La festividad de la Navidad, celebrada todos los años por los cristianos en el mes de diciembre, conmemora el nacimiento del niño Jesús. Dado que el niño personifica, como he indicado en otro lugar, la totalidad que ha de ser desplegada en el proceso de individuación o de autorrealización, “mientras no os hagáis como niños” el ser humano permanecerá en el estado de infantilidad de un puer aeternus con complejo materno.
Sobre el simbolismo de la Navidad, dice Isidro J. Palacios en “La Navidad, los Magos y el Rey del Mundo”, lo siguiente:
“El 25 de diciembre no es sólo la fecha del acontecimiento histórico de la manifestación real y exterior del Rey del Mundo. Ese día es, como se ha dicho, un símbolo, y más que un símbolo, un rito, mediante el cual se verifica en el interior de cada persona el nacimiento del “Rey de reyes”. Todo ello al objeto de que cada uno tenga el norte al que fijarse, para ser dominador y señor de sí mismo, pues, al fin y al cabo, “dioses somos”, tal y como nos recuerdan los Padres de la Iglesia. Sólo es menester tomar de la “sangre real” que cada cual lleva dentro de su corazón, y leer en el libro de la sabiduría divina que encontrará impreso tras sus párpados.
Para encontrar el cáliz de Nuestro Señor, no hay que ir muy lejos. Tenemos cerca la copa donde Xristo bebió y dio a beber durante la última cena, y donde José de Arimatea recogiera la sangre del Maestro crucificado. ¡El Santo Graal está dentro de nosotros!…”
Cuando el individuo evoluciona, en el sentido de des-identificarse o des-ilusionarse de la imagen primigenia, hacia una objetivación de los contenidos de lo inconsciente, resulta de ello la posibilidad de analizar lo inconsciente y llevar a cabo una síntesis de los elementos conscientes e inconscientes. Se produce así un desplazamiento desde el ego consciente al arquetipo del Ser, convirtiéndose éste en adalid del Destino individual. Lo que viene representado en sueños con la imagen del hermafrodita o del andrógino, un elocuente símbolo del Ser o del Anthropos interior, de la luz de Dios que es la chispa divina en la “región más elevada” del alma humana. Este símbolo figura la meta más elevada de todo ser humano, puesto que alude a la más completa autorrealización, nunca alcanzable en su totalidad sino sólo aproximadamente.
El Maestro Eckhart expresa el nacimiento del “niño interior” del siguiente modo: “Yo ya he dicho: hay en el alma una potencia que no está unida ni al tiempo, ni a la carne, que emana del espíritu, permanece en el espíritu y es absolutamente espiritual. En esta potencia, Dios se encuentra totalmente; florece en ella y reverdece en toda la alegría y todo el honor que Él lleva en sí mismo. “Hay en el alma una parte secreta donde Dios vive y hay en el alma una parte secreta donde el alma vive en Dios… Si, en el presente instante en que yo me encuentro aquí, hubiera salido de mí mismo y estuviera completamente libre de todo, ¡ah! el Padre celestial engendraría inmediatamente en mí a su Hijo único y con tanta pureza que mi espíritu podría engendrarlo de nuevo a su vez”.
Pese a lo extendido del símbolo de la Cruz que carga Cristo, y a su raigambre en el mundo occidental, al igual que sucede con el niño Jesús, parece que el común de los hombres y de las mujeres ha olvidado su profundo significado. Ese símbolo encarna la particular condición humana, la tensión de opuestos que subyace, de un lado, a la adaptación a las exigencias del cuerpo, de la familia, de la sociedad, esto es, del ámbito material, y, de otro, a la respuesta a las demandas de ese vasto mundo interior que es lo inconsciente.
El héroe ha de tomar el camino del medio, el de la Cruz, y ese sendero lo conduce a su propia muerte. Pero esa muerte, que simboliza la inmolación de la vida prosaica y, por lo tanto, de una vida colmada de ignorancia, ingenuidad y puerilidad, en último término, la muerte del ego, da lugar a un renacimiento: el nacimiento del niño divino.
En los mitos esa muerte iniciática viene simbolizada por la entrada del héroe en las fauces de una ballena de cuyo interior resurgirá renovado, o bien, por la lucha con el dragón. El Dragón, como la Cruz o el madero en el que fue crucificado Cristo y, antes que él, toda una caterva de héroes consortes o hijos de la Diosa, simboliza la Madre, o sea, en definitiva, la Diosa. Pero quien se enfrenta al dragón y lo vence obtiene como premio el tesoro difícil de alcanzar, un Conocimiento (gnosis) que no es de este mundo, sino del otro, del más allá.
El puer re-nacido, recién nacido de las entrañas de la Madre, puede ser considerado como un puer aeternus genuino, el prístino hijo de la Diosa. Y es, precisamente, la secreta relación del puer con su Madre, tan íntima como incestuosa, la que es grata a Dios. El resultado de semejante acto incestuoso es que la Madre hiere al puer, al transformarse en una serpiente que lo muerde, envenenándolo y paralizándolo. Lo que este mito simboliza, traducido al lenguaje de la psicología, es la emergencia de contenidos desde las profundidades de lo inconsciente.
Inicialmente, éstos aparecen bajo la forma de un aluvión de sentimientos negativos de culpabilidad, de inadecuación, etc., que es lo que tiende a suceder cuando el individuo se enfrenta a su sombra. Sin embargo, si después de un tiempo de afloramiento de sentimientos y afectos que parecen desgarrar al individuo, invadiendo a la consciencia como si de una violación psíquica se tratara, se consigue que el ego permanezca firme y trabaje con esos sentimientos, comienzan a emerger las imágenes de lo inconsciente, tanto en sueños, como en toda suerte de manifestaciones “artísticas” como la pintura, la escultura, la poesía, etc… Originariamente, la forma que adoptan esos contenidos es de lo más grotesca y las imágenes primordiales, que van tomando forma, ya no tienen que ver con la biografía del individuo. Así, lo que en un principio parece provenir de la sombra familiar, es decir, aquellos conflictos irresueltos por los padres, abuelos y, en general, por los ancestros, no es sino la manifestación más próxima de bretes y contrariedades que afligen a todo el colectivo de una época. Por lo tanto, allende la sombra individual hallamos una larga cola de dragón que nos conecta con la serie filogenética de nuestros antepasados, en último término, con los arquetipos de lo inconsciente colectivo psicóideo. Y, si se logra penetrar más allá de la maraña, puede entreverse que dichos conflictos tienen un carácter cósmico o universal. Lo que exige del puer que afronte la emergencia de arquetipos de un modo creativo, y es que la verdadera creatividad radica en su contacto con la fértil tierra de lo inconsciente, de la que, en propiedad, él ha renacido.
Buenos días!
Tu artículo me lleva a la reflexion en la que suelo acabad a menudo.
El Camino debemos hacerlo trabajando nuestro interior. No sólo por el bien de los que nos rodean, entre otras cosas para tratar de controlar al tirano de nuestro ego, y no dañar a los demás. También para que uno mismo vaya tomando conciencia de lo que significa nuestra breve estancia por estos lares.
Deberíamos dar sentido a nuestra vida y como tenemos capacidad para ello, hacer fácil la de los que nos acompañan en el Camino.
Buena semana a todo@s.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:01
@DOÑAJIMENA, Gracias Doñajimena por tu comentario. Sólo puntualizaría que la vida, desgraciadamente, no es nada fácil. Ahora bien, si entiendes lo de hacer fácil en el sentido de no cargar con nuestras propias inmundicias a quienes nos acompañan en el Camino, entonces, totalmente de acuerdo.
Muy buena semana a tí también.
“Vino a los suyos, y los suyos no le recibieron” (Ioh I, 11)
Ese es el verdadero drama de la Natividad del Señor, que la Humanidad entera, los suyos siguen sin recibir al Verbo hecho hombre.
“Cristo ha venido; pero por una misteriosa y terrible desgracia no todos lo han conocido, no todos lo han aceptado (…).” (Pablo VI, Audiencia general, 4-XII-74)
Buenos días nos dé Dios y líbrenos de las concepciones de la Natividad gentiles y paganas.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:04
@Socrates, Amigo Sócrates, gracias por tu comentario y por haberte tomado el tiempo de leer mi ensayo. Jejej, Tu última frase me ha sonado a “líbranos señor del Mal. Amén”. Recordemos que gentiles y paganos son también reconocidos, integrados y amados por Cristo.
El nacimiento.
La encarnación.
La esperanza.
superviviente Respuesta:
enero 4th, 2010 8:58
@Eliseo de Bullón, La loteria.
Bueno, pues este es un artículo para rumiarlo bien, me lo llevo en la mente al curro, para darle unas vueltas más. 🙂
Gracias Jose Antonio por el trabajo extra
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:05
@Isabel, Gracias Isabel por tus amables palabras.
Ocurre algo curioso con la Navidad. La mayoría de los sentimientos se transforman.
Todos somos o intentamos ser mejores. Algunos se disfrazan. Empiezan y se elaboran los propósitos para el nuevo año, en los que por supuesto hay que ser mejor personas, ocuparnos de los menos favorecidos, … cuántas cosas nos proponemos que la mayoría nunca llegan a su fín.
Recuerdos que afloran de nuestra niñez, risas, sorteo de Navidad (comenzaban las vacaciones que parecían tan largas…). Los padres saliendo a pedir nuestras cartas, el silencio y la espera de una noche larga esperando los regalos…
Ahora, han cambiado cosas, los padres intentamos mantener ciertas costumbres e intentamos pese a todo, que los niños mantengan esa ilusión. Y aunque no tengamos ganas, la vida sigue.
No todo es tan bonito. Algunos pese a la Navidad, vemos la realidad. Ya no disculpamos con tanta facilidad a quien nos ha hecho daño en el pasado año, nuestras conversaciones no son tan livianas. En ese periodo de madurez, intentamos asumir nuestros defectos, que siempre superan curiosamente las virtudes.
Y a la vez, es tan sencillo. Sólo se trata de seguir los dictámentes de nuestro corazón y seguir nuestras intuiciones.
Quien no estamos acostumbrados a hacer el mal, seguiremos caminando actuando de la misma manera. Ayudaremos, pero no en fechas señaladas, siempre. Y sin propagandas.
Intentaremos mantener un espíritu sano en nuestras casas. No hace falta adornos.
Nos seguiremos acordando de los que ya no están, como durante todos los meses anteriores.
Daremos la mano y la ofreceremos a quien la necesite.
Seremos benévolos e intetaremos buscar un por qué en las actitudes maliciosas de la gente. Quizá a ellos tampoco les enseñaron a ser de otra manera.
Nos reuniremos, cantaremos, bailaremos si es necesario la conga por la calle. Sin música. La llevamos dentro.
Y seguiremos buscando, aún sin encontrar, ya que la vida es un continuo camino. Lleno de colores en nuestra mente. Sólo es necesario cerrar un poco los ojos e intentar adentrarnos en nuestro interior. Está lleno de buenos sentimientos. Porque si somos capaces de hacer determinadas cosas durante unos días, semanas o meses, amig@s, durante doce meses, no unos días…. es Navidad.
Y tampoco hemos hemos de sentirnos culpables si durante unos instantes, sentimos algún sentimiento negativo en nuestro interior, ese, también forma parte de nuestra existencia. Analicémoslo, e intentemos darle otra forma.
Gran día para tod@s.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:08
@Lisbert, Me quedo Lisbert con tus últimas palabras: “tampoco hemos de sentirnos culpables si durante unos instantes, sentimos algún sentimiento negativo en nuestro interior, ese, también forma parte de nuestra existencia. Analicémoslo, e intentemos darle otra forma.”
Gracias
Lisbert Respuesta:
enero 5th, 2010 9:04
@PLEROMA,
Gracias a tí.
Es que nos empeñamos en cambiar hábitos, costumbre e incluso sentimientos por unos días. Estamos obligados a reunirnos, pasarlo bien, disfrutar, no podemos discutir, es Navidad, pero qué ocurre los restantes 364 días?.
Pues intentemos los doce meses comportarnos humanamente y humildemente. Creo que no es tan difícil.
Saludos y gran año.
Entendiendo el mito como historia que orienta y conmueve a la gente, el mito religioso es el mecanismo más poderoso que jamás haya sido creado, además sirve como terreno psicológico donde los otros mitos pueden prosperar.
Sobre la Natividad, yo siempre he pensado que era el nacimiento del Sol tras el solsticio de invierno y llegado a su punto más bajo en el cielo.
Constatable desde hace siglos. Cuando cambie esto me avisas, por favor, va a ser un verdadero acontecimiento de cambio!!
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:10
@Bell, Amiga Bell, para mí, lo verdaderamente importante es la experiencia (Pistis) y la consciencia de ese mito que es la vida de cada cual.
Otro de los grandes errores de los creadores de la misma, de la Natividad. Impulsores a posteriori de una creciente y feroz norma consumista que más hace del Ser un ser colérico y ñampa-zampa, que un seguidor de doctrinas. Pero eso es su problema y ellos son los que deben solucionarlo dando imagen y fiel cumplimiento de sus dogmas.
Para mi la Natividad y la Navidad surgida de esta y otras maneras de entender una vivencia, no existe. Debe ser a diario el comportamiento, la alegría, la felicidad, las felicitaciones, el compartir, el juntarte en pos de unos ricos alimentos, el disponer de ratos de meditación, el poder llorar al recordar a los seres queridos ausentes, el poder mirar con ojos limpios a los niños que nos han hecho abuelos o que simplemente corretean a nuestro alrededor. Si esto es la Natividad, llámala como quieras, que venga 365 días al año. La otra no la quiero, pues salen las falsedades, las malas maneras y formas de compartir, de mirar, de soñar y de sentir. No me identifico con ello.
De todas maneras me parece un artículo interesante, profundo en parte y sincero en otras. Gracias querido amigo José Antonio.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:13
@Osnofla, Gracias a tí, Osnofla, por tu comentario. Sólo apuntar que la Navidad, tal como la entiendo, conmemora el nacimiento del niño divino, de Cristo, en el interior del Ser humano. Y este hecho sublime debe ser experimentado para comprender qué significado tiene la Navidad.
Al hombre le han encantado las fiestas desde que supo tocar un tambor. La parte lúdica del ser humano es muy importante, mientras que no olvide la profundidad de si mismo. Todo convive dentro de nosotros, el turron, las torrijas, los farolillos de la feria, los dragones chinos, la fiesta de la cerveza. No olvidemos que aquí estamos para formarnos, formar, recibir, dar, observar la belleza que nos rodea y la que innunda nuestras almas y las de todos los seres humanos. Estamos para vivir y ayudar a vivir, sin entorpecer caminos. Todos los días del año, pero algunos, con vestidos de colores…porqué no.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:14
@MARIAJO, Mariajo, gracias por tu comentario. Sólo añadiría que uno ayuda a los demás, en la medida en que se ayuda a Sí Mismo.
La maravillosa epifanía, la confirmación del crecimiento del principio luminoso. La historia tantas veces narrada de la venida de los sabios de Oriente. Aquí el trozo que narra esa parte, en un cuento de mi tierra:
“
“…Se oyó un sonido de música y cascabeleo,
y de pronto sin saber de donde
tres reyes de Oriente vinieron
Uno era alto, fuerte, recio, traía en sus manos un trozo de oro,
El otro, con el pelo blanco igual que la nieve que duerme en los cerros,
traía una cosa que llaman incienso,
y el otro, muy negro, igual que la noche, le ofreció de rodillas la mirra”
-Yo no sé mi hijuco ¿qué sería eso?, ya ves,
los pastores y después los reyes hasta el vinieron.
Porque Jesús era más que toicos los hombres que hay en el mundo,
contando los vivos y los muertos.
-¡Anda! ¡Vida mía!, ve y dile a tos esos que te dicen que mientes
que estás en lo cierto, que ha nacido Jesús Soberano,
el que iguala con el mismo rasero al pobre y al rico, al niño y al viejo.
¡Diles la gloria que has visto!
-¡Madre abuela! ¿si yo no he visto ná?
-Es verdad, tus ojos no han visto eso que te dicen que parece un cuento,
pero tan segura estoy que es cierto como este cariño que hacia ti siento.
Mi madre lo dijo como te lo cuento y toico lo que dicen las madres siempre hay que creerlo, que la fe es lo que salva, hijo mío, y la fe es un regalo del cielo.”
PD. Dedicado a todos y en especial a las madres.
Me place especialmente leer tus escritos, José, al igual que tus libros. Intuyo la realidad que desvelas y me agrada esa familiaridad.
“La síntesis de los elementos conscientes e inconscientes”…necesaria para todo re-nacimiento y transformación. El proceso que describes suele ser arduo y complejo, pero merece del todo la pena.
Un cálido abrazo tanto para ti como para el anfitrión y los componentes y lectores del blog.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:16
@Cristi, Muchas gracias Cristi, por todo. Primero, por tus amables palabras. Luego, por el trabajo que te has tomado al tratar de comprender lo que escribo. Y, como no , por haber leído mis libros.
Recibe un cálido abrazo tú también, así como el resto del los componentes del blog.
En una ocasión una amiga me dijo que tenía reparos en contar lo que sentía porque se sentía avergonzada de esos “sentires”.
Le dije que nadie tiene la exclusividad de pensamiento. Que todo es más universal de lo que podamos creer y que es bueno expresarlo si eso no te hace sentir peor, que también puede ser.
Por eso tal como nos dice el compañero José Antonio estamos relacionados con nuestros familiares y nuestros antepasados aunque no nos una a ellos un hilo directo de sangre. Somos lo que fueron y serán lo que somos, siempre con los toques personales e intransferibles que nos ofrece el ser únicos.
En referencia a los símbolos se tiende a plasmar en ellos los más recónditos pensamientos y los más execrables tabúes o, por otro lado, lo más deseado y venerado.
Pero ¿realmente es lo que interpretamos lo que se quiso plasmar en su momento? Podemos poseer muchos conocimientos pero esos mismos saberes nos pueden conducir de manera casi irremediable al más craso error.
Seguramente algún compañero del blog o de la vida interpretará un nacimiento desde una perspectiva totalmente diferente a otra compañera y no por ello dejará de ser uno más real o trascendente que el otro y los dos de igual interés o no. Supongo que es más fácil seguir la “pista” de aquél que lo hace todo basándose en las leyes escritas y aun así seguro que se le va la mano en alguna pincelada que otra de forma íntima, ahí la belleza.
“Bien aventurados (del verbo aventurar) los que creen estar en posesión de la verdad a través de conocimientos de otros”.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:20
@Luna, Hola Luna. Gracias por tu comentario. Ciertamente, es importante saber lo conectados que estamos al karma familiar y el trabajo que uno debe de hacer para trascenderlo, como bien dices. En otro lugar he escrito sobre este tema. Te dejo el enlace por si te interesa
http://psicologiaespiritualidad.blogspot.com/2009/10/el-karma-y-las-relaciones-de-pareja.html
saludos
Luna Respuesta:
enero 6th, 2010 13:14
@PLEROMA,
Gracias por el enlace Pleroma, me ha parecido interesantísimo, además está muy bien explicado para los que no somos expertos en estos temas.
Ese camino a seguir que nos marcas es muy deseable puesto que no solo consigue que estemos bien individualmente sino que los llamémoslos “efectos colaterales” también salen beneficiados convirtiéndose todo en una rueda que funciona a la perfección, o casi.
Un cordial saludo.
La Navidad vive encerrada en cajas durante 11 meses al año. ¿Que parte de nosotros encerramos también en cajas? Tendríamos que hacer un buen repaso porque a lo mejor hay cosas para usar y tener todo el año.
Solo se ve lo que se está en capacidad de ver. Se nos dice pedid y recibireis, buscad y hallareis, golpead y se os abrirá pero el camino es largo y la verdad se va revelando a su tiempo cuando estamos listos para escuchar y recibir. Que nuestra mente acceda a determinados conocimientos no implica que pueda asimilarlos y mucho menos que esa verdad que contiene se haga realidad por su solo entendimiento y aceptación. Por tanto solo nos queda trabajar, pedir, buscar, golpear y esperar que la certeza se haga realidad.
Kali, acompáñanos.
Violencia y destrucción,
recibid nuestro homenaje.
Ayudadnos a traer luz a la oscuridad,
a sacar el dolor y la ira
a donde pueda verse como lo que es:
el fiel de la balanza de nuestro
amor vulnerable y doliente.
Pon el hambre salvaje en su sitio,
dentro del acto de creación,
poder desnudo que forja un equilibrio
entre el odio y el amor.
Ayúdanos a ser las siempre esperanzadas
Jardineras del espíritu,
que saben que sin oscuridad
nada puede nacer,
como sin luz nada florece.
Recuerda las raíces,
Tú, la oscura, Kali,
impresionante poder.
(May Sarton, “The invocation to Kali”)
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:21
@alicia gonzalez, Hola Alicia. Muy bueno lo que nos envías. Gracias.
Hola José Antonio,
Me parecen muy interesantes tus reflexiones sobre la Navidad. Aunque también me parece, que la interpretación cristiana tiene algunos elementos, que integran símbolo con realidad. Cristo habla simbólicamente, en muchos lugares de los Evangelios y a la vez, su propia vida, es un ejemplo de como la historia se concretiza en un acontecimiento, que conjuga eternidad y tiempo. Como diría Kierkegaard, Cristo sería la eternidad hecha tiempo, y en el tiempo también se manifiesta, en lo contingente, la divinidad. En Cristo, Dios no es ajeno a nuestras vidas, pues sufre con nosotros y asume todo el mal del ser humano, dejándose matar, “absorbiendo” toda la negatividad del hombre, para así ayudarle a superarse a sí mismo.
Así, que según parece, más allá de los símbolos, la propia vivencia de los cristianos, ha de ser la de la propia encarnación, en sus propias vidas, de la realidad de Cristo. Lo que me pregunto, es por qué tan pocos lo consiguen…
Muy interesante lo del enfrentamiento con la sombra. En mi consulta soy testigo, de este tipo de procesos, en los que a través del enfrentamiento con el dolor y el afrontamiento del mismo, la gente vive importantes transformaciones, que convierten la energía destructiva interior, en energía creativa.
Saludos y enhorabuena por tu entrada.
Y me uno al comentario de Cristi, de que tus escritos y libros son muy interesantes. Los recomiendo a algunas personas que están en un proceso de autoconocimiento y autodescubrimiento.
Un abrazo
Maribel
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:30
@maribelium, Muchas gracias Maribel por tu comentario y por explicar la vivencia de los cristianos. Lo cierto es que, lo que expresan los cristianos, es algo muy valioso porque representa un pedazo de la Verdad. Pero, como sabes, tan válida es la versión cristiana de la experiencia, como la pagana (representada en las “religiones mistéricas”), como las Judias, Musulmanas, Taoistas, etc… Otra cosa son las raíces del alma occidental y la afinidad de esta por el mensaje cristiano. Sobre este asunto escribí una entrada en mi blog, te dejo el enlace por si te interesa:
http://psicologiaespiritualidad.blogspot.com/2009/11/raices-cristianas-del-alma-occidental.html
Gracias por haberte leído mis libros. Me alegra que te hayan gustado tanto como para recomendarlos.
Un abrazo
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:31
@maribelium, Ahh, Maribel, por cierto, al final cada uno manifestará esa Verdad a su manera particular.
PLEROMA Respuesta:
enero 5th, 2010 2:33
@maribelium, En tanto, en cuanto haya experimentado el nacimiento de cristo en él.
Otra abrazo
Hola amigo Pleroma. Ya me puedes disculpar por no haber escrito ayer en tu post, pero es que desde las 7 de la tarde de ayer me fue imposible conectar con el blog, no sé el motivo, pero la cosa es que a las 11cuando intenté por última vez y pude establecer la conexión era ya un poco tarde para mí.
Muy interesante tu artículo respecto a la simbología de la Navidad. La relación de las culturas o religiones pre indoeuropeas con las actuales religiones en general y el cristianismo en particular, es más que evidente, coincidiendo incluso las fechas mágicas de antaño con las fechas religiosas de la actualidad. Tiene toda la pinta de que los sacerdotes de las nuevas religiones supieron adaptarse a las culturas del pasado, en un claro ejemplo de procurar el tránsito de las viejas culturas a las nuevas de la manera menos traumática posible.
Como bien sabes, el nacimiento de Jesús, símbolo del Alma humana y divina, el Cristo y su Reino, coincide con el nacimiento del Sol, también símbolo del Alma, el Ángel solar, en el Sostilicio de Invierno, donde deja de decrecer su influencia y comienza a crecer hasta el Sostilicio de Verano donde alcanza su máximo esplendor para a su vez comenzar a decrecer hasta el nacimiento, otra vez, del niño Jesús, el Cristo solar de otras religiones.
En el caso que sea cierta la fecha del nacimiento de Jesús, coincide su venida solar a la Tierra con el nacimiento del Sol a un nuevo ciclo ascendente; y en caso que haya sido una fecha adoptada con postereoridad, no cabe duda que las personas que así lo decidieron, sabían bastante de las antiguas tradiciones que por otra parte en algunas zonas del norte de España no fueron totalmente erradicadas, o casi, hasta comienzos del primer milenio de la Era cristiana. Muchas gracias por tan bien elaborado artículo. Un saludo cordial, estimado amigo.
atati Respuesta:
enero 5th, 2010 17:11
@atati,
Perdón, “comienzos del segundo milenio” y no del primero como he puesto más arriba.
El mensaje me resulta muy familiar y creo intuir su profundo significado. Dado que hasta ahora no había leído nada en la línea de este texto, no me queda otra que sorprenderme.
Gracias y enhorabuena al autor.