Ramón Guillén
El sábado 12 de junio de 1976, a las 15:15 Hs. el notario y líder de la Coordinadora Democrática (más conocida como la Platajunta) Antonio García-Trevijano abandonaba la Prisión Provincial de Carabanchel, tras setenta y dos días de encarcelamiento. Cuando abrazado a su esposa se encaminaba hacia su Jaguar que lo aguardaba en la pintoresca avenida de los Poblados era consciente que su papel en la recién estrenada comedia de la Transición había concluido por falta de quórum democrático en el patio de butacas del teatro de la democracia. En octubre se recortaba las patillas de Curro Jiménez y se despedía de la 1ª fila pasando al paraíso o gallinero del café-teatro para todos. Con la polvareda levantada por las ruedas chirriantes del elegante automóvil del idealista por antonomasia de la política española de aquel entonces, incurso en el sumario 721/76, como presunto autor de un delito contra la forma de gobierno previsto en el artículo 163 del Código Penal de 1973, se desvanecía su propuesta de ruptura con el anterior régimen y comenzaba la pantomima reformista que Adolfo Suárez y el Jefe del Estado -sucesor de Francisco Franco– nos vendieron como la panacea al déficit democrático que padecía el pueblo español desde el 1 de abril de 1939.
Y ahora os formulo la siguiente cuestión: ¿Creéis que existió realmente la Transición o fue sólo una leyenda urbana como la de ‘la chica de la curva’ que veían al pasar, el proyecto de duque y el de la Sanglas en los alrededores de La Zarzuela? Yo, como García-Trevijano, creo que fue un timo y un tubo de escape para las clases dominantes y los poderes fácticos del franquismo, así como para la Oposición “democrática” del paripé encabezada por Felipe González, Fraga o el carcelero de Trevijano, y con la colaboración estelar del genocida de Paracuellos del Jarama.
A mi parecer, el timo de la Transición podríamos entenderlo en el sentido de que fuese una obra teatral de ficción que nunca habría existido en realidad, y que únicamente sirvió para legitimar un franquismo después de Franco que generara una democracia franquista, es decir, un “real” y no mítico oxímoron. Sinceramente, creo que pasados 35 años tras el fallecimiento del Caudillo es hora de desenmascarar todo este timo, y quitarle el antifaz e identificar a los que he denominado como “los trileros” de la Transición. Nos han escondido la bolita y todavía -como malos tahúres- no hemos sido capaces de encontrarla por culpa nuestra y por hacer caso a los ganchos que desde 1975 están conchabados con los vendedores de humo del denominado “juego democrático”.
En mi opinión, los trileros convirtieron a la Transición en el paradigma ideal del tránsito de una dictadura o dictablanda (para los que jugaban al tenis con Manolo Santana) a la demotrile.
Llegados a este punto, y si hacemos un poco de retrospectiva histórico-jurídica (y en este Foro me consta que disponemos de eminentes tribunos y jurisconsultos), nos podremos dar cuenta que la Transición no comienza tras la muerte natural del Generalísimo, sino ya en 1947 con la promulgación de la Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado, y tiene a su vez dos hitos posteriores fundamentales para dejarlo todo “atado y bien atado”: La Ley Orgánica del Estado de 1967 y la fecha del 21 de julio de 1969, el día que Franco designa a Juan Carlos sucesor con el título de Rey. Es decir, la Transición no se inaugura con las primeras elecciones generales de junio de 1977, ni con la entrada en vigor de la Constitución de 1978, aunque quizá, sí culminó su función teatral con la victoria del PSOE en octubre del 82 y la formación del primer gobierno socialista de la demotrile con un Jefe de Estado Borbón formándolo en La Zarzuela.
En este sentido, para salvar la Monarquía, Juan Carlos juró los Principios y Leyes Fundamentales del Movimiento; después de la muerte de Franco mantuvo al “cuervo”, Arias Navarro, y sin duda, me da la sensación que hubiera asumido, si no hubiesen fracasado por el asesinato de Carrero Blanco, los intentos de reforma desde el interior del régimen franquista. Al final, parece que no tuvo más remedio que propiciar una reforma democratizadora, eso sí, auspiciada y controlada desde el poder con Suárez como presidente del 2º gobierno de la Monarquía.
Sin duda, el proceso del timo de la Transición culmina en la Ley para la Reforma Política aprobada por referéndum (por cierto, ¿cuántos más hemos tenido desde entonces?) el 15 de diciembre de 1976, que consigue vincular a la Monarquía a un sistema parlamentario basado en el sufragio universal. De esta manera, en la democracia o demotrile (como prefiráis llamarla) se incrusta así sin más, y por el arte del birlibirloque, a la Monarquía sí o sí, logrando el objetivo primordial de toda la reforma política: Consolidar a la Corona de la única forma que al final se mostró factible, restableciendo la democracia. Es decir, en un monumental ejercicio de maquiavelismo político, la democracia sirvió de medio para el fin de la Corona, no siendo aquélla un fin en sí misma, sino el instrumento mediante el cual la Monarquía se impuso sin ni siquiera una consulta popular, equiparando al pueblo español con el propio Caudillo y su anterior régimen de donde dimanó el poder hereditario del monarca.
Para entendernos, el afán que tenía don Juan Carlos en restablecer la democracia no habría sido -según mis entendederas- el eje en torno al cual giró la Transición, sino sólo el de consolidar la Monarquía, aunque luego resultase que este objetivo únicamente se alcanzase si se aceptaba (como así hizo el monarca) a la democracia. Por otra parte, la Monarquía era la garantía de que tanto el orden socioeconómico y la paz social del franquismo sociológico, así como el aparato burocrático del Estado del régimen predecesor permanecerían incólumes bajo el disfraz de la figura conciliadora del primer Presidente de la demotrile, Suárez.
Con lo anterior se demuestra que con el Rey se salvan de la quema íntegramente, no sólo el orden y el establishment franquista, sino también la clase política del reformismo surgida del espíritu del 12 de febrero de 1974, cuando Arias Navarro hace un llamamiento a todos los procuradores en Cortes y jefes del Movimiento Nacional a nadar y guardar la ropa azul mahón y preparar el nuevo vestuario para la inminente Monarquía Parlamentaria en ciernes dada la decrepitud del Generalísimo.
Así mismo, nada del supuesto proceso democrático demuestra que existiera el tan cacareado “consenso”. No lo hubo. Ni siquiera habría tenido lugar una negociación seria sobre el tipo de democracia que pretendía abrirse paso tras casi cuarenta años de ausencia de libertad política. Si no, ¿cómo se explica el estratégico encarcelamiento de García-Trevijano ordenado por Fraga como ministro del Interior, tolerado por Suárez como ministro del Movimiento, así como por Felipe el líder del PSOE? Sin miedo a equivocarme, pienso que se quitaron de en medio al republicanista para poder apañar en las cortes franquistas sin obstáculos, una Ley de Reforma Política que dimanaba del interior del propio régimen, sin intervención alguna de la oposición auténticamente democrática que pudiera plantear una alternativa real de cambio en clave rupturista y no continuista, que es lo que sucedió con la pantomima reformista como todos sabemos.
En definitiva, mi tesis es que, el timo de la Transición supuso la sucesión del franquismo pero no su derrocamiento, ni la instauración de un verdadero régimen político democrático. Además, se valió del perjurio, la deslealtad, la mentira, el deshonor, la traición y la impudicia para justificar un cambio de régimen autoritario a otro autárquico de estructura similar. Como corolario a este artículo me gustaría perorarlo tomando prestado un pasaje del libro Pasiones de servidumbre de Antonio Garcia Trevijano, (Foca, Madrid, 2000): “Sabemos por la naturaleza propia de la institución que éste no es el caso de la Monarquía Parlamentaria, que nació en Inglaterra, como degeneración de la Monarquía Constitucional, para dar satisfacción a las ambiciones de corrupción de partido (walpole), y que nunca ha podido superar en país alguno su tara partidista de nacimiento y funcionamiento como arbitraje sobrenatural de las oligarquías políticas y financieras.”
En cualquier caso, dedicado a quienes corresponda o se den por aludidos por estar detrás del sumario 721/76, y como epílogo a la pieza teatral “la demotrile” que he tenido el placer de compartir con vosotros/as hago mía la cita de Shakespeare: “Pesad juramento contra juramento y pesareis la nada” (Sueño de una noche de Verano, acto III).
El timo de la Transición, la demotrile y el sumario 721/76,
Mas que timo de la Transición, yo lo entiendo como realidad del Sistema, que secante del Estado, habita y se amolda a los difrentes gobiernos y formas de gobierno. Por ello no se percibe cambio o transición, porque el Sistema continua.
Sí, así se explica en El Sistema. Mi experiencia del poder, Mario Conde, Séneca, Córdoba, 2009; pág. 355: «Cuando nos preguntábamos acerca del origen del poder del Sistema -sobre todo en lo referente a su «arquitectura intelectual»-, expuse que era problemática una investigación histórica precisa, pero que, muy probablemente, el nacimiento del modelo se sitúe en el Plan de Estabilización de 1959. Es decir, en plena dictadura. La característica básica del Sistema, en consecuencia, es que ha sabido transitar por la dictadura y la democracia, y, dentro de esta última, por los gobiernos de UCD y del PSOE. Por tanto, es un mecanismo que se encuentra al margen de los partidos políticos.»
Gracias por su aportación al debate.
Socrates;
Gracias a tí siempre por el contenido que cada día das al foro y a la causa común de la que todos formamos parte.
nada que añadir, gracias muy honesto y solo decir que a dia de hoy, la clase politica no es la solucion, ella es parte del problema, lamentablemente
Creo que hemos pasado de un extremo del error al otro, como parte del proceso de aprendizaje. La democracia es un ideal, y como tal, nunca rebasa la frontera de la utopía. Al fin y al cabo, la política debiera ser el esfuerzo de una sociedad por alcanzar su perfección.
Gracias Ramón. Leer tu artículo me ha traído a la memoria imágenes de otros sábados 🙂
http://www.youtube.com/watch?v=qmsw-3GJLzY&feature=related
Buen fin de semana.
Cuando alcanzas una utopía nace otra…
…Sintiendo el movimiento
http://www.youtube.com/watch?v=OHxnS-ZAGG8&feature=player_embedded
Saludos Armas
(Besos Sókratex)
«Sintiendo es más siendo que pensando». Ésa quizás pueda ser la premisa de ese cambio.
Un cordial saludo.
Vaya vista,…darse cuenta ahora de que la Transicion ha sido un timo. Algunos lo sabemos desde el día siguiente.
Acabas de inventar la rueda, Sócrates.
¡Felicidades!
Estimado Ramon :
Me alegro de encontrar alguien mas que opine que lo de la transicion fue un timo politico, pues llevo 30 y pico de años diciendolo y recibiendo cuando lo digo miradas como si fuera un bicho raro.
Tambien me he planteado el si podria haber sido de otro modo, quizas al estilo portugues, si bien no tengo definida una respuesta para tal cuestion.
Tenemos una asignatura pendiente, la democratizacion de la sociedad, pues las formulas oligarquicas subsisten en nuestra sociedad actual y amparadas por las leyes, vease en los colegios profesionales, las camaras de comercio o en los propios partidos politicos.
Quizas ha llegado el momento de romper con el timo de la «democracia organica»,nombre con que rebautizo Franco las teorias de Salvador de Mariaga (anarquia o jerarquia) sobre el gobierno de las elites. Comenzando por la organizacion de las comunidades municipales y eliminar de las leyes electorales formulas como la Ley de hondt o el uso de listas cerradas.
Veo la importancia de tu articulo como sano uso de la memoria historica reciente
Un saludo
Sí y aristotélicamente hablando, hemos evolucionado de la dictadura a la oligarquía pero, aún no se habría evolucionado de la oligarquía a la democracia. Y en esa tesitura transaccional nos encontramos hoy en día, y nada hace presagiar el cambio de modelo.
Claro que fue un timo, pero la política es el arte de lo posible y en ese momento fue la solución menos mala y, además, nos la estaban distandiodesde Bohn, París y Washington.
La pena real es que no se aprovecharan esos últimos años de felipismo en estado de estertor (de finales de los 80 a 1995) para rediseñarlo todo.
Urge una profundísima reforma constitucional
Quise decir «dictando», no «distandio». Lamento errata
¿El felipismo? El sevillano supo aprovecharse de las vacaciones a pensión completa del granadino en la Primavera del 76. Nunca 72 días en Carabanchel dieron para tanto y para tan poco.
Moraleja: Felipe González y Alfonso Guerra convirtieron a sus militantes y simpatizantes en funcionarios-empleados.
P. S.: Con la inestimable ayuda de Suárez, Fraga y Carrillo convirtieron las antiguas Cortes Españolas franquistas en un Congreso de los Diputados (metidos a empleados a sueldo de los partidos con representación parlamentaria) de la Timocracia.
Soy incapaz de pensar diferente a Trevijano. Su Discurso De La Republica es quizás el mejor ensayo de pensamiento político que se ha escrito en España durante la segunda mitad de este siglo -y no digo mas porque no he leído tanto-.
Pero Trevijano, mas que hablar de timo, habla de engaño. Profundo conocedor de la Revolucion Francesa, extrapola aquellos hechos a nuestra Transicion. Para Trevijano el motor de todo es el miedo al cambio del Poder. Cuando el Poder se enfrenta a la presión de las demandas de la masa, el proceso siempre es el mismo. Se crea la Asamblea Constituyente de lo Nuevo. Y en ella se consuma la traición. El Poder, a cambio de una porcion de si mismo, compra a los líderes de la masa. Y la Asamblea ofrece al pueblo el parto de la Cabra. El resultado es, claro, mas de lo mismo.
Reciban un cordial saludo,
Van
Sí Ramón. Pero miremos con realismo la escena, la de entonces y la de ahora. En el fondo, muy al fondo, estaba y está un pueblo, el mismo que hoy, con casi 5M de parados todavía no ha movido un pelo. Eso no pasaría en ningún otro país europeo. Todavía entonces eso podía tener explicación. Pero no debería tenerla hoy si se hubiera madurado. Se han encargado de evitarlo y hemos permitido que así sea. Un círculo vicioso que ha llegado el momento de romper por algún lado.
Ni entonces ni ahora el Pueblo estuvo ni está a la altura de las circunstancias históricas y del momento que le tocó y que nos toca vivir. En ese sentido, siempre me ha hecho mucha gracia los falsos halagos de la clase política para con el Pueblo, del tipo: «el maduro Pueblo español», «el Pueblo democráta de nuestro país»; cuando lo que realmente piensan para sus adentros y hablarán entre sí es que, «vaya Pueblo de subnormales tenemos al que poder tomarle el pelo».
Ya sabes (nos quedamos con el tuteo), 100% de acuerdo 🙂
Socrates, los políticos no piensan para sus adentros que vaya pueblo de subnormales que tenemos, porque ellos forman parte del pueblo.
Prefieren pensar que el pueblo es maduro y sabio, para alimentar su ego, y darle más sentido a su función social.
Y usted se cree que si hubiese habido ruptura ( cosa muy dificil tal y como estaba entonces la situación ) el Nuevo Orden , esa tan añorada III República se hubiese preocupado del pueblo ?.
A ver si se entera de que el pueblo solo sirve para que legitime sin saber ni lo que vota a una clase política. Y no me creo que la clase política resultante fuese mejor que la de ahora. Es más , me apuesto lo que quiera a que la mayoría de la gente que está ahora, estaría con el régimen resultante de la ruptura.
A mi me suena a cuento chino toda esta historia de devolver al pueblo la capacidad de decidir. A los políticos , A NINGUNO le importa un bledo el pueblo.
Y respecto a García trevijano, una cosa es escribir tratados y otra muy distinta gobernar. Tampoco me fío de los teóricos porque el papel lo aguanta todo.
No se obsesione con el tema de la 3ª República ni con las conspiraciones judeomasónicas, no, no estamos tratando esas dos leyendas urbanas surgidas del Palacio del Pardo y del de La Zarzuela-La Moncloa, no. Hoy estamos tratando otro tema, aquel que explica (o intenta aclarar) cómo los políticos de la Transición arrebataron la Soberanía al Pueblo. Por eso Vd. me suelta ese exabrupto de: «A ver si se entera de que el pueblo solo sirve para que legitime sin saber ni lo que vota a una clase política.» y esa otra imprecación que deja al trasluz sus querencias no democráticas (tal y como Yo concibo a la demos): «A mi me suena a cuento chino toda esta historia de devolver al pueblo la capacidad de decidir.«.
Quédese con esta copla, y si quiere después hablamos en serio del particular que nos atañe a todos: El Pueblo no elige a sus gobernantes porque en España existen listas cerradas, y no somos los ciudadanos, sino los políticos quienes eligen a los representantes del Pueblo.
Con todo, gracias por su aportación al debate.
Moraleja: La Soberanía popular no existe en nuestra demotrile aunque ZP, Aznar o Rajoy (son igual de hijos-nietos del régimen anterior) digan que sí pensando para sus adentros que no.
P. S.: La diferencia entre Vd. y Yo -corríjame si me equivoco- con respecto a lo anterior es que, Yo sí creo en ella, y Vd. parece que no mucho o nada o «un bledo«.
Me va a disculpar pero no sé lo que es una demotrile.
Pero déjeme decirle que ni usted ni nadie me puede dar clases de democracia. Esa manía de dar los carnets de demócratas me dá repelús.
y sí , me suena a cuento chino lo de decir que se quiere devolver al pueblo la capacidad de decidir porque no me lo creo. A no ser que el pueblo decida lo que quieren los que lo dicen.
Yo si creo en el pueblo porque me considero parte del pueblo. Pero ya me pilla muy mayor para dejarme engañar.
Y si mi tono es para usted un exabrupto es porque me molesta el tono de » superioridad» que se desprende de sus filípicas.
Dicho sea sin acritud.
Con sumo gusto le explico qué es una demotrile o una timocracia (son sinónimos): Significa que desde el 22 de noviembre de 1975 cuando S. M. el Rey Don Juan Carlos I juró como Soberano español en el Palacio de las Cortes Españolas franquistas (actual Congreso de los Diputados) pasamos de un régimen autoritario a un régimen de libertades (que no, a un régimen democrático). Parecen lo mismo pero son conceptos diferentes.
Gracias por sus aportaciones al debate, y se agradece su prisma con el plus ultra de la veteranía.
Moraleja: La bolita del timojuego del trile que utilizan como medio de subsistencia los trileros (los puede ver en cualquier paseo marítimo del Reino de España) es el «régimen democrático».
P. S.: La bolita nunca aparece, salvo cuando la casta política utiliza al gancho cuatrianual de las urnas, para que los panolis de turno (o sea, los que vamos en comandita a seguir haciendo el ridículo al colegio electoral) piquen el anzuelo creyendo que pueden ganar algo jugando, digo votando a la lista cerrada de turno.
Lo más grave es que se hurtó a la sociedad la posibilidad de elegir o debatir al menos, entre otras cosas la forma de gobierno. Todo fue un paripé en el que unos cuantos privilegiados se repartieron la tarta.
No estoy de acuerdo, Rafa, en que se le hurtara. A una sociedad inculta no hace falta hurtarle, tiene las puertas abiertas para que entren y se lleven lo que elijan. Se ocuparon de preparar el cambio, o la sucesión como Ramón lo llama, pero no de preparar a la sociedad, evidentemente. Pero lo mismo viene sucediendo desde entonces.
Exacto. Ahí está la clave. 1º Se debería haber constituido un gobierno provisional 2º se tendría que haber consultado popularmente y a través de referéndum la forma de gobierno (Monarquía o República) y 3º haber elegido democráticamente la modalidad de régimen democrático (
Parlamentario-como el que padecemos- o Presidencialista como en EEUU o Francia).P. S.: Este es a grandes rasgos el planteamiento de García-Trevijano , que suscribo de pe a pa.
Más motivo aún para denominarlo hurto…si las puertas hubiesen estado cerradas, hubiese sido robo.
Un saludo.
No, me refería a que se hizo dejación, se cedió, fue un regalo. Y además le dieron legitimación. Y de ahí partimos. Hasta hoy.
Teniendo en cuenta la clase de sociedad que somos desde las revoluciones liberales, no es de extrañar que nos timen, nos estafen, nos engañen y nos manejen, pues somos una sociedad moldeable y manipulable para cualquier circunstancia politica, somos un autentico rebaño que ha olvidado su pasado y el peso que España ha tenido en la historia.
Hoy, los habitantes de ésta Nación son inversamente proporcionales en dignidad y honor a lo que representa España en la historia y seguramente si nos trasladáran a Zambia o a Senegal encontrariamos el pais apropiado, somos un pueblo moldeable para cualquier politico, el miedo y la cobardia han hecho de nosotros, los peores habitantes que tenido este territorio a lo largo de su historia.
El gran problema del español es que no quiere enfrentarse al conflicto, y es enfrentándose a los conflictos como obtienes un resultado final pero nunca sabrás que ocurrirá si lo único que tratas es de evitarlo, que es lo que se viene haciendo aqui desde los últimos años, la propia transición es el paradigma de esa cobardia, no se quiso hacer frente al conflicto y con ello a una verdadera revolución que hubiera dejado muy claras las pautas a seguir, lo que se hizo fue pactar, negociar y comprar a los lideres de la oposición para que todo siguiera igual, con ese complejo de enfrentarnos a nuestros problemas como única via para resolverlos.
Pero, no hay mal que cien años dure y los conflictos no resueltos, vuelven a aparecer, creo que este es uno de los momentos donde se deben dejar atrás miedos y complejos y regenerar toda esta olla podrída que nos dejaron y que tarde o temprano acabará por estallar. Son las cosas de la fisica, la quimica y las leyes naturales, los ciclos historicos que hacen que un pueblo dejé de ser un imbécil colectivo y despierte. Saludos.
«Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie.
¿Y ahora qué sucederá? ¡Bah! Tratativas pespunteadas de tiroteos inocuos, y, después, todo será igual pese a que todo habrá cambiado. …Una de esas batallas que se libran para que todo siga como está«. El gatopardo, Giuseppe Tomasi di Lampedusa.
Moraleja: La Transición española es un modelo arquetípico de lampedusianismo político.
P. S.: En La Zarzuela y en La Moncloa se llevan entrenando 35 años en gatopardismo.
superviviente, totalmente de acuerdo.
Socrates, inevitable la cita con cara de Burt Lancaster 🙂
O como dijo Heráclito «Todo cambia menos el propio cambio». Saludos.
Socrates,
Perdoname acentos y demas pero escribo desde ordenata yankee. Aunque no comente, te leo siempre y disfruto con tus articulos, y este es uno de ellos.
Yo naci en 1978, por tanto no tenia capacidad de juicio sobre la transicion en aquel momento. Sin embargo con el tiempo me he dado cuenta que es de agradecer a los senores que fueron protagonistas de aquel episodio de nuestra historia, que modelaran un cambio de regimen (De una Dictadura a una Democracia) sin convertir Espana en un reguero de sangre.
Tambien creo que la capacidad de consenso y negociacion entre ellos fue notable. la prueba esta en el sistema de libertades y bienestar que pudieron crear y que hemos disfrutado desde el 75 comparable al de otros paises europeos con un numero de poblacion parecido como Inglaterra o Italia.
Ahora bien, las crisis economicas como la que padecemos hacen tambalear los cimientos de toda sociedad y es entonces donde nos preguntamos si algo se ha hecho mal antes o durante, o si se podrian haber hecho las cosas de otra manera para evitar el estado de cosas al que se enfrenta Espana en estos momentos.
Es bueno revisar y criticar la historia especialmente si es para sacar frutos positivos de los errores aunque creo que hay que estar cuidadosos con la critica, pues a toro pasado es facil hacer todo tipo de analisis.
En mi opinion, la transicion seria un timo para todo aquel que creyese que iba a suponer un cambio radical y dramatico con la dictadura donde se estableceria un sistema democratico de libertades donde el soberano seria el pueblo, como por ejemplo es el caso de EEUU. Entiendo que los espanoles que pensaran de este modo en aquel 1975 quedarian frustrados tiempo despues. Pero la verdad es que desconozco si esta fue la manera en que se vendio la transicion al pueblo espanol.
Sin embargo, tengo la impresion que el pueblo espanol siempre ha estado al menos en la historia moderna en la retaguardia, dispuesto a que otros decidieran por el, y a dejarse gobernar por un estado que actua casi como un padre protector, como un Big brother, da igual si es una monarquia parlamentaria o una dictadura.
Por hacer un simil con el desarrollo humano: Es como si con la dictadura teniamos un padre mandon y autoritario,y ahora en la monarquia parlamentaria, un padre protector e intevencionista, que nos deja opinar de vez en cuando. Como sera el tercer padre? Supongo que depende de la madurez del chico y chica espanola.
Parece ser, que los espanoles siempre han necesitado que alguien les mande. Me parece que la Transicion fue un proceso de adaptacion para que el poder se ejerciera desde el mismo angulo (desde arriba) pero con distintas formas(partitocraticas).
Son los autores de la transicion responsables del deficit democratico del sistema que tanto se critica en este foro? Yo creo que no. Son mas bien los colaboradores de un sistema que los espanoles han dejado que se elija.
Si el sistema no cae es por que la base(el pueblo) lo aguanta. En el momento en que la base diga basta ya, las cosas podran cambiar. El problema, el miedo, es que todas estas cosas vienen acompanadas de abundante sangre. Creo que la historia contiene multiples ejemplos….
Un saludo cordial Socrates.
(Perdonen que quiza me he extendido demasiado. Decir que he disfrutado de poder leer este como otros articulos que muchos escribis en este foro, por supuesto incluido el promotor de este foro D. Mario, y la verdad que es una gozada poder opinar y aprender de vuestros comentarios). Un saludo a todos de Texas (USA)
Es un placer oír sus palabras que para mí son un halago que agradezco sinceramente, máxime cuando provienen de un español que ahora vive en la patria de mi admirado Thomas Jefferson.
Disfrute Vd. que puede del sistema garantista/cautelar (donde sí funciona perfectamente la división de poderes) estadounidense que impide el abuso del poder, verbigracia: Nixon. Ahora, no haga caso si sale algún/a compañero/a con lo de George W. Bush.
No sé si Vd. puede votar allí, pero, si es así, su voto no cae en saco roto gracias al artífice del sistema electoral de los USA, John Stuart Mill. Allí un senador o un congresista da respuestas concretas a su comunidad de origen que fiscaliza su labor política, no como aquí que hacemos una intolerable y anti-democrática delegación de responsabilidades en ese sentido. Así nos va el pelo que dentro de cuatro días nos va a ver aparecer por su residencia a pedir si podemos cortarle el césped o pintarle el marco de las puertas y las ventanas.
Moraleja: Vd. vive y se gana la vida en el país sin duda, más demócrata del orbe. Pone muy bien los puntos sobre las íes que es más importante que poder acentuar si no tuviera un teclado sureño.
P. S.: ¿Por qué no nos regala alguna semblanza en forma de artículo de cómo ve Vd. la democracia en los USA, como ya hizo el gran Alexis de Tocqueville en su magnífica obra-diario de viaje, La democracia en América? Sería para mí un placer poder comentarlo con Vd. y con los/as compañeros/as de acá, de Españolandia. Permítame un consejo: No se le ocurra volver sobre los pasos que le condujeron a la tierra de las oportunidades y de la auténtica libertad que aún confía en Dios.
Muchas gracias Socrates. Por favor, no me trates de UD, Eduardo esta bien.
Estudie el libro de Alexis de Tocqueville «la Democracia en America» en clase de Antropologia Social cuando estaba en Pamplona y me gusto mucho. Creo que me influyo en mi decision de venir a estudiar y trabajar en EEUU.
Sobre el «PS», disfruto y aprendo un monton de los comentarios de la gente en este foro. Creo que es buena idea y si escribir algo acerca de mis impresiones sobre EEUU y sus sistema politico pueden crear debates e intercambios de opiniones interesantes en el foro me pondre manos a la obra.
Un cordial saludo,
Eduardo
No, gracias a ti por tu sinceridad expositiva. Lo de tu perspectiva acerca de la sociedad estadounidense me interesa por conocer por dónde va la corriente de pensamiento y las tendencias a todos los niveles allá en tu nación de adopción. No hay que olvidar que, la Administración Republicana de Gerald Ford (con Nelson Rockefeller de Vicepresidente y destacado miembro del Club Bilderberg), a través del Secretario de Estado, Henry Kissinger (también, Bilderberg), y el entonces Embajador de los EEUU en España, Wells Stabler tuvieron un papel primordial en la hoja de ruta de la Transición española de la Dictablanda a la demotrile.
Moraleja: Nuestro Foro se parece ya al famoso Brain Trust de Roosevelt.
P. S.: Me gusta la corriente de aire fresco que viene de tierras tejanas (ex españolas) y que se cuela en nuestra plataforma a través de compañeros como tú 🙂
Eduardo, gracias por su exposición y serenas reflexiones. Da gusto que una persona tan joven se haya detenido a profundizar de un modo tan positivo. Se nota que está Ud en un país en el que el análisis y la falta de prejuicios son normas de conducta.
Saludos desde los madriles.
No hay de que. Me gusta mucho este foro porque se lo acalorados que somos los espanoles especialmente cuando tratamos ciertos temas, y aqui veo un espacio de libertad intelectual estupendo. Y donde hay libertad entiendo que tiene que haber mesura y cierta serenidad. Crei que D. Mario era un buen ejemplo de ello y por eso decidi engancharme en el foro. Y, la verdad que todos ustedes lo hacen cada mas bonito e interesante con sus aportaciones.
Un saludo cordial,
Eduardo
Interesante artículo Socrates que nos pone los pelos de punta ya que nos hace conscientes no sólo de la verdadera manipulación de la política sino de la responsabilidad de todos nosotros en aceptarla.
Uno delega en los demás por varias razones, por confianza excesiva en aquellos que deposita su confianza, lo cual no deja de ser falta de sensatez o por absoluta dejadez o ganas en implicarse en las obligaciones o proyectos comunes.
De ambas acciones se derivan malas consecuencias que se manifiestan a la larga una y otra vez si el asunto no se ha resuelto en el origen.
Por tanto yo creo Ramón que lo que nos vienes a decir con el artículo es que abordemos de una vez y por todas el gran asunto pendiente de la sociedad civil de involucrarse plenamente en la política de nuestro país.
Pasemos a la acción porque motivos no nos faltan…
Mi visión: no creo que la Transición fuese un timo en lo que atañe a Suárez. Desde luego sí lo fue en cuanto a la Corona (de ahí mi metáfora ya explicitada en algún otro comentario sobre el rey/Kruschev rebelándose «a moro muerto» contra su moldeador y entronizador Franco/Stalin primero en su excelente sintonía con Felipe y más tarde con ZP, en contraste con su acritud contra Aznar por sus resabios neofranquistas) y, en buena medida, todos los agujeros negros del postfranquismo, desde el 23F al 11M (pasando por el extraño episodio de la muerte de Ynestrillas padre por ETA en el 86 -¿ETA en plan Bond «al Servicio Secreto de SM» si nos atenemos a cuáles eran los planes regicidas del militar unos meses antes?-), acaban volviendo a ese timo inicial.
En Suárez, como en Joao Goulart (el presidente brasileño cuya carrera se inicia en la dictadura populista de Getulio Vargas y que acabará desarrollando una política avanzada de centro con apertura hacia los comunistas -momento en que los militares lo arrojarían del poder-), se funden una serie de características mamadas del franquismo (o mejor, del franco/falangismo) vinculadas a las ideas de neutralismo, democracia social con un importante rol del Estado como árbitro, política como voluntad de servicio, que engarzan con propuestas del disidente Dionisio Ridruejo (que no en vano se situó para su tarea de oposición a Franco en el terreno que más cercano le resultaba, la socialdemocracia, no el comunismo ni el liberalismo) y también con la influencia que tuvo la tiernista Carmen Díez de Rivera (que, en parte, explica la presencia años después en el CDS de gentes procedentes del PSP como la citada «maestra de democracia» de Suárez o como Raúl Morodo).
Sin olvidar, desde luego, el impulso «gaullista de izquierda» que enlaza estas pulsiones franco/falangistas con la socialdemocracia y que nos recuerda algo generalmente poco valorado en torno al paso del franquismo autárquico a la tecnocracia «demócrata orgánica», el balón de oxígeno que supone para Franco el golpe de estado que a fines de los 50 devuelve a De Gaulle al poder y que, a partir de ese momento, dará al Caudillo la tranquilidad de que, aparte de la excepción portuguesa, hay otro régimen en Europa que se sale de las pautas más estrictamente democrático/formales y, con esa tranquilidad, la seguridad de ánimo para esbozar una cierta apertura y, siempre con los ojos puestos en el vecino del norte, emprender la senda del desarrollismo económico. En este paralelismo, cabe señalar que el delfinato que, con respecto a De Gaulle, supone Georges Pompidou , aquí lleva a Franco a elevar a Carrero Blanco a un rango hasta entonces inédito en el régimen. Precisamente, ese paralelismo entre franquismo y gaullismo hace muy plausible la intervención norteamericana en el atentado contra Carrero (completamente a la contra de otras intervenciones usacas por esa época, por ejemplo, en Chile o Bolivia -obviamente, no se trataba de «profundizar en la democracia» sino en evitar un alejamiento de España de la órbita norteamericana como había ocurrido con Francia a medida que De Gaulle radicalizaba su soberanismo en asuntos exteriores desestabilizando el bloque atlantista: ha de recordarse que en ámbitos azules con un cierto perfil crítico, como los Círculos José Antonio, la editorial ZYX, o incluso sectores militares antitecnocráticos y con cierto prurito de «revolución pendiente», no ya las posturas neutralistas francesas sino también la figura de Tito o la del peruano Velasco Alvarado se tomaba como referente en plan «tercera vía»-). A la muerte de Carrero, con el rápido parche que supone el espíritu asociacionista del 12F, hay una última pauta gaullista con el diseño de la megaasociación Unión del Pueblo Español (muy inspirada en los rassemblements gaullistas) por el reformista Herrero Tejedor, quien, muerto en junio del 75, no podrá desarrollar plenamente su proyecto, que se cristalizaría en una entidad bicéfala a cargo de los muy distintos Adolfo Suárez y Cruz Martínez Esteruelas. Al legalizarse los partidos y pasar Suárez a ser el aglutinante de UCD junto con Joaquín Garrigues, Iñigo Cavero y Miguel Angel Fernández Ordóñez, UDPE, ya reducida a su ala derecha, se integrará como uno de los partidos fundacionales de AP.
A mí Trevijano nunca me ha inspirado mucha confianza. Su relación con el dictador guineano Francisco Macías siempre me ha parecido bastante oscura y discutible, tampoco sus gestiones pro Junta Democrática con elementos tan sinuosos como el opusino Calvo Serer y (sic de Sócrates) «el genocida de Paracuellos del Jarama» me entusiasman. Su fugaz reentreé en los 90 dentro del contubernio con Pedro Jota y Ansón para echar a Felipe y aupar a Aznar a la vez que reivindicaba una República ultracentralista martillo de terroristas (que lo convirtió en ídolo de jóvenes ultras tanto azules como villapalistas e incluso inspiró la moda facha «republicana» entre neofascistas snobs con siglas como el PNR o el MSR -doy testimonio de primera mano, pues asistí a la presentación en el Paraninfo de su libro EL DISCURSO DE LA REPUBLICA con gran alborozo de cachorros «nacionales» y, en los cursillos de verano de El Escorial, justo cuando le dieron el doctorado a Jünger, cené junto a mi conmilitón en EL CORAZON DEL BOSQUE Carlos Aguirre con Trevijano, que daba un cursillo sobre la República y al que nos presentaron conocidos comunes; y, en cuanto a la parafilia trevijanófila de los cachorros «nacionales», como tuve ocasión de tratarlos y de acabar tarifando con ellos durante mi etapa corazonesca por mi escaso entusiasmo centralista y mis contactos con abertzales, pues también sé de lo que hablo-).
¡Ding!, discrepo hasta el fondo.
Si fué un timo en lo que se refiere a Suarez, y no porque fuera mal tipo, sino porque venía de donde venía. Un camisa azul en toda regla. Que saliera mas o menos bien, es otro asunto, era el menos «malo» de la terna.
También había otros, sabe…Tierno Galván, por ejemplo.
Hay una profunda manía de entender como «bueno» la elección entre cosas intrínsecamente defectuosas.
Se trataba de tener un coche nuevo, no de parchear el existente con, y eso si que se lo puedo conceder porque tengo buen día, un buen parcheador.
Pero se las arreglaron para meternos como «bueno», una matraca del tres al cuarto como fue la «transición».
Y oiga, que yo ya tenía edad…yo quería un coche nuevo. Totalmente nuevo.
Al cabo de los años vamos cayendo del guindo, ¿eh?.
Tarde, mal y arrastro. Endémico en España.
Me parece que los años cero y los «coches nuevos» (como no hay nada nuevo, al final es modelo retro, tirando a Cromagnon), salvo Pol Pot y su homólogo peruano Abimael Guzmán, nunca existen en la praxis.
Por esa regla de tres, todo es un timo y es interesante y sintomático que no se juzgue por el mismo rasero maximalista la Transición que la aberrante época actual, bastante peor, donde un Garzón o el tema 11M son materia matizable y/o silenciable y lo que ayer fue timo sin remisión hoy sea más complejo de debatir. ¿Tal vez por la comodidad de bajar el pulgar contra el moro muerto o con Alzheimer y no contra poderes fácticos hoy bastante activos, tanto en el asunto Garzón como en el mucho más grave y fáctico 11M?
Ésto también es endémico. En España y en más sitios.
Mire, es mas sencillo que todo eso, mucho mas sencillo, se dice «nuevo». O sea, nada que ver con lo de antes.
La Transicion esa de la que habla es la que ha propiciado la aberración a la que se refiere ahora, Garzon y 11M aparte, que en Londres tambien se cargaron a la intemerata en el metro.
Que una bomba la pone cualquier loco, y en todo caso…¿que insinúa con lo del 11M?
Porque puestos a hacer conspiranoia, expliqueme por que el 23F por la noche nos sale el rey a las tantas a hablarnos vestido de militar…a !NOSOTROS!. ¿A nosotros vestido de militar?, ¿No le dio tiempo a ponerse un traje o es que las cosas no salieron como esperaba?.
Mire, fue una matraca, una matraca realizada por individuos asustados por un lado, y otros muy listos en la sombra por otro, sobre una población anestesiada y atrasada.
Y ahora hay lo que hay.
Le recuerdo que considero agujeros negros y llenos de interrogantes tanto al 23F como al 11M y hay errores de la Transición mayormente relacionados con el tema de la administración territorial que en varias ocasiones ya he señalado en este foro (por ejemplo, en el último párrafo de este comentario ).
Y sigo sin saber en qué «proceso correcto de ruptura» está pensando cuando reduce la Transición a casi papel higiénico: porque, más allá de abstracciones, no sé a qué novedad se refiere, ¿alguna pauta, algún referente previo, o es novedad tan nueva que no existió otra antes en el universo mundo?
Yo, que viví ese período desde la contracultura y el underground (algo tipificado hasta ese momento dentro de la Ley de Peligrosidad Social, Vagos y Maleantes, sin el cobertor político de quienes andaban encuadrados en partidos de izquierda ya con la estrategia de integrarse a mayor o menor brevedad en el PSOE -ahí el PTE/JGR, la ORT, la LCR, el otro PTE carrillista…-, todo lo más alguna que otra vinculación a la CNT), lo sigo considerando el más libre, vivo y dinámicamente democrático de la historia de España, contrafigura de la aberración anticrística actual, y sin el cinismo y la corrupción y la cobardía que se inició en este país el 23F con la salida de Suárez y el primer acojone general, cuando comenzaron los silencios cómplices, el nihilismo de usar del espacio político para el medro personal, la corrupción como «potabilizador» de la sociedad (perla felipista para justificar las chorizadas de las últimas legislaturas), el terrorismo de estado o los apaños negociadores sin demasiados escrúpulos.
Hoy sólo veo dos sectores particularmente interesados en denigrar y minimizar la Transición, los elementos que consideran todavía pasable a ZP en relación con otras hipótesis barajables en el ámbito democrático formal, y los que parecen levitar en torno a la galaxia hayekiana comandada por Jiménez Losantos y su peña (paradoja de paradojas: no acabo de digerir que se consideren «ambrosía» los revisionismos y vindicaciones neofranquistas de un Pío Moa y se tire por tierra la Transición por su falta de ruptura completa con el ancien regime, siguiendo las tesis trevijanistas -aunque esa paradoja, ahora que lo pienso, ya me la topé en los mediados 90, cuando a Trevijano, con sus notariales desautorizaciones de la legitimidad democrática de la Transición y sus ostentóreas y jacobinas exigencias de una III República martillo de separatistas, sólo lo jaleaban en el Paraninfo y en el hotel Felipe II de El Escorial elementos tan visceralmente hostiles al franquismo y devotos de la idea republicana como los chicos de Villapalos con un pie ya para pillar cacho en el organigrama aznarita, los de FE/JONS y de Ynestrillas o los ex/cedadianos de Democracia Nacional , pero no se veía ni un solo nostálgico de la I y/o II Repúblicas, ni un solo comunista, ni un solo socialista, ni siquiera alguien con un pin o camiseta con el careto de Ortega, Marañón o Pérez de Ayala-).
Estimado Sr El Zurdo,
Yo también cené en aquellos primeros noventa con Trevijano. Ignoro si conspiraba en aquel entonces ni si había conspirado antes. Si recuerdo, por ejemplo, las explicaciones que nos dio sobre el caso Macias. Pero lo importante no era su acción política, desde mi punto de vista. Lo importante es el modelo de Democracia que describe y propone. Para elloempieza respondiendo a la gran pregunta: ¿Dónde reside la soberanía?
Reciba un cordial saludo,
Van
PD Normal que no Viera Ud esas camisetas. Trevijano, demostrando además buen gusto, es de Santayana. :))
Pues en la época en que usted estaba en esas instancias, yo me movía, y me sigo moviendo en los terrenos peligrosos de los movimientos republicanos y descentralizadores del estado, cuando menos a nivel teórico. Entonces ya se sabe que era la moda. Ambos hemos estado en dos tipos distintos de Undergrund. Yo sigo ahí, intelectualmente al menos. Me gusta el Underground y el hacktivismo, y esas cosas.
El «proceso correcto de ruptura», al que se refiere, hubiera consistido en una depuracion total de la judicatura franquista y del ejército (Recuerde la UMD), cerrar las heridas de la guerra civil de una puñetera vez por todas echándole los cojones necesarios tras 40 años, y poner la redaccion de la constitucion en personas distintas a las que se encomendo el tema, y pienso en Manuel Fraga y Cisneros entre otros, aunque J.Sole Tura me parecía válido, asi de sopeton, y si me apura hasta Herrero de Miñón.
La «Transicion» española no ha transformado a nuestro pais en un pais moderno. Porque si; habia una constitución nueva, y leyes nuevas, pero el «modus operandi» era y es el mismo que en la dictadura. El mismo modo de resolver problemas para situaciones nuevas. Y no valía, ni vale, ni valdrá. Alguien puede pensar que si, que si que vale y tal, pero esta equivocado. Ya ve como el resto de los paises estan resolviendo los problemas y aqui, tanto unos como otros no tienen ni puñetera idea de como reflotar esto sensatamente, solo dan bandazos, improvisxan constantemente y han dejado a españa en situación de «Rehen de Europa» y además, no tienen ni pajolera idea de por donde les vienen y les van a venir las bofetadas. Eso no es de recibo. Así que, querido amigo, no compro la moto. Lo siento mucho.
No estoy de acuerdo. Si el canto de la sirena es bonito pero escuchándolo, te estrellas contra las rocas, pues, por muy objetivamente bonito que sea, como que hay que andarse con cuidadín.
Hay aspectos, más que de Trevijano, de Pero Grullo (no ha inventado la pólvora precisamente) sobre el diseño de una república funcional y con separación de poderes que puedo asumir sin el menor problema (no así, insisto, su centralismo, que considero tan nefasto en su uniformidad como su hijo espúreo, el no menos uniformista Estado de las Autonomías, que igualó diversidades creando nacionalidades inexistentes automáticamente abocadas a cortijos corruptos y forzó a las nacionalidades históricas a ir a más para distanciarse de esas autonomías parvenu -ya he dicho en otras ocasiones que mi modelo son las Españas de los Austrias, cuya última encarnación en cuanto a diseño de administración territorial sería el modelo que planteaba el Partido Carlista y que hoy sigo considerando el más cabal como punto de partida para una España entendida como tarea común y no como mayorazgo-) pero que, cuando me los cuenta Trevijano, me los creo menos en su boca, precisamente por la trayectoria de este señor, por su acción política, por esa clamorosa mayoría de un determinado sesgo que lo aclamaba y que chocaba con la no menos clamorosa ausencia de otras gentes más visceralmente afines a la querencia republicana (salvo que quienes leyesen y valorasen a Trevijano pensasen más en términos adjetivos y fraccionalistas de la palabra «republicano» -Partido Republicano de USA, o, dada la elevada concentración de fans de Le Pen y de Fini en sus adeptos de los 90, los Republikaner alemanes-)
Recordando a nuestro anfitrión, las palabras de Trevijano (que, insisto, son más de Pero Grullo) no tienen forzosamente que ser la cosa Trevijano. Y, como hay otra gente (y no poca, repito, por esa circunstancia perogrullesca) completamente distinta a este señor que ha podido decir palabras parecidas, prefiero acudir a esa gente, donde, lo mismo, las palabras y la cosa van más de la mano.
Manuel, Suárez tuvo, que desde dentro comenzar ha hacer el cambio. Su proyecto de «transición» lo contemplaba ya desde la universidad en Salamanca, sin tener claro en aquellos días de juventud, si seria una república o una monarquía. Puedes considerarle un camisa azul si es a la conclusión a la que llegas, pero como te tengo como una persona muy capaz, te diría que las cosas eran más complicadas y los márgenes de actuación muy limitadas por el conjunto de factores humanos y emociones de aquellos días, incluido el extranjero. Franco lo llamaba a Suárez «el audaz» y esto era por algo. Suárez no fue un timo y es mucho mas que un buen tipo. Su proyecto no finalizaba en el 81 aunque si sabía que no seria mas el protagonista. Si su espíritu, honestidad y generosidad política la hubiese seguido Felipe Gonzalez y demás, que fueron los que comenzaron a controlar todos los rincones del Estado, quizá muchos de los que pensáis que fue un timo y metéis a todos en el mismo saco no pensaríais lo mismo. El no fue un timo, por que lo conozco bien, jamas hubo intención de tal cosa, si entendemos como timo, el engaño en beneficio propio a través de la persuasión. El se dejo la vida, el alma y mas cosas en ello y cometió el error de creer que los que vendrían después de el compartirían mismos valores y sentido de la responsabilidad.
Zero, en primer lugar gracias por tus palabras hacia mi persona.
Sin embargo, debo insistir en lo mismo. NO es eso. Había más margen, pero había miedo.
Y con miedo no se va a ninguna parte.
En ningun momento trato de insinuar que Suarez fuera mala persona y todo eso. Seguramente como tu dices, hizo todo lo que pudo y hasta algo más.
Pero lo siento, no me vale, había otras alternativas, había otro rollo, se hablaba entonces de «Reforma y ruptura»…¿recuerdas?, pues yo quería ruptura, y para ruptura, Suarez no daba el perfil. Puede que si lo diera para la reforma, que a la fin y a la postre fue lo que paso, y cuyas consecuencias estamos ahora viviendo.
Es importante separar el grano de la paja. Entiendo que se haga una defensa de la gestión de Suarez en el contexto en el que las cosas estaban, e insisto en que hizo todo lo que estaba en su mano. Yo no le guardo ningun tipo de animadversión es más, lamento mucho lo que le ha pasado. Fue un tipo al que le encargaron un marrón enorme y lo solventó bastante bien.
Pero ya te digo, había otras alternativas que no pasaban por el. Y esas eran la que sostenían Trevijano y otros.
Lo que pasa es que hubo una enorme campaña subliminal mediática a favor de la reforma…no fuera a llegar otro 36….mas miedo
Y siempre estamos con la misma monserga, de que viene el lobo.
Pues lo siento, pero yo no le tengo miedo al lobo ni va a venir ningun lobo, y nuestra sociedad esta ya bastante crecidita para creer en cuentos de hadas.
Lo único que necesita es que la dejen en paz para que pueda pensar por su cuenta en lugar de estar intoxicándola continuamente con bobadas del abuelito.
La transición, para mi, fue un bodrio. La constitucion española, otro bodrio que ademas, hoy dia, nos viene estrecho.
Tiene que haber gente en alguna parte que se de cuanta de que hay que tirar eso a la basura y encargar un traje nuevo.
Una constitucion NUEVA, que ponga a los politicos, a los banqueros, a la gente,… en su sitio, a Internet en primer plano,…que estamos en el sigloXXI, amigo, y que no podemos andar con los instrumentos del pasado. Que todo ha corrido mucho…
¿Entiende por donde voy?
Estimado Manuel, gracias por tu comentario. Mario hace unas semanas hablaba sobre que la única posibilidad de saber el por que de las cosas se necesitaría un laboratorio en el cual parar el espacio-tiempo. Me dices que había otras opciones y seguro que es así. Entiendo que quisieras «ruptura» y que ese deseo quizá no lo vieses reflejado con las personas elegidas. No conozco personalmente al Sr. García Trevijano, como para opinar sobre su capacidad. La sociedad de hoy no es la de entonces. Los lobos de hoy no son los de ayer. El manejo del miedo tu sabes que esta en función de la preparación que tengas para resolver una situación complicada. De la valentía a la temeridad, cuando arriesgas la vida de los demás, debe ser complicado. Todas las naciones interactuan bajo el patrón del miedo, como bien sabe Corea del Sur. Comparto contigo la necesidad inmediata de una nueva constitución y de una regulación amplia de todo lo que es «la cosa pública», como también comparto contigo, muchas más cosas. Saludos amigo.
Desde luego que no lo tuvo fácil, además creo que no tenía manuales que seguir.
Y mejor, o peor según dicen algunos, hizo una transición que al pueblo le resultó cómoda. Y alguna decisión bien difícil tomó….
Lo que plantea Manuelymar (te respondo a ti porque ya es un lío a quién estoy respondiendo -la anterior, sobre Trevijano, era para el avatar medusesco-) sólo habría sido posible con una guerra civil o una acción de parte del Ejército «a la portuguesa». Sin violencia sólo podía hacerse lo que se hizo en líneas generales (obviando temas puntuales que podrían haberse mejorado, sobre todo en cuanto al diseño constitucional). Si se asume una cuota importante de violencia, vale, perfecto, acepto el reproche, pero esto no es el país de la Piruleta, sin violencia ni siquiera el tan cacareado modelo glasnost de Gorbie ha podido salir adelante (aparte del agujero negro del ¿golpe? denunciado por el beodo Yeltsin en el 91 que aúpa a éste y da la patada al bastante más fiable Gorbachov, ahí los 1500 muertos que supuso el asalto a la Duma del demócrata-que-te-cagas Yeltsin en otoño ’93). O Transición o Revolución/Ruptura (incluida -como decía Forges- la ruptura de cráneos, al menos algunos). Pero una de Disney no, por favor.
Sólo una UMD equivalente en número a los militares lusos rebolicaos contra la decadente dictadura y en alianza con la oposición civil habría dado pie a eso que reprocha nuestro compañero de foro a la Transición. Coherencia, por favor.
Y, puestos a hablar de motos, descargar la responsabilidad de los despropósitos actuales en la Transición, eso sí que me parece una moto averiada a la venta. Es a partir de Felipe, de la progresiva mentalidad de soborno/desmovilización para desactivar posibles incomodidades de los poderes fácticos como se llega a que ZP pueda, desde la ineptitud, la cobardía y la falta completa de carisma, ejercer un poder presidencialista casi imperial («las locuras del emperador») inconcebible en anteriores presidencias de gobierno. ¿Qué tiene que ver esto con la Transición? Aquí se ha roto con los poderes fácticos, no derrotándolos en clave portuguesa o gaullista (en el caso de los generales ejecutados por su negativa a aceptar la independencia argelina), sino sencillamente prostituyéndolos. Eso no fue idea de Suárez. La democracia/burdel parte de Felipe y tal vez de instancias más altas y, para entonces, ya no estábamos en la Transición sino en la segunda fase, el intento priísta de pelotazos y gente guapa.
Para mi lo que hizo Suarez en aquellos momentos fue lo correcto,todo es mejorable, sí, pero eran las circunstancias y tal vez, excepto el Boss, nosotros lo hubiéramos hecho peor.
😉
ooops, lapsus: FRANCISCO Fernández Ordóñez.
Y una pregunta, ¿no le resulta extraño el accidente de don Fernando Herrero Tejedor? Qué coincidencias: ministro secretario general del Movimiento, Fiscal General del Estado (del Tribunal Supremo) e investigador del atentado contra el almirante Carrero Blanco (¿Fue realmente la ETA o la CIA?), y líder de la UDPE (el que iba camino de ser el PRI español para cuarenta años más como están en México).
Moraleja: El chófer ileso. ¿La Transición? Sí, la Ciudad Sanitaria Francisco Franco después se llamó Hospital Universitario Gregorio Marañón, y ahora el Gregorio Marañón.
P. S.: ¿Los Dogde eran duros de un lado y blandos de otro? Me parece que el Pegaso iba cargado… de Kissinger.
Redundas en lo ya dicho por mí. Claro que estuvo detrás la larga mano del «amigo americano». Pero con el mismo desparpajo que te haces esas preguntas me gustaría que se hiciesen otras a propósito del 23F (aunque ya se han hecho algunas pero todavía hay mucha omertá que rascar) y, sobre todo, de la muerte de Ynestrillas padre en el 86 made by ETA cuando este señor por aquel tiempo estaba más metido en complots regicidas que en antiterrorismo frontal (la alemana Facción del Ejército Rojo, gran partidaria del CONTRA PEOR MEJOR y de que todo el que desestabilice el sistema es aliado objetivo, sin importar su origen, habría visto y tratado al militar de muy distinto modo que lo hizo ETA -ah, claro, se me olvidaba, que también el 86 fue el año de las conversaciones de Argel…: todo acaba adquiriendo su dimensión-) y aún más, de la clave de inflexión que supone el 11M como ENTIERRO DEFINITIVO DEL ESPIRITU DE LA TRANSICION.
Si lo pensamos, aquí los presidentes van cambiando previa tramoya antidemocrática: salida de Suárez e interinato de Calvo Sotelo previos encuentros «poli/milis» entre PSOE y jerarquías castrenses cara a un «gobierno de concentración nacional» que desembocan en la voladura controlada de UCD y la victoria anunciada a un año vista del partido de Felipe (AP no era rival del PSOE cara al 82) y donde lo más anecdótico en realidad fue lo más cataclísmico a nivel formal (el 23F en sí mismo con Tejero en las Cortes pegando tiros y voces y practicando jiujitsu con Gutiérrez Mellado, y Milans sacando los tanques a pasear por la ribera del Turia); salida de Felipe previo contubernio del llamado «Sindicato del Crimen» como muleta para reforzar el por entonces escaso carisma de Aznar que no había logrado batir en el 93 a un PSOE ya bastante enmierdado; salida de Aznar reencarnado en su miniyo Rajoy previos campaña NO A LA GUERRA mayormente teledirigida desde Ferraz con su cataclísmico colofón del 11M que encumbrase al no menos escaso de carisma ZP, futuro mesías de plexiglas; y tal vez la salida de Zapatero sea la única salida limpia, sin tramoyas ocultas, salida por crack del país, por patada en el culo (en buena medida, en nuestro culo -como diría Agustín de Foxá-) de Merkel y Obama, por la creciente desafección del paisanaje hacia este elemento, por golpe interno del PSOE… (en realidad, tal como están las cosas, hoy por hoy la única tramoya oculta sería la que, en plan el culto a Garzón y otras miserias, intenta todavía prolongar el desorden zapateril como algo «salvable», «justificable», menos malo que otros escenarios).
Bien, bien, Vd. lo ha querido camarada, pues, ¿qué me dice de ésto que le dejo para su mejor consideración que la redundancia anterior (la de ambos dos)?
http://www.elpais.com/articulo/espana/ESPAnA/GOLPISMO_EN_ESPAnA_/_27-O_/27-10-1982/Fallece/ex/coronel/Crespo/Cuspinera/condenado/causa/27-O/elpepiesp/19860305elpepinac_25/Tes/
Moraleja: Si no es por la CIA, la Trilateral y el Club Bilderberg aún nos podríamos saludar a la romana de manera análoga como hacen esos retrógrados del puño en alto. Luego, ¿a visto qué democrátas y rupturistas somos aun teniendo un concepto diferente de la labor del duque de Suárez?
P. S.: ¿Qué Timocracia es esta que va a permitir que la abadía benedictina de San Lorenzo de El Escorial vaya a tener próximamente goteras y grietas por voladuras controladas?
Estimado Socrates, creo que el chófer tambien murio en el atentado. Pero como era un «simple» chófer, no se le dio ninguna importacia a su muerte.
Sobre Trevijano nada cito salvo que recuerdo sus disgresiones en el programa La Clave…y recuerdo que ilusionaba. Estoy de acuerdo al cien por cien con el análisis del artículo. Pero, y siempre hay un pero, de qué nos sirve saber sino para sufrir…las huestes de la Esteban, adormecidas, son felices en su ignorancia,se saben en «Democracia», y la vida pasa.
Lo he dicho, y lo diré, España es un país sin suerte, gobernado por personajes de la picaresca, de obras cortesanas de Calderón y Lope de Vega.
Nadal no gana si existe Federer…España tiene un rey francés paramayor gloria de la Francia republicana que nos soltó el muerto.
«de qué nos sirve saber sino para sufrir…» Verá, creo entenderle y entiendo que en el período de la Transición reinó la confusión. Hoy en día seguimos instalados en ella, cosa que es mucho peor que vivir en el error, porque del error podríamos salir pero, de la confusión no podremos salir jamás.
Moraleja: Sufrir es confundirse pero, no errar.
P. S.: La demotrile se valió de la confusión reinante propiciada por los trileros de la Patria, a los que confundimos con nuestros padres.
Aunque ya hace tiempo que creo lo expuesto por Ramón, nunca habia hablado del tema.
Seamos nosotros, inteligentes, cultos, trabajadores y buenos formadores, y comenzemos de una vez a hacer nacer el cambio necesario aunque algo distante.
Saludos cordiales
Pues yo creo que no fue un timo de transición.
Suárez y el rey hicieron lo que pudieron y les dejaron. A ver quien iba a proponer un referéndum de república con los militares en alerta.
Que lo podían haber hecho mejor? Seguro. Todo es mejorable, pero si hicieron todo lo que pudieron, eso les honra. A veces que las cosas salgan bien o mal no depende de que las hagamos bien o mal, sino de otros factores que sin quererlo nos convierten en mejores o peores sin quererlo.
Lo que si me parece un timo es como traicionaron a Suarez algunos de los suyos, y mas timo todavía el que nos coló Felipe Gonzalez con todos los años que tuvo para hacer las reformas que hoy nos permitieran tener un sistema mejor. El «cambio» fue solo para ellos.
Ramón, tu artículo es interesante en cuanto a que saca a la luz otro punto de vista de nuestra historia reciente, y aunque no lo veo como tu, artículos como el tuyo son necesarios porque a cada uno nos hacen reflexionar un poco. Gracias.
Escribo desde el móvil. Disculpas por las faltas. Ya sabéis, herrar es de herradores.
Transcribo parte del primer comunicado oficial conjunto como organismo unitario de Coordinación Democrática (la fusión de Junta Democrática de España y la Plataforma de Convergencia Democrática) que nunca será llamada así por la opinión pública ni por la prensa porque es bautizada con el nombre, mucho más elocuente, de Platajunta: «Coordinación Democrática invita […] a los sectores económicos, profesionales, culturales y de la Administración pública, así como a las instituciones eclesiástica, militar y judicial, a la apertura de un diálogo en aras de los superiores intereses patrios, que conduzca a la realización de la alternativa pacífica aquí definida.»
Pues bien, grosso modo la propuesta de ruptura con el régimen autoritario anterior, del grupo de Trevijano, Calvo Serer, de Borbón Parma & Cía. (excepto el PSOE) que estaba ahí para enredar y después chivarse al de la raqueta firmada por Santana y al de la Sanglas trucada, era la siguiente, tal y como el mismo ex Carabanchel decía: «La idea es que la democratización real sólo se consigue desde un poder político independiente que surja de la sociedad y que asuma las funciones del Estado cuando tenga la suficiente potencia para transformarlo en democracia. Para conservar el carácter pacífico del proceso es necesario un acto de ruptura de las leyes políticas de la dictadura que abra simultáneamente a todas las clases y categorías sociales el proceso constituyente del Estado democrático. Nosotros rechazábamos la pretensión de algunos partidos de colocarse en posición de ventaja en unos pactos preferentes con el gobierno de la dictadura.»
¿Qué (te) quiero significar con lo anterior? Pues, muy sencillo de explicar y de entender: La Transición y su espíritu reformista pasteleante del «café para todos» es un pacto entre la oligarquía de la Oposición y la del franquismo. Luego, la componenda que confeccionaron los amigos de la chica de la curva propició el déficit democrático que padecemos hoy en día tanto Tú como Yo, como aquél.
Gracias por tu aportación al debate. 😉
Moraleja: El «y si» en la vida te entierra en ella. Y a nosotros el duque y el Rey nos lastraron con el miedo y la idea del «y si el Ejército…».
P. S.: Si la División Brunete entra por La Castellana la tarde-noche del 23-F, quizá hoy seríamos más demócratas de lo que decimos ser.
Acabo de constelar tu comentario mayormente por este párrafo:
«Lo que si me parece un timo es como traicionaron a Suarez algunos de los suyos, y mas timo todavía el que nos coló Felipe Gonzalez con todos los años que tuvo para hacer las reformas que hoy nos permitieran tener un sistema mejor. El “cambio” fue solo para ellos.»