Esta mañana decía algo así como que la búsqueda verdadera hay que realizarla superando las capas superficiales de la epidermis. Como se busca el agua por los zahoríes. Utilizando ramas de olivo, péndulos, varillas…Da igual. La idea consiste en que una fuente de energía (en este caso el agua) circula en el interior del planeta al que pertenecemos. En realidad todo está contenido en el conócete a ti mismo. Bueno pues si nos atrevemos a ser zahories de nuestra energía interior, buscadores de nosotros mismos, no estaremos perdiendo el tiempo. Al contrario.

¿Qué no es fácil?. Claro que no. Como tampoco encontrar el agua buscada bajo la tierra. De hecho, el gallego de la fotografía y yo no dimos con el manantial. Lo peor es que a veces creemos haberlo encontrado y al perforar no conseguimos mas que polvo y tierra, en el mejor de los casos algo húmeda.

Pero eso no inhabilita el oficio de zahorí de nosotros mismos. Buscadores de nuestro interior.

Por eso esta fotografía puede ser un buen símbolo.