiritualmente, y vamos siendo liberados de esas ataduras, y comenzamos a experimentar la libertad, la paz interior…
Pero la tarea la de “soltar”, que dificil es.
“Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.” (Efesios4:31-32).
Un abrazo a todos.
Querido Joaquín:
Gracias por el artículo .. lo primero.
En cuanto a «soltar» lo define el diccionario como «dar libertad», pero eso sirve si suelto «a alguien», pero, ¿me da libertad si me suelto yo?
Una analogía marinera, si «suelto amarras» ¿libero el barco o el puerto? 🙂
(Casi parece un koan) 🙂
Salu2
Si eres capaz de soltar eso que dices «yo», entonces, ¿quién eres tú…? (siguiendo el Koan) 😉
Un abrazo.
Hola Kefas, creo que no nos podemos soltar de nosotros mismos, por muchas amarras que soltemos, pero sí puedo soltar viejos prejuicios, viejas formas de vida, viejas camisas, viejas historias que me retienen en un pasado que ya no existe.
Nosotros mismos, mi yo, mi chispa de espíritu, mi consciencia, mi observador silencioso, me acompañara siempre, en esta vida o en otras , por eso es mi mejor compañero y no podemos soltarnos de él, ni siquiera cuando morimos. Ese creo que debe ser nuestro eje, nuestra base y fundamento, el resto es pasajero y transitorio, algún día lo dejaremos todo aqui, y muchas veces dejamos muchas cosas para renacer, cuanto más nos vaciamos de cosas inservibles, más nos podemos llenar de lo esencial.
Creo que las amarras no son el barco, retienen al barco, te retienen y no dejan que sigas tu singladura…
Gracias Querido Joaquin por tus palabras. Vivimos apegado a tantas y tantas cosas, que nos olvidamos que hasta que no las soltemos todas no seremos «libres y felices».
Es un buen ejercicio para ir practicando dia a dia: «soltando» poco a poco.
1 abrazo fuerte
Discúlpeme don Joaquín si no he hecho más que todo lo contrario a lo que usted sabia y rectamente propone. La pasada noche cogí y agarré todo el atrezzo español que pude, y no lo solté fruto del shock anímico que me provocó el pase de la selección a la final. No hemos podido dejar a los alemanes irse de rositas y me he alegrado de que se vayan para casa -bueno, a por el 3º puesto y tal, que diría Aragonés-. Les hemos hecho morder el polvo, aunque en mi defensa he de decir que admiro al pueblo alemán, su casta, su orgullo y su educación.
He de admitir que estas cosas suscitan una inesperada debilidad en mi ser, sobre todo a raíz del mentalizarme desde chico de que España nunca llegaría a nada en este tipo de eventos balompédicos, algo que sí ha conseguido en otras disciplinas.
Buen artículo, espero que me sirva de algo aunque, no obstante, dejaré su relectura para unos días después de la final.
Un saludo.
Muchas gracias, Joaquin. Soltar no existe sin agarrar. Es una danza precisa como el mecanismo de un reloj. Usar la mente siempre, que es mi pecado, no ayuda. Hay que aprender tecnicas nuevas. Me das ideas. Trabajo en ello. Gracias. Cuidate y saluda a la familia.
gracias juanlo,
me has hecho pensar
en
ello
a lo mejor hacer del pensamiento la cabeza orgánica ?
Gracias Joaquín, por tu artículo, causa de haber estado recapacitando.
Estoy de acuerdo con la afirmación de soltar lastre, demasiado lastre llevamos en nuestra existencia que nos impide fluir en la superficie. Pero, también tengo la convicción que no debo soltar y sí agarrar la mano de mi mujer, mis hijos, amigos e incluso de aquellos que no conozco para trasmitirles mi calor. Agarrándoles la mano les manifiesto que sigo ahí.
Soltar amarras de las vanidades materiales que nos envuelven, sí. Entretejer lazos para amarrar los vínculos que me elevan, También. Aunque sacrifique la pureza de mi búsqueda vital.
Libertad, cuantas veces expresada y que pocas alcanzada. Se obtiene cuando uno alcanza la emancipación material y espiritual. Mientras se mantenga algún vínculo con algo material o espiritual se malogra el deseo de independencia, y no permite alcanzar la libertad. Libertad en estado puro es la soledad del individuo.
Es éticamente aceptable la existencia en soledad o es una postura egoísta, por llevar al extremo una búsqueda.
Desde que se nace se generan vínculos, que al deshacerlos pueden ocasionar dolor en aquellos que tenemos cerca. Sería admisible romper estos enlaces. Podría parecer que buscar un punto de equilibrio sería lo más adecuado. Y aquí es donde radica la perversión de la idea, pues dicho punto de equilibrio es diferente en cada persona.
Yo no puedo ser libre, en el concepto puro de Libertad, solo puedo tratar de ser lo más independiente posible y evitar en la medida de lo posible que me sometan. Es suficiente o me estoy justificando para no vivir en soledad.
Como ya he escrito anteriormente, soy un hombre que escucha su conciencia. Conducta que me permite estar la mayor parte del tiempo en armonía conmigo y con mi entorno a pesar de mis contradicciones.
Con a afecto
Ra,
a medida que te he ido leyendo, me he ido leyendo a mi mismo. Hubiera escrito las mismas ideas, las mismas palabras, si hubiera podido encontrar el espíritu limpio que tu has encontrado esta tarde, cuando te has sentado para volcarte con nosotros. Yo no tengo tu sabiduría para expresar las cosas, se me da mejor detallarlas en ideas breves, espero que me disculpes por ello.
a) «también tengo la convicción que no debo soltar y sí agarrar la mano de mi mujer, mis hijos…»
Estoy de acuerdo contigo. Se trata de una NECESIDAD, no de una obligación moral, ni mucho menos de una elección. Se trata de que les amas más allá de tu propia vida, intensamente, desesperadamante. Y te importa nada que sea inadecuado, poco evolutivo o maduro. NECESITAS AMARLES DE ESE MODO. Sólo experimentando semejante amor en semejantes condiciones tú puedes ser tú.
b) «soltar amarras de las vanidades que nos envuelven, sí. Entretejer lazos para amarrar los vínculos que me elevan, también. Aunque sacrifique la pureza de mi búsqueda vital»
Para algunas personas es sencillo renunciar a todo, incluso a si mismas, excepto al amor incondicional que sienten por quienes les rodean. Habrá quién te dirá que ésa es precisamente la última condición del Iniciado: renunciar a sus sentimientos por aquellos a quienes ama.
Habrá quién te dirá que tan sólo el que renúncia puede experimentar la libertad, y que ésta, LA LIBERTAD, sólo puede experimentarse en solitario. Que el camino de la ascesis es la soledad y que en la renuncia a los sentimientos -renunciar a quienes amamos, dejarles ir, en el fondo es éso- se encuentra la segunda renuncia, la que después de haber renunciado a lo tangible, nos lleva al discernimiento, a la Luz. Ra, HERMANO, todas estas consideraciones son sólo CREENCIAS. Creencias como la que dice que aquellos que llegan aquí en su última etapa, tienen la función de servir e iluminar, creencias como las que defienden que el último peaje para la Luz ES RENUNCIAR A AMAR, para pasar a simplemente SER.
Lo único que me importa en alguien como tú es que SEAS FELIZ y VIVAS EN PAZ. Nada más es importante. Tu paz pasa por amar y servir. Hazlo, no se me ocurre mejor forma de llegar a la Luz. Puestos a elegir creencias, prefiero mi PAZ antes que los ojos cerrados de un Buda. Estoy seguro de que llegaré al mismo lugar. ¿Pureza en mi búsqueda vital? Nada puede pedirte un camino,nada ni nadie. NI SIQUIERA DIOS, TU PADRE, EL INCREADO O COMO QUIERAN LLAMARLE PUEDE PEDIRTELO. Tú, Ra, eres DIOS. Tu paz es SU LUZ. El cielo, elparaíso, la Luz está aquí, en AMAR Y SER AMADO.
c) «Es éticamente aceptable la existencia en soledad o es una postura egoísta, por llevar al extremo una búsqueda.»
Entiendo que es una pregunta, y si no lo es, corrígeme. Cada Camino es único. Algunos lo desarrollarán en soledad, o querrán desarrollarlo en soledad. No por ello son egoístas, sólamente es su camino. El que ellos eligieron. No podemos juzgar el Camino de otros en base a reglas éticas. Y más aún, no podemos juzgar. Sin más. NO PODEMOS JUZGAR. Cada ser aquí llegado es una inmensidad de sentimientos, pensamientos, sensaciones y creencias. Insondables…Y en cada tiempo se modifica. ¿Quién se atreve a decir «Yo conozco a ese Hombre?»
d) «Podría parecer que buscar un punto de equilibrio sería lo más adecuado. Y aquí es donde radica la perversión de la idea, pues dicho punto de equilibrio es diferente en cada persona.»
Hay una creencia que dice que cada ser encuentra su espacio en cada reencarnación. Y dice que nos reencarnamos en grupos de almas. Almas que viajan juntas, que evolucionan, y que se ayudan unas a otras. No tiene más mérito que ése, el de ser una creencia. A quién le sirva, que la asúma. A mi me sirve, y la he incorporado a mi vida. Pero sólo es éso, a MI ME SIRVE. ¿Y por qué me sirve? Porque en este momento de mi vida, necesito encontrar esa dirección. La dirección que encuentro me lleva a pensar que estoy ayudando a gente a la que amo. De la que me siento responsable hasta extremos que se encuentran más allá de la propia vida. Hasta el punto en que mi vida cobra sentido AHORA sólo a través de ese cuidado, de esa asistencia, de esa ayuda, o como cada uno quiera llamarle. Mi punto de equilibrio en este momento, mi margen de libertad, es el que va desde sus necesidades hasta el momento en que éstas terminen. ¿Éso significa vivir de la inercia? No. Para nada. Tengo ilusión, soy feliz. Éso sólo significa que me debo a esa tarea hoy y ahora y que no pienso abandonarla. Porque es mi Vida misma. En mi tarea, en mi trabajo, se encuentra mi evolución, en apreheneder lo que deben se encuentra la suya. ¿Soy una victima por ello? No. ¿soy egoísta por ello? Tampoco. Sólo hago lo que debo, igual que tú.
¡Muchísimas gracias Ra!, hoy me he sentido muy cercano a ti. Te lo agradezco de corazón.
Turbación, tu amable escrito ha provocado en mí esta sensación.
Encuentro exagerado los halagos que me dedicas, que no merezco y me agitan. Yo simplemente soy un hombre sencillo, lleno de contradicciones ya lo he dicho con anterioridad, que me hago preguntas y que no obtengo respuestas.
Muchas gracias a ti por estar ahi, con afecto,
Soltar los intereses materiales e incluso los personales, sean del tipo que sean, con ser un logro nada fácil de conseguir, no es nada si se compara con el más decisivo y definitivo de todas las sueltas de amarras, como es el soltar los apegos.
Las antiguas enseñanzas que nos indican los pasos de toda evolución humana, aunque el proceso sea particular e intrasferible, sí contemplan el cumplimiento de unas etapas bien definidas del camino que supone ese proceso encaminado a sintonizar de manera estable con esa vocecita que siempre está ahí a pesar del jolgorio exterior que impide nos hagamos conscientes de su presencia.
El primer paso es el deseo o más bien aspiración a ayudar a los demás, a servir, no sólo a los «suyos», a los afines, sino al conjunto del entorno donde nos haya tocado estar. Esto es gracias a una buena dosis de generosidad, altruismo y dedicación a los demás, no exenta de sacrificio.
A continuación, para que ese servicio sea realmente eficaz, se aborda la consecución del segundo paso; el cual se da cuando el aspirante comprueba que en su servicio hay todavía ciertos intereses personales, bien de reconocimiento de su labor, bien de búsqueda de aprecio, o de honores, o el logro de una posición influyente, en su vertiente económica o en la del mero acceso al poder que sea.
La solución consiste en «trabajar» tanto la vanidad como el egoísmo, lo cual se traducirá en la capacidad de servir de manera desinteresada. Logro nada fácil como decía al principio, pero con voluntad, entrega a los demás, práctica de la Meditación y un corazón cuya natural generosidad se ha visto fortalecida en la medida de la adquisición de los valores anteriormente descritos, va permitiendo que tanto la vanidad como el egoísmo se diluyan paulatinamente, soltando así los últimos resquicios de nuestros deseos personales.
Y por último, tras el dominio de la práctica de un servicio desinteresado, viene acaso el paso más complicado, como es el soltar los apegos que puedan surgir en la realización de ese servicio desinteresado.
Apegos que pueden ser de índole afectiva hacia las personas que tratamos, como el depender emotivamente o sentimentalmente de esas personas, lo cual impide que el servicio sea lo útil e imparcial que sería preciso, no afectando así la pérdida de un ser, su marcha o incluso su animadversión, gracias a la obtención de la llamada «impersonalidad» u olvido de uno mismo y de sus sensaciones, como prueba del algodón de la superación del ego que tanto inciden todas las enseñanzas orientales; o ya los últimos apegos de índole operativa por llamarlo de alguna forma, donde el desapego debe llegar incluso a la propia obra de servicio y a los métodos o instrumentos a emplear, no importando el quedar para los demás como un santo o como un demonio, puesto que si de verdad hay ausencia de vanidad, de egoísmo, de dependencia emotiva para bien o para mal, y el cultivo correspondiente del olvido de uno mismo y de no tomarse nada como algo personal, todo aquello que se haga en pro de servir a los demás no está sujeto al mundo de las apariencias, soltando así las últimas amarras o bagaje de nuestro ego.
Se dice, se comenta, que es a partir de ese momento cuando la vocecita de nuestra alma, deja de ser vocecita y toma posesión de su vehículo terrenal ante el vaciado de ese cuenco que supone la personalidad. Ya no hay personalidad, se han soltado todos los deseos, intereses y apegos; y el Ángel solar del Alma sustituye a la personalidad en la gran fusión o síntesis de la aparente y cansina dualidad que supone la relación personalidad-alma.
Bueno, pues creo que me ha salido una chapa, así que pedir perdón, y agradecer de todo corazón este bonito a la vez que profundo artículo del estimado Joaquin. Muchas gracias, amigo.
Estimado amigo Atati: ¡Magistral como siempre!. Me ha llamado la atención la frase casi final de tu comentario, en donde nos plasmas…»Se dice, se comenta, que es a partir de ese momento cuando la vocecita de nuestra alma, deja de ser vocecita y toma posesión de su vehículo terrenal ante el vaciado de ese cuenco que supone la personalidad»,
Ese es el nudo gordiano de este asunto querido amigo.
Debemos desprendernos de una personalidad material propia, aunque si pletórica y libre en la conciencia de una consciencia de nuestros actos; o de lo contrario, nunca llegaremos a ser lo que tanto pensamos y/o meditamos.
Si decidimos que la nave de nuestra vida, inicie su andadura; precisa quitar antes que nada las amarras que la atan de un puerto material.
Es la nave la que se aleja…ya que se pone en movimiento. El puerto solo será un lugar estático donde poder echar las amarras en caso de temporal.
Me imagino a un Ser humano en su último aliento. Solo el bagaje de lo entregado de a gratis total hacia sus compañeros de viaje, será lo que contará en el otro Verso que nos espera.
¡Traje sin bolsillos,para una Eternidad millonaria!-Rafael Aparisi-.
Te dejo una canción, en donde desde la sencillez, nos relatan bellas historias sobre el valor de la «Voz»:
http://www.youtube.com/watch?v=u7rSAV2xG4E
Un abrazo en tu Alma.
Sí, amigo Piti, la clave reside en la renuncia, o como dijo Jesús más o menos, «abandona todo, y sígueme», no haciendo referencia únicamente a bienes materiales, sino precisamente a prescindir, soltar, todos los deseos, espectativas, conveniencias, intereses y apegos que constituyen nuestro ego, en la mejor tradición oriental yóguica, budista o taoista. Otro abrazo y muchas gracias por tu esquisito gusto musical, estimado amigo.
Gracias, Joaquín Tamames, por tu magistral lección de «soltura».
Estimo Joaquín,
Un artículo muy interesante.
Soltar = aceptar.
El hombre necesita expresarse, manifestarte a través de otros. Su individualidad es inalienable a su sociabilidad. Vivir, es desplegar los cinco sentidos a su máxima expresión. Se trata de prolongarlos durante ese efímero momento de la existencia, de vivir bajo la aceptación de nuestra finitud, entendida esta como una categoría atribuible a nuestro ser.
Quien es capaz de atesorar la esencia de la vida sin esclavizar su alma, acepta la finitud de su siendo. Alcanza la libertad de espíritu.
Un abrazo.
Queridos amigos del Foro,
Muchas gracias por vuestras intervenciones a propósito de la nota de hoy.
Estos encuentros enriquecedores en el Foro hacen que dos más dos sean cinco.
Buenas noches, un fuerte abrazo
Cinco?
Creo que son más los regalos que he recibido aquí:
– Esta propia casa,
– Sus habiantes, sin excepción, porque en algún momento, tod@s han sido importantes,
– Lo aprendido,
– Lo sentido,
– La amistad encontrada…, y sentida.
– Ls risas, las sonrisas, y las lagrimas.
– Los abrazos, los besos, los encuentros, los secretos, las confidencias, los problemas compartidos, las ilusiones, y los proyectos.
– ……………………..
Comparto tu opinión.
Pero, ¿debemos soltar esos regalos?
Un soltado saludo Doña.
No. Eso hay que llevarlo dentro de uno.
Saludos
algo más para ti, DOÑAJIMENA, con mucho afecto:
fotos 15 y 16 del Foro de Mario Conde from Ernesto de Benito on Vimeo.
Mil gracias, voy a verlas inmediatemente.
Bss